LA ampliación del horario del aeropuerto de Melilla es una vieja aspiración de los ciudadanos de Melilla para mejorar las conexiones aéreas.
El hecho de que vaya a ser una realidad a partir del próximo día 31 de marzo tiene mucho que ver con el empuje que ha realizado la Ciudad Autónoma, por un lado, y la insistencia de la compañía que opera en Melilla, Air Nostrum, por el otro.
A partir del día 1 de abril, comenzará este nuevo periplo del aeropuerto melillense, donde las compañías operarán entre las 7:15 y las 22:15 horas. Air Nostrum ya ha anunciado que a partir de entonces se ampliarán las rutas de Málaga y Madrid, lo cual es un comienzo.
Además, el Gobierno local ha puesto todo lo que está en su mano para abaratar estos billetes hasta un 75 por ciento para los no residentes con el objetivo de atraer un mayor número de turistas, que es uno de los objetivos principales que se propuso el Ejecutivo de Imbroda cuando ganó las pasadas elecciones autonómicas y locales por mayoría absoluta. Hecho que, sin duda, le confiere una gran autoridad para llevar a cabo todas las propuestas recogidas en su programa electoral.
Hasta ahora, está promocionando Melilla en diversas ferias de turismo y ha establecido protocolos de colaboración con la Junta de Andalucía y algunos ayuntamientos de Málaga y Granada que se deben ir desarrollando y propiciando la llegada de turistas.
La Ciudad Autónoma también ha solicitado al Ministerio de Transporte que se incluya en los Presupuestos Generales del Estado de 2024 una partida para financiar la declaración de Obligación de Servicio Público (OSP) las líneas aéreas de Málaga y Madrid, lo que también, indudablemente, contribuiría a reducir el precio de los billetes.
Además, cabe esperar que la ampliación del horario del aeropuerto contribuya también a aumentar la actividad empresarial en la ciudad autónoma debido a que habrá mayores facilidades para llegar o salir. Especialmente piensa el Gobierno local en las empresas de carácter tecnológico, para las que tiene el firme propósito de crear un vivero para su mayor comodidad y aprovechando las ventajas fiscales de Melilla a falta de ver lo que sucede finalmente con las bonificaciones a la Seguridad Social. Luego ello repercutiría en la sociedad local con la creación de empresas pujantes y de puestos de trabajo para los ciudadanos melillenses, para lo cual, a su vez, se pretende potenciar la formación de éstos.
Así pues, se están dando pasos adelante, pero aún falta tela que cortar. Hay que promocionar la estancia en Melilla y todo lo que puede ofertar, especialmente –y aparte de sus playas, gentes y gastronomía- una variedad cultural prácticamente única en España para una ciudad de su tamaño, con Melilla la Veja y los recintos y el centro modernista como platos estrellas del menú.
Y aún faltaría algo más si hablamos del aeropuerto: la ampliación de la pista, que es lo que permitiría definitivamente que llegaran aviones mucho más grandes que los actuales y contribuiría a situar a Melilla en el mapa mundial del turismo. Paso a paso, en esas está el Gobierno de Imbroda.
Los turistas, no vienen de día....van a venir de noche!