Inma Gaitán, quien presentó el ciclo ‘Volver a lo sagrado’ este pasado miércoles, está desarrollando una hipótesis sobre los inicios del Yoga. En su trabajo asegura que esta práctica va más allá de unas prácticas religiosas y espirituales practicadas en un determinado lugar y explora cómo la sociedad puede regresar a un estado en el que no hubo guerras ni desigualdades sociales.
Para esta historiadora especializada en Arte, el Yoga es una consciencia que se manifiesta en sociedades que respeta la vida y, por tanto, está en comunión tanto con la naturaleza como con los ciclos de vida, muerte y regeneración.
La investigadora explica que en los últimos 5.000 años este respeto por la vida del planeta y todos los seres que habitan en ella ha desaparecido. “Ese Estado de Yoga y Consciencia es borrado de la historia. Se suceden guerras, muerte y destrucción de la naturaleza, a la vez que evoluciona la tecnología, el progreso y la ciencia”.
Todo esto, dice, se ha ido produciendo hasta llegar a nuestros días, donde se sigue perpetuando este patrón. Sin embargo, hubo un periodo de siglos (del 7.000 al 3.500 a.c.) donde en un amplio territorio no hay registros de guerras ni desigualdades sociales. La reconocida arqueóloga Marija Gimbutas denominó a esta etapa como La Vieja Europa.
Durante esos más de 3.000 años, la religión se centró en la rueda de la vida y su carácter cíclico. “La reconstrucción de la estructura social preindoeuropea, de la Europa antigua, nos lleva a sociedades desarrolladas que vivían en armonía y en equilibrio con la naturaleza”, ilustra Gaitán.
El objetivo de su investigación es descubrir cómo puede volver la sociedad a ese estado de Yoga a través del conocimiento de los mecanismos de la percepción, desarrollado por la neurociencia de la meditación, la práctica de la meditación y “sintonizarnos con la ciclicidad de la vida y sus ritmos estacionales”.
En ese sentido, Inma Gaitán está creando un método interdisciplinar que ayude a evolucionar a las personas mediante la fusión del arte prehistórico, la neurociencia de la meditación y la práctica del Mindfulness. “¿Es posible volver a un estado de Yoga Sagrado que nos sostenga y nos ayude a recuperar el equilibrio y la armonía en la tierra? Yo siento que sí”, afirma.
Asegura que es un trabajo arduo, personal e individual que suma para la elevación de la consciencia y que, para ella, se centra en el aforismo griego “Conócete a ti mismo”.
Esta semana tuvo lugar la presentación del ciclo ‘Volver a lo sagrado’, impartido por la profesora de yoga e historiadora, Inma Gaitán. Estas conferencias serán cíclicas; la segunda llegará para celebrar el otoño y seguirá con una tercera en invierno.
En un principio la ponencia estaba prevista realizarse en la Batería Real, pero al final se llevó a cabo en el interior del Museo de Arqueología e Historia. Aún así, Gaitán comenta que “las instalaciones eran preciosas” y que el ambiente fue muy “acogedor”.
Unas treinta personas acudieron a la presentación del ciclo, incluida la consejera de Cultura, Elena Fernández Treviño. La primera parte de la conferencia se centró en los mecanismos de la percepción desde la neurociencia de la meditación, acompañado de unos ejercicios de respiración y postura. También estuvo hablando sobre cómo podían cambiarse alguno de los mecanismos para que ayuden a mejorar el bienestar, el control de las emociones y la gestión en la toma de decisiones.“Todo lo que percibimos tiene un componente emocional”, afirma.
En la charla, Gaitán rindió homenaje a la arqueóloga Marija Gimbutas, quien cambió todo el método tradicional de la arqueología y creó un método interdisciplinar donde fusionó los vestigios del pasado que se recogían con la lingüística, el folclore y la tecnología. Se trata de la primera arqueóloga que interpretó toda la historia antigua del arte (desde el Neolítico hasta la Edad de Bronce).
La conferencia finalizó con un turno de preguntas entre los asistentes y la ponente. Posteriormente, se sumergieron en un estado de meditación todos juntos. Las meditaciones fueron acompañadas por cuencos de cuarzo, cuyas vibraciones sonoras ayudan a relajar y mitigar el estrés que la sociedad sufre actualmente. También favorecen la concentración.
Tras terminar la presentación del ciclo ‘Volver a lo Sagrado’, Gaitán se mostró emocionada porque, cuenta, la gente salió muy entusiasmada, al igual que ella. “Me sentí muy arropada”, confiesa.
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