El trabajo para afrontar los próximos comicios locales ya ha comenzado en Izquierda Unida en Melilla.
Ayer la formación que lidera Rosendo Quero recibió la visita del responsable federal de Políticas Municipales, Manuel Fuentes, con el fin de integrar el modelo de ciudad que quiere IU para los melillenses con las directrices marcadas por el partido en el ámbito estatal. Así, IU Melilla irá elaborando en los diez meses que quedan para las elecciones autonómicas de mayo de 2015 su programa electoral, con la aspiración de ser en la Asamblea de Melilla la tercera fuerza política.
En estos términos se expresaron ambos dirigentes, Quero y Fuentes, a la vez que destacaban que buscarán el diálogo con las demás fuerzas políticas, pero primando la participación de los ciudadanos en la elaboración de ese programa electoral.
Fuentes destacó que Melilla necesita “un profundo cambio en sus instituciones” para encarar de una manera más eficiente y efectiva los problemas relativos a la Educación, Sanidad, Transportes y Empleo. El responsable federal lamentó que hoy día Melilla no disponga de infraestructuras, recursos y equipamientos que le permitan afrontar los retos del siglo XXI. Ejemplo de ello son las elevadas ratios en las aulas, la falta de centros educativos, la paralización de las obras del nuevo hospital frente a una alta demanda asistencial y un alto índice de desempleo sin un análisis pormenorizado de las debilidades y potencialidades del modelo económico que permitan diseñar una estrategia de creación de empleo.
Aproximación a Podemos
En el ámbito nacional, las directrices de IU para toda la federación será fomentar las primarias abiertas para elegir a los cabezas de las listas electorales, fomentar la política de convergencia de fuerzas, la lucha en la calle y en las instituciones. “No nos pueden dar lecciones de democracia interna ni de moral política”, recalcó. Si bien en esa política de convergencia, IU está dispuesta a llegar a acuerdos con otras fuerzas políticas, como Podemos, Fuentes recalcó que a su partido “no le valdrá cualquier acuerdo” si no comparten o coinciden los proyectos políticos.