El presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, asistió ayer a presentación del inicio de las obras de dos caminos escolares, que aunque están en marcha, se van a ver potenciados por mejoras en la seguridad. Son rutas para que los alumnos puedan ir caminando a los colegios Enrique Soler y al Hipódromo. El proyecto se ha adjudicado por 181.508 euros y el plazo de los trabajos será de tres meses. Imbroda subrayó que estos caminos son mejores y además, al eliminar barreras arquitectónicas, facilitan que se puedan usar como rutas para andar por parte de todos los ciudadanos.
El líder del Gobierno local explicó que Medio Ambiente lleva desde el inicio de la legislatura con este tipo de proyectos que permiten crear caminos “accesibles, seguros y pacíficos” para que los niños no tengan que ir en coche al colegio.
Resaltó que no se trata de pintar una línea en el suelo indicando que es un camino escolar. El presidente de la Ciudad aseveró que hay muchas actuaciones detrás de este tipo de iniciativas, como la construcción de orejetas para que los coches aparcados impidan ver el paso de peatones y la instalación de pasos de cebra elevados en determinadas zonas.
Imbroda subrayó que se trata de un proyecto “bonito”, porque además participa todo el entorno escolar, desde los padres a los profesores y los alumnos. Asimismo, resaltó que es importante que se resten coches en las entradas y salidas de los colegios.
Otros dos caminos más
El presidente de la Ciudad también comentó que esta semana pasará por la mesa de contratación otros dos caminos escolares. Se trata de rutas para La Salle y para el Reyes Católicos. También añadió que el colegio Anselmo Pardo ya ha pedido poder contar con este tipo de camino para sus escolares. Imbroda informó de que el 80% del coste de estos proyectos está financiado por Fondos Europeos.
Un trabajo conjunto
Por su parte, el consejero de Medio Ambiente, Manuel Ángel Quevedo, hizo hincapié en el trabajo conjunto de un gran número de entidades, desde los centros educativos, con las Ampas y los claustros, a la Dirección Provincial de Educación, la Jefatura de Tráfico y las consejerías de Medio Ambiente y Seguridad Ciudadana. Subrayó que éste es el tipo de trabajo “serio y responsable” que hace la consejería por mejorar la movilidad en nuestra ciudad.
Quevedo afirmó que los caminos escolares no sólo reducen el número de coches que hay a la salida y entrada de los colegios, evitando colapsos en el tráfico, sino que ayuda en la educación de hábitos de vida saludables. Aseveró que los niños que son educados en estos proyecto para ir andando hasta el colegio, de mayores aplicarán estas enseñanzas y optarán por ir caminando al trabajo.
Otro de los aspectos que resaltó el consejero de Medio Ambiente son los cambios a positivo que provoca la instalación de estas rutas, ya que se mejora la accesibilidad y la seguridad para los viandantes. En este sentido, destacó que se creará un paso elevado en la carretera de Alfonso XIII y los vecinos del Real podrán pasar hasta el parque con mayor seguridad.
Uso del espacio público
Quevedo también comentó que actualmente hay unos 300 alumnos utilizando los caminos escolares y son vehículos de menos que hay en las puertas de los centros educativos. Añadió que incrementará el número de escolares que participan cuando los padres vean que son rutas seguras y accesibles.
Asimismo, el consejero de Medio Ambiente destacó que estos caminos sirven para detectar otros aspectos que se deben mejorar en las calles. En este sentido, señaló que han visto que deben tener más control con las terrazas de los bares y restaurantes para que no invadan todo el espacio público porque, en el caso de la calle La Legión, no pueden pasar los 40 niños que usan estos caminos.
Imbroda también estuvo visitando ayer el parque vial situado en el barrio del Real. Indicó que estas instalaciones llevaban años sin ser reformadas y necesitaban unas mejoras. Las obras llevarán cuatro meses y la inversión será de 92.742 euros. Subrayó que este tipo de proyecto no sólo permiten poner a punto la ciudad, sino también crear empleo.
El consejero de Medio Ambiente, Manuel Ángel Quevedo, indicó que se está realizando un proyecto para separar el tráfico de General Villalba y del centro comercial de los vehículos que van en dirección a la frontera de Beni Enzar. Subrayó que se han tenido que quitar las vallas que dividían una zona de la otra, tras la construcción de una rotonda en la intersección del centro de compras con la calle General Villalba. Aseveró que espera contar con este nuevo proyecto en unas semanas porque habrá que cambiar canalizaciones y es complejo su desarrollo. Insistió en que la Ciudad, como ya hizo en la Operación Paso del Estrecho, separará a los coches que vayan a la frontera.
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