La Policía Local avisa a hosteleros que los multará si permiten clientes sin pasaporte covid

Primer fin de semana, además de que es puente, con el pasaporte covid en vigor. El viento de poniente de este domingo no invitaba a salir a la calle, pero muchos melillenses se han animado a salir a tapear. Poco a poco, los locales de hostelería de la ciudad se van adaptando.

Algunos de ellos, como el de la Carihuela en la calle O'Donnell han colocado un cartel informativo: "Según Orden número 1422 de 2 de diciembre de 2021. El acceso al interior de este establecimiento requiere del Certificado COVID Digital de la UE (Pasaporte Covid), junto a un documento acreditativo de identidad para mayores de 12 años. No se conservarán los datos personales acreditados. Disculpen las molestias".

Por su lado, Jaime, responsable del Brisamar, asegura que le parece "la tontería más grande del mundo" por no haberlo dicho con antelación para estar preparados. También ha explicado que la Policía Local ha ido para explicarles que, por el momento, no les iban a llamar la atención, pero que a partir del lunes o del martes si detectaban que había clientes sin el pasaporte covid comenzarían a imponer sanciones.

También, ha explicado que la dificultad que puede acarrear esta medida es retrasarlos en el trabajo, ya que tendrá que poner a un empleado en la puerta, pendiente del pasaporte covid.

"Nos entretiene bastante", ha dicho Jaime, señalando que en la hora punta es cuando tendrían más problemas. "Intentaremos llevarlo lo mejor posible".

Por su lado, Malika, encargada de La Andaluza, cree que ella no es quién para pedir el pasaporte covid a nadie, por lo que le parece "bochornoso".

Explica que por el momento "todo va bien" y los clientes responden positivamente, pero ella comentó ayer a la Policía Local que está preocupada por si algún día tiene un problema, como ha visto que ha pasado en la península.

Ha dicho que supo de la noticia por las redes sociales y fue este sábado cuando les visitó la Policía para explicarles que van a empezar a pasar más a menudo para comprobar que las personas que están consumiendo en el local tienen su certificado y que en caso negativo la multa sería para el bar o restaurante.

¿Y qué piensan los clientes de la hostelería? Aicha, una melillense que se estaba tomando un café en la plaza de las Culturas, ha mostrado que lleva el pasaporte covid impreso y forrado en un formato pequeño y lleva una segunda copia en A4.

Por el contrario, Hassan y Ali no están muy convencidos. El primero asegura tener miedo de la vacuna y ve poco práctico tener que mostrar el certificado para pedirse un café o un té. El segundo tiene cita para vacunarse la semana que viene y entonces se lo sacará, pero tampoco ve práctica la media.