Categorías: Sucesos y Seguridad

La COA sufre cuatro agresiones en una semana y suspende dos líneas

En Mariguari, ayer por la mañana, y en Cabrerizas por la tarde, rompieron las lunas de los autobuses.

La Cooperativa Ómnibus de Autobuses (COA) de Melilla decidió ayer suspender las líneas 5 y 6 tras sufrir dos autobuses sendas agresiones en Mariguari, por la mañana, y en Cabrerizas, por la tarde. Estas dos últimas agresiones completan una semana de incidentes, según explicó la empresa a El Faro. Hasta que no se calmen los ánimos no se retomará el servicio en estas líneas.
Por la mañana el autobús que cubre la ruta hasta el paso fronterizo de Mariguari fue atacado con piedras, y por la tarde, el vehículo que cubre la ruta en Cabrerizas recibió un ladrillazo que rompió la luna de la puerta del conductor.
No se han producido daños personales, por fortuna, pero la compañía decidió suspender ambas líneas por el peligro que supone para viajeros y viandantes que un autobús de la COA sea atacado. Y es que, especialmente en verano, los conductores llevan la ventanilla bajada y la piedra o ladrillo puede impactar contra el conductor, hacer que éste pierda el control y provocar un accidente en el que se vean involucrados peatones y viajeros.
Pero esta semana, los autobuses de la COA han sufrido al menos dos agresiones más a su paso por el barrio de La Cañada de Hidúm. Desde la empresa, se ven obligados a suspender el servicio en los barrios en los que sus autobuses son atacados no a modo de castigo, sino para evitar daños a terceros, explicaron a este diario.
Lamentan, de hecho, que por culpa de unos gamberros, los vecinos que utilizan habitualmente la COA se vean afectados.

Una peligrosa diversión
Desde la COA temen que en este 2014 vuelvan a producirse este tipo de altercados y tienen fundadas sospechas de que en la mayoría de los casos son menores de edad los que lanzan piedras y ladrillos contra los autobuses a modo de diversión, pero ésta es muy peligrosa por las trágicas consecuencias que pueden desencadenar este tipo de actos vandálicos.
Por ello, la empresa denunciará ante la Policía Nacional los dos ataques sufridos en el día de ayer, pues los vándalos deben acatar las consecuencias de sus actos.
Estos ataques, consideran desde la empresa melillense, parece que se han vuelto más habituales y debido a una mayor frecuencia de estos incidentes tiende a verse “como normal, pero no lo es”. La COA cree además que se trata de pandillas formadas por menores de edad que se juntan con jóvenes, también autores de este tipo de incidentes.
Además, los daños causados no están cubiertos por el seguro, por lo que es la COA la que tiene que sufragar los costes de la reparación de los cristales dañados. “Llevamos años sufriendo este problema que tiene difícil solución. Además, los seguros no se hacen cargo de este tipo de daños, pues ya es conocido que en Melilla tenemos este problema”, aseguraron desde la empresa.
La empresa lamentó que este 2014 ya comience con nuevos ataques a sus autobuses. El año pasado terminó “muy mal” y temen que las agresiones se vuelvan a repetir. El pasado 28 de diciembre, el día de los Santos Inocentes, uno de los vehículos que cubren la línea de La Cañada sufrió un espectacular ataque con una catana. Supuestamente la intención era llevarse la recaudación del día, pero el agresor no se llevó nada. Huyó cuando llegó al lugar una patrulla de la Policía Local, pero volvió con un grupo de una treintena de jóvenes del barrio que destrozó el vehículo policial.  
El autor del catanazo a la COA fue detenido el pasado 19 de enero en la denominada ‘Operación Cosaco’, con otros diez jóvenes, implicados todos ellos en los disturbios de La Cañada del día 10 de enero.

Cuatro agresiones
Esta semana se produjeron dos ataques a la COA en La Cañada y en la jornada de ayer dos más en Mariguari, por la mañana, y en Cabrerizas, por la tarde.
Daños materiales  
Afortunadamente no hay que lamentar daños personales, pero la rotura de los cristales supone un gasto adicional para la COA, pues los seguros no cubren los actos vandálicos y más sabiendo la problemática que existe en Melilla al respecto.
Menores de edad
La empresa cree que la mayoría de los ataques que sufren sus autobuses están protagonizados por menores, que no son conscientes de las peligrosas consecuencias de sus acciones a terceras personas y ante la justicia. Por ello, la COA ha decidido denunciar las agresiones que sufren.
Suspensión de líneas
La COA suspendió ayer dos líneas y aclara que no son a modo de castigo para el barrio, sino para proteger a peatones y viajeros. Si un ladrillazo o una pedrada daña al conductor, éste puede perder el control del autobús y provocar un accidente mayor, de consecuencias trágicas.

Compartir

Artículos recientes

Prueba Video Embed DailyMotion

La segmentación geográfica no funciona. Compruebe si la geolocalización IP está habilitada en su cuenta…

3 semanas hace

Los Caleros de Ayamonte de Pepe Gámez

En la obra pictórica presente en Melilla de escultor y pintor Pepe Gámez (Melilla, 20…

3 meses hace

Indagando sobre el sentido del temor a la muerte

Hoy quisiera invitarlos a reflexionar sobre un asunto que nos interpela, casi en igual medida,…

3 meses hace

Percebes

De Galicia al Mediterráneo Si vemos la imagen de una colonia de percebes (Pollicipes pollicipes)…

3 meses hace

Derecho a discrepar

Dedicaba el diario El País dos páginas de su publicación dominical del pasado domingo, 4…

3 meses hace

Verano del tiempo viejo (VII)

Queridísimos; Si algo caracteriza a la señora Díaz Pérez (doña Yolanda, "Yoli", "Yoli O' Trapiño"),…

3 meses hace