EAPN y Aspanies echan en falta una mayor promoción del voluntariado entre los jóvenes y mayores, pues son el principal valor y motor de las organizaciones sin ánimo de lucro.
Esta semana el Campus de Melilla acogía la celebración del primer Encuentro de ONGs de la ciudad en las que participaron EAPN y Aspanies, entre otras entidades. Fue una buena oportunidad para que cada ONG expusiera y diera a conocer su actividad y campo de acción a los estudiantes del grado de Educación Social y es que, en general, la crisis económica anima a los melillenses a hacerse voluntarios. Una labor altruista que requiere, sin embargo, un alto grado de compromiso. De ahí que el lema de estas jornadas fuera ‘Conocerlas es comprometerse’.
El responsable de EAPN en Melilla, Jorge Aldao, señaló a El Faro que en los tiempos que corren se ha despertado el sentimiento del voluntariado en la sociedad melillense y española. Ayudar a las personas que peor lo están pasando es el principal motivo por los que los ciudadanos se acercan a las ONG, pero también para solicitar formación. No hay una edad predeterminada para ser voluntario ni un perfil específico. Desde estudiantes universitarios hasta mayores colaboran con aquellas ONG que más se acercan a sus gustos o simplemente les ha llamado más la atención por el tipo de labor que realizan.
El responsable de Aspanies en Melilla, Carlos Esteban, sin embargo, cree que a pesar de la crisis económica en Melilla no se ha dado un movimiento voluntario destacable. “Aparentemente hay gente más dispuesta a dar parte de su tiempo, pero en Melilla la realidad no es esa”, afirma. En lo tocante a la entidad a la que representa, asegura estar contento con los voluntarios con los que cuenta porque cada uno se compromete a dar parte de su tiempo para acompañar y ayudar a personas con discapacidad.
No existe tampoco para Esteban un perfil determinado del voluntario. Si bien se da más frecuentemente entre los jóvenes entre 18 y 25 años, Aspanies también cuenta con otros voluntarios más mayores, generalmente, familiares afectados que ayudan en labores administrativas y en eventos puntuales.
En opinión de Esteban son los mayores y jubilados el voluntariado “más estable” porque al no tener obligaciones familiares pueden dedicar más tiempo a la asociación. Los jóvenes en cambio su tiempo depende mucho de las obligaciones con los estudios en el caso de los universitarios y de las obligaciones familiares, en el caso de los padres jóvenes.
Los voluntarios son para Aspanies uno de sus pilares fundamentales, su principal recurso y por ello, hay que mimarles. La persona que acude a una ONG para ofrecer su tiempo a otras personas no lo hace, lógicamente, con una motivación económica. La compensación va mucho más allá de un beneficio monetario, es aprovechar la experiencia para formarse tanto en conocimientos, gracias a los cursos de formación que también ofrecen las ONG, como en valores, al compartir vivencias y experiencias con otras personas.
Los que quieren colaborar y no saben cómo
En lo que sí coincidieron los responsables de EAPN y Aspanies, Jorge Aldao y Carlos Esteban, respectivamente, es que en Melilla falta fomentar el voluntariado entre la población. Si bien es cierto que las ONG están respaldadas por las instituciones, echan en falta que éstas fomenten el voluntariado como una forma de participación ciudadana. Aldao considera que “hay que dar más relieve a esta forma de participación ciudadana y no se hace todo lo que se puede para dar a conocer y fomentar el papel del voluntario”, dijo y agregó que, en definitiva, se trata de “personas que ayudan a otras personas y debería promocionarse estos valores”.
Por su parte, Esteban recordó que, al menos, hasta el año 97 sí se fomentaba el voluntariado como fórmula de participación ciudadana, pero a partir de entonces “desapareció” y no se sabe muy bien por qué. El apoyo institucional a las ONG de Melilla está claro, para el responsable de Aspanies, pero es el voluntario el prinicipal valor de una entidad y propone que se cree un “yacimiento de voluntarios”, pues conoce casos de melillenses que quieren colaborar y ayudar, pero no saben cómo hacerlo. En este sentido, el responsable de EAPN Melilla destacó que en otras regiones españolas sí se fomenta el voluntariado y se cuenta con proyectos específicos para la formación de voluntarios.