La Ciudad reforzará el control del padrón municipal en La Cañada

Imbroda destaca que la mayor parte de los vecinos “es gente pacífica que no quiere líos”, aunque hay algunos “camuflados para crear problemas”. Defiende el empleo como la mejor política de integración.

El Ejecutivo local prepara un nuevo paquete de proyectos para La Cañada de Hidum antes de que acabe la legislatura, según afirmó en la jornada de ayer el presidente autonómico, Juan José Imbroda, en declaraciones a la Ser. La intención del Gobierno melillense es integrar cada vez más esta zona, la que registra mayor índice de paro y pobreza de toda la ciudad, así como luchar contra los casos de integrismo islámico que hay en las calles de esta barriada.
Imbroda dejó claro que la inmensa mayoría de habitantes de La Cañada “es gente pacífica, que no quiere líos ni problemas”. Una de las medidas que llevará a cabo la Ciudad Autónoma en los próximos meses es reforzar el control del padrón municipal en la zona para “poner más orden y civismo” en el barrio. La iniciativa se llevará a cabo a través de la Consejería de Administraciones Públicas.
El presidente autonómico reseñó que esta medida servirá para tener conocimiento de las necesidades de los vecinos, como es el caso del suministro de luz y agua o del servicio público de limpieza viaria. Asimismo, indicó que este control tiene como objetivo “comprobar quién no tiene documentación y, si está en esa situación, si es porque no quiere o porque no puede”.
En este sentido, la máxima autoridad local insistió en que los habitantes de La Cañada “son gente pacífica”. Eso sí, subrayó que a causa de la “tortuosidad” que hay en algunas de sus calles se dan casos en los que hay “personas camufladas que quieren crear problemas”.
“Los vecinos del barrio no quieren a esta gente para nada, se trata de una minoría que no está por la labor de vivir en paz”, abundó el presidente Imbroda.
Hay que recordar que en lo que va de año han sido detenidas en Melilla doce personas por su presunta pertenencia a grupos fundamentalistas islámicos, diez de ellas en La Cañada.
El jefe del Ejecutivo destacó que se sentía preocupado por todo lo concerniente al yihadismo, tanto por los arrestos en la ciudad autónoma como por lo que está ocurriendo en otras partes del planeta. Eso sí, consideró que no es bueno darle “tantas vueltas a la noticia”, ya que así se genera “alarma social, miedo e incertidumbre”, lo cual provoca “que estos grupos triunfen produciendo miedo sin que tengan necesidad de hacer nada”. Además, apuntó que estaba “tranquilo” gracias a las medidas de seguridad “contundentes” que ha tomado el Gobierno central para combatir a estos grupos yihadistas.

Impulso al barrio
Al hilo de sus declaraciones, el máximo dirigente del Ejecutivo local destacó que la consejería encargada del desarrollo de los distritos IV y V realizará una serie de obras en las calles de La Cañada antes de que acabe la legislatura. Eso sí, dejó claro que la mejor política de inserción para estos melillenses es la creación de puestos de trabajo y las iniciativas de formación profesional.
Así, en los próximos meses se creará un centro de información de la Ciudad Autónoma en el parque del barrio, situado en la entrada del mismo y punto de encuentro de sus habitantes. La intención es que la administración pública esté más presente que nunca en la zona.
Por otro lado, en breve se inaugurará un centro para mayores en los terrenos de Huerta Vega y comenzarán las obras del anunciado centro cívico, que finalmente se llevarán a cabo durante el próximo ejercicio. Además, Imbroda anunció que habrá más presencia policial en la zona gracias a la creación de nuevas dependencias en el barrio. “Se están haciendo cosas en beneficio de la integración, aunque lo primero es que estas personas tengan un salario para vivir dignamente”, concluyó.