Como todos los 1º de Mayo, los sindicatos y el PSOE salieron a la calle para defender el día del trabajo y para recodar a los caídos durante el Régimen por la defensa de sus ideales.
En esta ocasión se dieron cita algunos más de los que en otras ocasiones han acudido a estas convocatorias, quizá porque el buen tiempo acompañaba en esta jornada festiva.
Un día del trabajo que viene marcado por las cifras del paro y por los rechazos, como arguyeron los sindicatos, a las medidas que está tomando el Gobierno de Mariano Rajoy en materia laboral, educativa o sanitaria, y que según defendieron “está suponiendo un retroceso de más de 30 años” y acabando con los derechos de los trabajadores.
La situación es cada vez más desesperante y así se encargan de ponerlo de manifiesto por ejemplo Cruz Roja en Melilla o las Hermanas del Monte María Cristina, que aseguran que se ven desbordadas por las demandas de ayuda que les piden las familias melillenses.
El Gobierno de España no deja de recibir críticas, al menos dentro del territorio español por parte de sindicatos y de los partidos de la oposición, aunque en Europa alaban su decisión y demandan que siga en la misma línea.
Otro cantar llega desde el continente sudamericano, donde tras el anuncio de expropiación por parte de Argentina de la filial de Repsol, se suma ahora el de Bolivia, que hace lo propio con otra de la Red Eléctrica Española.
Muchos golpes por diferentes frentes, aunque el presidente saliente del Banco Mundial dice que España es demasiado grande para caer.