La Ciudad se plantea no abrir Horcas Coloradas si no puede garantizar la seguridad de los bañistas

Según el viceconsejero de Medio Ambiente, Guillermo Merino, el estado de la playa no permite la instalación de los servicios básicos. No obstante, se están estudiando las posibilidades a pesar de que la competencia es estatal, señaló.

La Ciudad Autónoma podría decidir no abrir este verano al público la playa de Horcas Coloradas “si no podemos garantizar la seguridad para los bañistas”, según afirmó ayer el viceconsejero de Medio Ambiente, Guillermo Merino.
Y es que, según explicó apoyado en varias fotografías de la zona, “los técnicos están viendo que no se van a poder instalar los servicios básicos” como son las pasarelas, sombrillas y demás mobiliario contemplado en el Plan de Playas 2011, a causa de la desaparición de la práctica totalidad de la arena de la playa que, a día de hoy, presenta un aspecto “de abandono que es como el Gobierno central nos entregó el proyecto”, recordó Merino.
Así pues, las numerosas piedras y restos que hoy se encuentran en la orilla e incluso “lo que hay en el fondo en los primeros 25 metros agua adentro, supone un peligro para los bañistas y usuarios de la playa”, afirmó Merino. Unos restos que no son otros que los procedentes de “la escombrera que había antaño que ha estado años y años ahí”.
“¿Dónde quieren que pongamos las sombrillas,  las pasarelas y las duchas, encima de las piedras?”, preguntó el viceconsejero, “no podemos instalar los servicios básicos porque está inutilizable”. Situación que achacó a la mala planificación del Ministerio de Medio Ambiente y del Gobierno central en este proyecto en el que se han invertido 17 millones de euros.
Además, Merino consideró “lamentable” que la Ciudad Autónoma haya tenido que optar finalmente por instalar aseos químicos en la zona cuando se había pedido que se acondicionara un espacio para ofrecer unos aseos de la misma calidad que en el resto de las playas de la bahía, pero, sin duda, para el viceconsejero  de Medio Ambiente de la Ciudad el proyecto de Horcas Coloradas ha sido “precario, sin servicios y una tomadura de pelo para los ciudadanos”.

‘Fallos técnicos’

Para Merino no es perdonable algunos fallos técnicos cometidos por “esos sabios ingenieros del Ministerio”, dijo, así como “la mentira que el PSOE local nos quiere colar con eso de que han limpiado el fondo marino. Es todo mentira”.
Así, el viceconsejero aseguró que de ser cierto la limpieza del fondo marino, no habrían aparecido en la orilla restos de la escombrera existente antes de la ejecución del proyecto y que, de haberse construido el dique transversal de contención que sí aparecía recogido en el proyecto, el impacto del Levante no se habría llevado la arena aportada a la playa.
“Menos mal que la arena tenía la granulometría perfecta, según  dijo ese grupo ecologista convertido en partido político”, ironizó el viceconsejero.
Además, precisamente la orientación hacia el Levante de la playa requiere de un cuidado más preciso en la plantación de la vegetación del paseo marítimo construido pues, “el abandono” del Gobierno central de la zona tras su finalización y entrega a la Ciudad Autónoma, lamentó, “se ha perdido más del 50 por ciento del palmeral que plantaron”. Por lo que, ahora la empresa de jardinería que da servicio a la Administración local se está encargando de la recuperación de la vegetación en la zona porque muchos de los ejemplares “tendrán que ser sustituidos y mira que esa especie de palmera aguanta carros y carretas e incluso un viento constante de Levante, pero por lo menos hay que regarlo señores”, explicó Merino.
Así las cosas al viceconsejero no le quedó más que preguntarse “dónde están esos 17 millones de euros que dice el PSOE que han invertido en Horcas Coloradas porque a día de hoy no ha servido ni para cumplir los mínimos objetivos que se pretendían con este proyecto”.
Por último, Merino quiso aclarar que la competencia en materia de playas la tiene el Gobierno central, “la Ciudad Autónoma no puede hacer nada ni realizar ninguna actuación sin el permiso expreso del Ministerio”, algo que incluye, por ejemplo, la aportación extra de arena para acondicionar la playa.  En este sentido, explicó que excepcionalmente concede a la Ciudad la gestión del litoral en el Plan de Playas “que se envía al Ministerio de Medio Ambiente para su aprobación en febrero, porque tiene que dar su visto bueno, y a cambio la Ciudad Autónoma se compromete a mantener de forma digna las playas y las zonas de baño”, concluyó.

El servicio sanitario y salvamento en las playas

Según informó la Consejería de Seguridad Ciudadana a ‘El Faro’, a partir del 1 de junio se pondrá en marcha el dispositivo de socorrismo y salvamento en las playas de Melilla. Se localizarán dos puestos de socorro con una plantilla de catorce personas más un coordinador. Además, hay que contar con la lancha de salvamento que patrullará la costa y litoral melillense con un patrón así como la moto acuática que hace dos años adquirió la Consejería que dirige Ramón Antón para velar por la seguridad de los bañistas.
En cada playa estarán ubicados también las torres de socorrismo, entre las que se incluye Horcas Coloradas, Aguadú y Galápagos.
En concreto, Antón precisó que en las playas de la bahía habrá cuatro socorristas durante la semana y seis los sábados, domingos y festivos, y se ampliarán a nueve a partir del 15 de junio.
En la playa de Aguadú habrá un socorrista durante todos los días de la semana así como en Horcas Coloradas que habrá dos.
En la ensenada de los Galápagos habrá un socorrista de lunes a viernes y dos los sábados, domingos y festivos.
Como complemento, habrá un socorrista de retén a partir del 15 de junio y todos los servicios de socorrismo y salvamento estarán a disposición de los melillenses nueve horas diarias.