La Conferencia Virgen de la Luz atiende a más 460 familias con el banco de alimentos

En un año la solicitud de ayuda ha aumentado en casi 1.000 personas. Esta semana ha repartido 150 kilos de frutas, procedentes de las aprehensiones de las Fuerzas de Seguridad del Estado.

Ayer hizo un buen día para disfrutar de la playa, pero un grupo de personas pertenecientes a la Conferencia Virgen de la Luz de San Vicente de Paúl en Melilla optaron por entregar su tiempo y su amor a la labor del voluntariado. Esta institución lleva más de diez años trabajando por los melillenses que más precisan la atención de la sociedad. En el 2010, atendían a unas 1.300 personas y hoy son más de 2.000 a las que prestan socorro. Más de 460 familias de Melilla, musulmanas, cristianas y gitanas, reciben la ayuda de esta entidad solidaria, que lleva una semana trabajando sin descanso, como todos los principios de mes, en el reparto de comida del banco de alimentos del que disponen.
Doce almas solidarias llevan atareadas unos días juntando paquetes de alimentos para hacerlos entrega a las familias que cada mes recogen esta ayuda. Con sus fichas y documentación, van llamando una por una a cada representante de estas familias para que recoja su paquete.

Muchas personas necesitadas

La presidenta de la Conferencia Virgen de la Luz, María del Carmen Chaparro, aseguró que llevan trabajando “toda la semana agrupando alimentos para que tengan para todo el mes” y que se han repartido en estos días 150 kilos de fruta de las aprehensiones realizadas por las Fuerzas de Seguridad del Estado.
Mientras entregan personalmente los paquetes de alimentos, otras personas aguardan en la puerta, bajo el sol y el calor, que llegue su turno.
“Hay muchas personas que lo están pasando muy mal. No llegan a final de mes”, aseguró Chaparro.
Otra alma solidaria es el padre Miguel, de quien Chaparro comento que “es una maravilla de persona, entregada con los enfermos y ancianos”.
En este sentido, la presidenta de esta entidad comentó que hay muchas personas enfermas que solicitan su ayuda, algunas muy delicadas y con patologías como el cáncer.
“Son muchas las personas mayores que lo están pasando muy mal. Tienen que pagar el alquiler, que a lo mejor es muy poco, pero ellos consiguen ahorrar porque saben que lo fundamental es tener un techo y que no les quiten la vivienda”, apuntó.
También comentó que otras familias tienen niños con diversas alergias y que precisan de una serie de vacunas, que a pesar de la recetas de la Seguridad Social no pueden hacer frente a este gasto y acuden a esta institución.

La ayuda que prestan

Ayer por la tarde, varias voluntarias continuaban con el reparto de alimentos, como todos los primeros mes, pero de una forma especial en estos días sagrados de Ramadán.
Los paquetes de comida que ofrecen contienen arroz, tomate  frito, harina, todo tipo de pasta, cereales para beber, Colacao, leche maternal, leche normal, zumos y natillas.
“Tenemos censados a más de 460 familias, que hacen un total de más de 2.000 personas con las que estamos  trabajando, no solo ofreciendo comida, sino que realizamos visitas domiciliarias para ver la situación en las que están y ver cómo van evolucionando”, explicó Chaparro, quien añadió que espera que esta situación de necesidad no empeore en la ciudad.
Este desamparo la viven los colectivos cristiano, gitano y musulmán, y se debe al aumento del desempleo.
La Conferencia de la Virgen de la Luz ayuda a tres colectivos, tienen a un grupo por debajo de los 300 euros mensuales, otro por debajo de los 700 y el último, familias que cuentan con 1.000 euros al mes.   En este último caso, se trata de cinco o seis personas que cuentan con 1.000 ó 1.200 euros, pero tienen que pagar más de 500 de alquiler, más la luz, y no les queda nada para lo demás. “Con esta ayuda no se les soluciona mucho, pero es un aliciente para ellos”, explicó Chaparro.
Solicitan esta ayuda a través de las parroquias, Bienestar Social o porque conocen a esta entidad a través de otras personas. En este sentido, explicó que algunas personas salen adelante porque han encontrado trabajo o se han informado para hacer cursos y formarse.
Los alimentos que reparten los manda la Comunidad Económica Europea, y aunque en la ciudad hay varios bancos de alimentos, éste es el que mayor número de personas atiende. Los kilos de alimentos depende del número de componentes de cada familia, pero se les intenta dar para que cubran todo un mes. Todos los productos son de marcas de gran calidad y, por encima de todo, las familias demandan la leche materna y la leche normal.

Más que alimentos

“Esto tiene mucho trabajo, pero me acuesto sabiendo que hay criaturas que tienen para un vaso de leche”, explicó Chaparro.
En Ramadán están más volcados con los musulmanes y en Navidad con los cristianos, pues hay personas que les supone un lujo comprar unos mazapanes y también se hace a los niños una fiesta por el día de Reyes, para que cuenten con juguetes.
Esta institución solidaria y sin ánimo de lucro no sólo aporta sus alimentos, sino que también hace frente a gastos corrientes de las familias que tutorizan.
Así, han socorrido en algunas ocasiones a los pagos de los recibos de la luz o de alquiler de viviendas, “pero formamos a las familias para que ellos asuman sus responsabilidades, como son el pago del alquiler de la casa, la luz, aunque luego no les quede ni para una botella de butano”, explicó la presidenta de esta entidad.
También facilitan productos para la higiene personal o los uniformes y los zapatos para los niños. Y es que una de las principales tareas de la Conferencia de la Virgen de la Luz es asegurarse de que todos los niños de las familias a las que ayudan están escolarizados, en caso contrario, ellos mismos apuntan a los niños a los centros docentes.  
En este sentido, se interesan por las notas y en algunos casos se les proporciona apoyo escolar a través de dos profesoras voluntarias. Además, se hacen cargo de adquirir los libros de texto para estos niños.
“Incluso alguno de ellos necesitaban gafas y hemos ido a comprárselas, pues vimos que en su casa estaban leyendo con una vela al lado porque no veían bien”, aseguró Chaparro.
También comentó el caso de niños que no tenía un vaso de leche y lloraron al llegar los voluntarios con un paquete de comida para darles un desayuno. “Es increíble ver llorar a un niño en pleno siglo XXI al ver un vaso de leche con Colacao”, comentó.
Por otro lado, Chaparro agradeció la ayuda de la Ciudad Autónoma, que les ha prestado el local actual en el Tiro Nacional, más grande que el que tenían antes, y también la colaboración de la Consejería de Bienestar Social y Educación.

Agradecimiento desde el Voluntariado

Un componente del Voluntariado Cristiano de Prisiones aprovechó la ocasión para agradecer de forma pública la ayuda que está recibiendo el preso que fue liberado este año a petición de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Cautivo de Medinaceli por parte de la Conferencia Virgen de la Luz. En este sentido, remarcó que esta institución se está haciendo cargo de parte del pago del alquiler de la casa de esta persona que fue liberada y que tiene una familia muy numerosa, pues suman diez componentes. El seguimiento de este liberado se realiza a través del Voluntariado Cristiano y cada mes se da un reporte al magistrado de Vigilancia Penitenciaria Juan Rafael Benítez.