La junta de gobierno se niega a mantenerla en el Sagrado Corazón incluso en la novena
La Virgen de la Victoria, de forma totalmente colateral, se ha convertido en objeto de controversia entre los colectivos católicos, por más que todos ellos eviten expresamente los términos “polémica” o “debate”. Lo cierto es que sí existe desacuerdo, independientemente de que algunos puedan creer que es un tema meramente periodístico. El hospedaje eventual de la Patrona en la Iglesia del Sagrado Corazón, como consecuencia del terremoto que inhabilitó la Purísima, ha despertado una discusión entre los partidarios de mantenerla en su ubicación actual durante la novena y los defensores del retorno a su parroquia, como es el caso de la Congregación de la Victoria.
El día de la Patrona
La historia comenzó el 8 de septiembre durante el transcurso del día de la Virgen de la Victoria. En la misa homenaje a la Patrona, el vicario, Roberto Rojo, pidió que la Victoria se trasladara definitivamente al Sagrado Corazón en los días previos a la celebración de la festividad, con el fin de acercarla a los feligreses que, por motivos de edad o salud, tienen complicaciones para acceder a su templo en Melilla La Vieja. El vicario criticó en su homilía que hubiese tenido que ocurrir un terremoto para conseguir algo que “había querido desde el primer año” y añadió que no lo había logrado porque siempre había encontrado con “muchos noes”.
Ayer, en declaraciones a El Faro, Roberto Rojo reiteró que él carece de potestad para decidir sobre ese asunto y aclaró que la petición sólo se refiere al período de la novena. “La casa de la Victoria es La Iglesia de la Purísima”, subrayó.
De igual manera, el vicario recordó que es una petición que ya realizó el primer año al presidente Imbroda y que, en esta ocasión, la receptora del mensaje era la hermana mayor de la Congregación de la Victoria.
En la misma línea, se han postulado diferentes voces dentro de la propia comunidad de feligreses. Enrique Delgado, colaborador de este periódico, por ejemplo, defendió hace dos días que la Virgen de la Victoria siempre ha peregrinado por las parroquias de Melilla. “La propuesta lanzada públicamente por el vicario episcopal no es arbitraria, ni un capricho, ni tan siquiera original. Es un proyecto que ya se ha llevado a cabo en otras situaciones, en circunstancias muy diversas, pero con una misma intención: la Virgen de la Victoria pertenece a todos y no tiene un único templo”, escribió el domingo en las páginas de El Faro.
La Victoria, en la Purísima
La otra cara de la moneda es la Congregación de la Victoria. Para ellos simplemente no hay debate. Una vez terminen las obras en la Iglesia de la Purísima, la Virgen (que actualmente continúa en el Sagrado Corazón) debe volver a su lugar de origen. “En ningún momento ha existido tal debate, sólo personas que lo han reavivado en redes sociales”, declaró a este periódico la hermana mayor de la Congregación, María Piedad Castellano, quien recordó que la Victoria lleva en Melilla La Vieja desde 1741.
En este sentido, Castellano confesó “no llegar a entender la polémica” y confirmó que, aunque es un tema que puede ser hablado e incluso debatido, no entra en los proyectos de la junta de gobierno, quien apoya que la Virgen retorne a la Iglesia de la Purísima en cuanto finalicen las obras. La hermana mayor, asimismo, destacó la “afluencia numerosa” que concurrió a el templo durante los años en los que la Virgen descansó en él.
“En Melilla, no hay distancias”, fue la respuesta de María Piedad Castellano al ser preguntada por el principal argumento de los opositores: la mayor facilidad de acceso del Sagrado Corazón. “Hay soluciones para todo”, matizó, al tiempo que enumeraba algunas de las opciones alternativas que había provisto su congregación en años pretéritos, como poner un autobús.
El vicario, no obstante, pedía, a través de El Faro, que la hermana mayor “pregunte a los que vienen a misa dónde quieren que esté la Virgen. Pero que le pregunte a los que realmente vienen, no a todos los melillenses”.
Las redes sociales, como señalaba la responsable de la congregación, también se han hecho eco de la cuestión. Hasta el punto de que los detractores de la permanencia en el lugar actual han creado un grupo privado en Facebook, que cuenta ya con más de 700 usuarios y cuya descripción reza lo siguiente: “Este grupo nace con la intención de que nuestra Patrona, la Virgen de la Victoria, regrese a su templo en el Pueblo y para oponerse formal y frontalmente a aquellos que por capricho o comodidad y unilateralmente se oponen a ello. Por tanto (en adelante, la descripción original continúa en mayúsculas, el equivalente digital a hablar a gritos) que sepa el o los que defienden la opción de ‘no retorno’ que se van a estrellar. Melilla siempre defendió El Pueblo y por supuesto a su Virgen y Patrona.”