El enclave se sitúa entre los primeros de España en seguridad gracias a su Centro de Control.
El Centro de Control que la Autoridad Portuaria de Melilla instaló en la Estación Marítima a finales de 2011 se ha convertido “en un referente en materia de seguridad dentro del sector español”. Así lo afirmaron en la jornada de ayer desde el ente portuario de la ciudad autónoma en nota de prensa. Asimismo, destacaron la capacidad de dicho sistema para supervisar, detectar e informar en tiempo real acerca de todo lo que ocurre dentro de las instalaciones, convirtiendo al enclave local “en uno de los más seguros de todo el Mediterráneo”.
Gracias a este avanzado sistema, desde noviembre de 2011 se ha detectado e interceptado a 6.421 personas que pretendían acceder a zonas reservadas para personal autorizado en el puerto de Melilla.
Para la puesta en marcha del Centro de Control se llevó a cabo una importante inversión económica, que incluía la instalación de un circuito cerrado de televisión con más de 260 cámaras repartidas por todo el recinto portuario, así como un sistema telemático para controlar los accesos de personas, mercancías y vehículos.
Desde la sala instalada en la Estación Marítima se supervisa todo el recinto portuario, lo que garantiza la correcta vigilancia del tráfico marítimo y de las distintas instalaciones de un modo rápido y eficaz. “El resultado es un sistema integral de protección que garantiza la seguridad y la estabilidad de todo lo que sucede en el puerto”, subrayaron desde esta institución.
Por otro lado, destacaron la labor conjunta realizada por la Policía Portuaria y la Guardia Civil a través del acuerdo de cooperación que mantienen para vigilar la zona.
Más pasajeros, más seguridad
En 2011, cuando se inauguró la Sala de Control, alrededor de 643.000 personas pasaron por las instalaciones de la Estación Marítima. No obstante, durante el 2012 la cifra creció notablemente, situándose por primera vez en los 800.000 pasajeros. A raíz de este aumento de viajeros, la Autoridad Portuaria decidió reforzar tanto la seguridad como la eficacia operativa de la Policía Portuaria y la Guardia Civil, que en este tiempo han evitando incidentes de distinta naturaleza en el recinto, como el acceso de personal no autorizado, el tráfico ilegal de personas e infracciones similares.
Este proyecto de seguridad piloto ha puesto al enclave de la ciudad autónoma a la cabeza del sistema portuario español en este terreno. Su implantación supuso una inversión cercana a los 2,5 millones de euros. Desde la Autoridad Portuaria melillense manifestaron ayer su satisfacción por el buen nivel de eficacia que ha demostrado este sistema desde que comenzó a funcionar en el 2011. Hay que recordar que a raíz del aumento de pasajeros registrado durante el año pasado en el enclave, las medidas de seguridad se han incrementando notablemente en la Estación Marítima.
Entre otras virtudes del nuevo dispositivo de seguridad, destaca el control de todos los vehículos que entran y salen de las instalaciones del Puerto, cuyas matrículas pueden ser identificadas en caso de que hay una situación de alerta que así lo requiera.
Por otro lado, es posible controlar los accesos al Puerto de manera remota desde la sala de control. El sistema de seguridad se ha instalado en todas las zonas que son competencia de la Autoridad Portuaria de Melilla, como el Puerto comercial, la Estación Marítima, la lámina de agua, la zona de contenedores, la sede del ente portuario y la zona del Puerto Deportivo Noray, aunque en esta última sólo hay cámaras enfocadas al sector de los embarques y de Capitanía Marítima, no a los locales de ocio.
En el Plan de Protección del Puerto de Melilla se han incluido todos los protocolos de actuación y procedimientos a seguir en caso de que se produzca cualquier emergencia, aunque por el momento la mayor parte de las tareas que se han realizado desde la sala de vigilancia han sido de control rutinario de las instalaciones.
El sistema incluye además la grabación de lo que está ocurriendo en el recinto portuario por si fuera necesario facilitar alguna copia a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en caso de que se produjera algún tipo de delito en las instalaciones.