Asegura que cuenta “con los mecanismos e intrumentos oficiales de la Administración Central’ para desempeñar esta labor
La Delegación del Gobierno en Melilla, a través de un comunicado de prensa, desmintió ayer “categóricamente” que el secretario general de la Asociación Musulmana de Melilla, Abderramán Benyahya, “haya actuado como mediador o negociador de esta institución del Estado en los cortes que se registraron en la frontera de Beni-Enzar de hace casi dos años”.
Además, la Delegación afirma en su nota que “desconoce si Benyahya ejerce como asesor para otras administraciones; lo que sí que tiene claro, es que no actúa como tal para el estamento que dirige Gregorio Escobar ni para ningún otro organismo perteneciente a la Administración General del Estado”.
Por último, según se aclara en el escrito, “la Delegación del Gobierno no necesita ningún mediador externo para abordar asuntos fronterizos, cuenta ya con los mecanismos e instrumentos oficiales de la Administración Central”.
Este desmentido de la Delegación del Gobierno viene a colación del realizado por Benyahya quien se defendió el pasado miércoles en un comunicado de prensa –del que se hizo eco este medio en su edición de ayer– de las acusaciones que previamente se habían realizado desde la formación socialista colocándole como defensor de la marroquinidad de Melilla y partícipe en algunas de las revueltas ocurridas en la frontera.
En su defensa de estas acusaciones, y ante las fotografías que mostraron los socialistas, Benyahya dijo que su aparición en éstas era ejerciendo de “mediador y negociador”, función de la que según explicó “eran conscientes y parte tanto el delegado del Gobierno, Gregorio Escobar, como el secretario general del PSOE, Dionisio Muñoz”.