La Confederación de Empresarios de Melilla alerta sobre el descalabro de los datos de mercancias que están llegando al puerto de Melilla.
Según las cifras que se manejan en la CEME, en lo que llevamos de año, el descenso medio ha sido del 17 por ciento. El dato más demoledor para la economía de la ciudad es el relativo a llegada de contenedores, semiremolques y vehículos que arriban a través de navieras extranjeras que ha caído un 34 por ciento.
Sí ha aumentado, sin embargo, le entrada de mercancia destinada al consumo interno, un 10,7 por ciento, aunque no es suficiente para compensar la caída.
Los empresarios melillenses tienen claro que el cierre de la aduana comercial en el paso de Beni Enzar es el principal causante de este desecenso. La prohibición de Marruecos para que las mercancias atraviesen la frontera ha perjudicado seriamente al tráfico de nuestro puerto en beneficio del de Beni Enzar, que está absorviendo el comercio que se ha perdido aquí.
Desde la patronal, su presidente, José Reyes, reclama la reapertura del paso y además exige que se permita a los empresarios de la ciudad participar en los encuentros con el país vecino para poder defender los intereses de los comerciantes de la ciudad.
El puerto es uno de los principales motores económicos de Melilla y poco a poco está languideciendo. La nueva Administración local debe tomarse en serio su gestión para dar un vuelco a estas cifras en cáida libre y el Gobierno de la Nación dar los pasos necesarios para recuperar el comercio perdido, o al menos ofrecer alternativas que permitan a las empresas de la ciudad seguir produciendo riqueza.
El problema es la aduana como bien se indica, y la que la gestión de aduanas es competencia estatal.
Dicho lo anterior Melilla debe informar al gobierno central de la situación y ofrecer argumentos para que negocie con Marruecos una frontera más fluida, alguno de estos argumentos pueden ser:
1. El mal llamada comercio atípico es en realidad un comercio tradicional que lleva realizándose desde finales del S.XIX, con beneficios a ambos lados de la frontera.
2. Este comercio tradicional mediante el pago del IPSI que repercute en el consumidor marroquí financia en parte al Ayuntamiento de ML ¿Esta dispuesto el ayuntamiento a renunciar a ese IPSI para los productos que salgan para Marruecos mediante el comercio tradicional? Seríamos más competitivos.
3. ¿Qué otra cosa puede ofrecer Melilla a su entorno Marroquí?, en algunas situaciones ya está ofreciendo:
3.1. Sanidad
3.2. Estudios desde primaria hasta universitarios.
Institucionalicemos estos hechos, a cambio de una frontera mejor.
Todo esto debe ser un plan que se pase por Pleno y se lleve a Madrid.