La Delegación cifró en 450 los manifestantes, mientras que los sindicatos convocantes dijeron ser un millar. La concentración se salda sin incidencias, salvo algunos momentos de tensión con la Policía Nacional.
Cada movilización convocada por los sindicatos termina con la tradicional guerra de cifras entre unos y otros por el seguimiento de protestas, concentraciones y manifestaciones. La concentración celebrada ayer frente a la Delegación del Gobierno consiguió cortar al tráfico ambos sentidos de la avenida de la Marina Española. Mientras que la Delegación cifró a los manifestantes en 450, los sindicatos aseguraron que eran cerca de 1.000. A nadie de los presentes se le escapó que la protesta del 19–J en Melilla consiguió más apoyo que otras ya realizadas este año y a la que se sumaron los efectivos de Bomberos de la ciudad, quienes fueron recibidos entre aplausos.
La concentración dio comienzo a las 20:00 horas y se prolongó durante más de una hora. El dispositivo policial no pudo retener a los manifestantes en su empeño por acercarse aún más a las puertas de la Delegación y, en esos instantes, hubo momentos de tensión con algunos empujones que se solventó gracias a la responsabilidad por parte de ambos, agentes y representantes sindicales.
Melilla se sumó así a la convocatoria nacional de movilizaciones contra los recortes anunciados el pasado viernes por el Gobierno central, y aprobados ayer con la unión de todos los sindicatos presentes en la ciudad: UGT, CCOO y CSIF, a los que se sumaron otros, como el Sindicato Unificado de Policía (SUP), la Confederación Española de Policía (CEP) y el Sindicato de Auxiliares de Enfermería (SAE), entre otros, además de partidos como el PSOE local.
Uniformados, los Bomberos acudieron a la concentración con una gran pancarta en la que se podía leer ‘Que paguen la crisis quienes la han creado, culpables de hundir España. No es una crisis, es una estafa’. Este lema se sumó a otros que portaban los diferentes sindicatos, como ‘No a los recortes de nuestros derechos’, ‘En defensa de lo público’, ‘Rajoy Pinocho, mentiroso’ o ‘Estoy hasta el casco de tanto recorte’.
Una ciudad que despierta
La protesta se desarrolló sin incidentes a pesar de los insistentes rumores finales de que la concentración había finalizado ‘a pedradas’, pero los responsables sindicales y la Delegación del Gobierno dijeron desconocer estas circunstancias.
El secretario general de la UGT en Melilla, Alonso Díaz, se felicitó por el éxito de la convocatoria y afirmó que “parece que la ciudad empieza a despertar. Las últimas medidas han surtido efecto entre los funcionarios y creo que vamos a tener un trienio caliente”, auguró. Las medidas que está adoptando el Gobierno central son “la mayor agresión de toda la historia democrática de España y no vamos a parar de reivindicar en la calle hasta que el Gobierno retire esas medidas”. El líder ugetista demandó la convocatoria de un referéndum, aunque, de no ser así, “seremos los sindicatos los que la convoquemos. No descartamos ninguna medida de presión”, aseveró y advirtió en que a partir del mes de septiembre las movilizaciones y huelgas generales, en plural, se intensificarán.
Por último, Díaz destacó que la protesta del 19–J ha sido la primera que ha contado con la unidad de todas las fuerzas sindicales nacionales, incluso las 25 formaciones que representan a los empleados públicos, unidas en una plataforma de reciente creación que, también en el mes de septiembre organizará una marcha hacia Madrid desde diferentes puntos de la geografía española.
Por su parte, el presidente de CSIF Melilla, José Silvestre, manifestó su satisfacción ante el “éxito” de la protesta que da muestra, en su opinión, de que “la ciudadanía se está concienciando y que en Melilla las medidas del Gobierno van a perjudicar la ya maltrecha economía local”. Por todo ello, anunció que su formación sindical apoyará las movilizaciones que se convoquen a partir de ahora.
Por otro lado, la secretaria general de Comisiones Obreras en Melilla, Caridad Navarro, advirtió de que las fuerzas sindicales seguirán conovocando más protestas ante “la mayor agresión a los derechos de los trabajadores”, a los que el Gobierno central, dijo, considera “sospechosos”. Navarro apuntó a “especuladores y banqueros” como los “culpables” de la crisis actual y criticó duramente que el Ejecutivo de Mariano Rajoy esté adoptando medidas “impopulares sin consenso y diálogo social”. En este sentido, recordó que el diálogo social ha sido “el que ha mantenido el Estado del Bienestar durante estos años” y, por último, aconsejó al Gobierno central que “gobierne para los ciudadanos y no para los bancos y mercados”.
Por último, los integrantes del Sindicato Unificado de Policía calificaron de “atraco” las medidas del Gobierno central contra los empleados públicos al suprimir la paga extraordinaria de Navidad y rebajar los sueldos. “Hacemos un servicio extraordinario como para que la Policía tenga que pagar de esta manera la crisis. Es un atraco”.
“Los culpables de la crisis no son los trabajadores”
El 90% de la plantilla de Bomberos de Melilla se sumó a la protesta frente a la Delegación del Gobierno de forma sorpresiva. Fueron recibidos con aplausos y ovaciones por parte de los manifestantes ya congregados desde las 20:00 horas. Uno de ellos, Francisco Rodríguez, no dudó en hablar con los medios de comunicación allí presentes para dejar patente que el Cuerpo de Bomberos es “un colectivo muy reivindicativo” que, en esta ocasión, ha secundado las protestas sindicales porque el Gobierno “no está haciendo nada contra los verdaderos culpables de la crisis. No son los trabajadores los culpables”, aseveró. En este sentido, denunció que las autoridades políticas hayan pretendido “siempre, aprovecharse del colectivo porque piensan que somos unos vividores”.
Las enfermeras de Melilla salen de nuevo a la calle en contra de los recortes
El sindicato de Enfermería, SATSE en Melilla se sumó ayer a la concentración convocada frente a la Delegación del Gobierno de la ciudad en contra de los nuevos recortes aprobados por el Gobierno central, con el objetivo de que la “unión y la presión ganen la partida a la injusticia y la imposición”.
Tras la reunión celebrada con los responsables de CCOO, UGT y el resto de sindicatos que participaron en la manifestación, el secretario general del SATSE en Madrid, Alejandro Laguna, subrayó la importancia de sumar fuerzas entre las propias organizaciones y todos los ciudadanos, frente al “ataque sin contemplaciones” del Gobierno a los derechos de los trabajadores y los fundamentos de la Constitución española.
El sindicato insta a los responsables públicos que adopten medidas “realmente eficaces para reducir el déficit, como establecer una política efectiva de lucha contra el fraude fiscal, en lugar de imponer únicamente recortes que, en el caso de la Sanidad, supondrá la destrucción del Sistema Nacional de Salud, tal y como lo conocemos, universal, solidario y equitativo”.
SATSE insistió también en su oferta de negociar con la Administración y “trabajar conjuntamente para poner en marcha soluciones efectivas. No es la primera vez que España se enfrenta a problemas muy graves y en aquellos momentos sólo desde la unidad de acción se consiguió salir adelante”.
Asimismo, reiteraron la necesidad de que el Gobierno marque una hoja de ruta fija que defina “claramente los objetivos y los medios para alcanzarlos, en lugar de tener que esperar cada semana a los Consejos de Ministros de los ‘viernes de dolores’ para conocer qué nuevas medidas va a adoptar y como van a influir en los ciudadanos”.
Por último, SATSE Melilla insistió en que el esfuerzo que ha de hacer la sociedad española en una situación de crisis como la actual debe ser “repartido con más justicia, por lo que el Gobierno debe adoptar medidas igual de duras respecto a las rentas del capital”.