Además, le considera inocente de un delito de tráfico de influencias y de otro contra la Administración Pública.
La Audiencia Provincial ha absuelto a un ex capitán de la Guardia Civil, hoy comandante, J.C.O., de un delito de coacciones, otro de tráfico de influencias y uno más contra la Administración Pública del que le acusó un subordinado suyo hace cinco años. El tribunal también absuelve a un melillense de una falta de desobediencia por el que la acusación particular pedía 480 euros de multa. Fuentes de la acusación informaron ayer a El Faro de que ésta había sido la resolución del juicio que se celebró el pasado 5 de febrero. Asimismo, señalaron que están estudiando si recurrir la sentencia.
Los hechos ocurrieron en la frontera de Farhana hace cinco años. El guardia civil que denunció a su superior, le acusaba de tratar de evitar que éste multara al conductor de una furgoneta por desobediencia y por no llevar el cinturón de seguridad puesto.
El citado conductor, también procesado en el juicio, circulaba además por la zona de seguridad reservada a los vehículos oficiales de la Benemérita. Ese día había una larga cola de espera en Farhana y este conductor pretendía ‘colarse’. En el momento en el que el agente le dio el alto y le pidió explicaciones de su comportamiento, el conductor se dirigió a él “en tono desafiante y despreciativo”, según declaró en el juicio. Mientras, el ocupante del vehículo llamó en varias ocasiones al ex capitán para informarle que tenía problemas para cruzar la frontera y que le iban a denunciar por desobediencia.
El protocolo de actuación
Según los hechos que se expusieron en el juicio, acto seguido, el mando de la Benemérita se puso en contacto con el denunciante a través del sistema de comunicaciones de la Guardia Civil, el COS, ordenándole que dejara pasar la frontera al conductor de la furgoneta. Según la acusación, hasta en tres ocasiones el capitán del Instituto Armado le ordenó al denunciante que dejara pasar la furgoneta. El guardia civil afirmó en el juicio que su superior “entró en cólera” a través del COS y por ello se sintió “presionado”.
De hecho, momentos después del percance tuvo que ser atendido en un centro sanitario por una crisis de ansiedad.
El ex capitán de la Benemérita afirmó que su única intención, durante el incidente, era que el guardia civil denunciante cumpliera la orden que le estaba dando. Ésta no era otra que dejar pasar la furgoneta por la zona de seguridad de la Guardia Civil en la frontera de Farhana, pues este vehículo tenía autorización para ello.
El ahora comandante afirmó que el guardia civil no cumplió el protocolo de actuación, que no es otro que identificar al conductor y el vehículo y comprobar con el Centro Operativo de Servicio (COS) si tenía autorización para circular por dicha vía.
La segmentación geográfica no funciona. Compruebe si la geolocalización IP está habilitada en su cuenta…
En la obra pictórica presente en Melilla de escultor y pintor Pepe Gámez (Melilla, 20…
Hoy quisiera invitarlos a reflexionar sobre un asunto que nos interpela, casi en igual medida,…
De Galicia al Mediterráneo Si vemos la imagen de una colonia de percebes (Pollicipes pollicipes)…
Dedicaba el diario El País dos páginas de su publicación dominical del pasado domingo, 4…
Queridísimos; Si algo caracteriza a la señora Díaz Pérez (doña Yolanda, "Yoli", "Yoli O' Trapiño"),…