La crisis incrementa más de un 30% los intentos de fraude a seguros en Melilla

Más del 88% de las estafas que se produjeron en la ciudad fueron con automóviles.

La picaresca aumenta en los momentos complicados. Cada uno trata de sortear las dificultades como puede y algunos optan por una forma poco ética de conseguir algo de dinero. Los intentos de fraudes a seguros aumentaron el año pasado más de un 30% en Melilla en comparación a 2011. Los datos se extraen de un estudio elaborado por la Asociación Empresarial del Seguro (Unespa). En concreto, en Melilla se registraron en 2012 un total de 189 intentos de fraudes a aseguradoras, frente a los 141 de 2011.
Los datos del informe apuntan que la mayor parte de estos intentos de fraude se produjeron en seguros de automóviles. En concreto, 167 del total , lo que supone que en este punto fueron 40 más que en 2011. En el conjunto del país la tendencia fue la misma y el mayor porcentaje de intentos de engaño a las aseguradoras fue también con coches. En seguros de vida se produjeron  6 casos de intento de estafa, 4 más que en el 2011.
El estudio apunta que en el conjunto del país el incremento de intentos de fraude fue del 11,9% en 2012, pasando de 130.959 casos a 146.792. Esto supone que gracias a las investigaciones llevadas a cabo por parte de las compañías aseguradoras se ‘ahorraron’ el pago de 411.117 euros en indemnizaciones, al descubrir que los partes presentados por los clientes no eran del todo reales.
Desde Unespa apuntan que el intento de estafa más habitual es ocultar que el vehículo ha sufrido accidente e intentar asegurarlo después, para una vez hecho el contrato, dar parte por unos daños anteriores a la firma del mismo. Asimismo, apuntan que continúa habiendo redes delictivas que se encargan de simular accidentes para que empresas o particulaers puedan cobrar sus seguros. No obstante, indican que en el conjunto del país en los úlitmos meses se ha detectado un incremento en los fraudes no profesionales, es decir realizados por los propios asegurados, que han simulado robos o incendiso en sus negocios para intentar estafar a las aseguradoras.
La crisis, indican en este informe, puede ser una de las causas de este incremento en los intentos de estafas. De hecho, señalan que se ha producido un importante incremento en los intentos de fraude de baja cuantía, hasta 500 euros, un tipo de infracción que no se relaciona con estas redes delictivas, sino con particulares que tratan de engañar para sacar algo de beneficio. Ante esta situación, las aseguradoras han aumentado la inversión para investigar y detectar este tipo de acciones.