Las Cuentas Públicas para el próximo ejercicio deberán tener en cuenta las fuentes de financiación, en particular las que proceden del Estado, priorizando actuaciones.
La situación de crisis económica podría afectar a los Presupuestos de la Ciudad para el próximo ejercicio así como el número de actuaciones que se tenga previsto desarrollar y es que según comentó ayer el consejero de Economía, Daniel Conesa, habrá que establecer una serie de prioridades si la financiación que viene del Estado se ve reducida, como así parece que va a suceder.
En este sentido, Conesa comentó que la economía de la Ciudad Autónoma “está bastante saneada” y recordó que gracias a ello una de las apuestas del Gobierno local en las últimas Cuentas Públicas había sido precisamente favorecer la inversión pública, pues en palabras del consejero de Economía, ello es fuente de creación de nuevas infraestructuras en Melilla, necesarias para la mejora de la ciudad y por otro lado también servían para la generación de empleo, algo necesario en la ciudad debido a los altos índices de parto registrados en el Servicio Público Estatal de Empleo.
En cualquier caso, matizó que la política social había que mantenerla así como las prestaciones sociales comprometidas, con lo cual estas partidas no se tocarían. “Esto no va a quitarse en los Presupuestos”, afirmó y recordó que habrá que prescindir de estas cuestiones y “reprogramar las actuaciones”.
Sobre las inversiones que podrían llevarse a cabo, Conesa comentó que habrá que analizar los ingresos con los que cuenta la Ciudad Autónoma, estudiando nuevos planes de inversión si la financiación es más limitada.
“Cuando veamos los recortes que hace el Estado en materia de financiación habrá que ver cómo repercute en la ciudad”, afirmó el consejero y recordó que este año se habían producido recortes de parte del Gobierno central en algunas materias como por ejemplo la asistencia a menores, con lo cual la Ciudad tenía que recortar gastos de algún sitio para poder hacer frente a esta contingencia. “Si nos quitan de un sitio habrá que cogerlo de otro”, afirmó aunque dejó claro que estas actuaciones no se podían recortar.
Un aspecto diferente es la capacidad financiera de la Ciudad Autónoma, pues a juicio del consejero ésta era bastante buena debido al control de la deuda existente en estos momentos. “De cara al 2011 vamos a analizar la situación de los ingresos de la Ciudad”, afirmó y señaló que en función de ellos habrá que utilizar otros instrumentos financieros para lograr mantenerlos.
En particular se refirió a la propuesta de financiación con cargo al endeudamiento, una posibilidad permitida legalmente y que en Melilla no debería causar problemas ya que el endeudamiento actual es de los más bajos del país.
De hecho recordó que la ciudad de Ceuta dobla a Melilla en lo que respecta a la deuda, un debate éste que ha entorpecido las relaciones con la oposición, PSOE y CpM. “Con esto no se debe hacer demagogia”, afirmó. De hecho, la carga financiera es de las más bajas de España, según comentó. Por su parte, el presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, recordó que la deuda de Melilla es el cuatro por ciento de su PIB.