El upedista critica “que no tengan ningún proyecto para luchar contra la pobreza y el desempleo”. El coordinador de Unión, Progreso y Democracia (UPyD) en Melilla, Emilio Guerra, señaló ayer que los Presupuestos locales, que se debaten y han de aprobarse hoy en el Pleno de la Asamblea, son “impropios para una población con 13.000 desempleados y más de 25.000 personas en el umbral de la pobreza”.
Para el dirigente magenta, “no tiene sostén político, ni mucho menos ético, hacer unas cuentas similares a las de épocas de bonanza con partidas muy semejantes”.
En palabras del upedista, la actitud del PP, tanto en el Gobierno central como en el de la Ciudad, Autónoma, es la de “aguantar el chaparrón y esperar a que escampe”. En este sentido, Guerra apuntó que “es muy fácil pedir sacrificios al pueblo y machacarlos a impuestos y recortes, cuando los dirigentes están colmados de seguridad, instalados en cómodas balsas de privilegios mientras los demás se hunden en la crisis”.
“Somos una ciudad privilegiada”, ironizó Guerra, “por eso hay que exigir mayor diligencia y mejor gestión de esos recursos ahora que los ciudadanos más lo necesitan. No encuentro dentro del Presupuesto proyectos especiales que de verdad estén enfocados a tratar de solventar los muchos problemas que padecemos. Eso no es nuevo, es algo que viene sucediendo por sistema en todos los gobiernos Imbroda”, criticó.
Asimismo, resaltó que las cuentas públicas son el principal instrumento para hacer una política “solidaria, real y efectiva”, por ello, “deben ajustarse al momento y a las circunstancias”.
“Los Presupuestos de este año no son participativos, aunque se intenten maquillar con una supuesta aceptación mayoritaria a base de promesas futuras que siempre se incumplen”, reprochó. Para el líder upedista local se trata de “ideas y conceptos neoconservadores para seguir alimentando un aparato clientelar que no renuncia a nada ni quiere que nada cambie”.
“Por desgracia, el dinero del pueblo se gestiona con un enfoque elitista y partidario, lejos de los principios de solidaridad y mucho menos del interés general de la mayoría. Eso ocurre porque en el Gobierno local se parte de un error de concepto: Tienen la creencia de que esa mayoría son ellos y los suyos exclusivamente”, concluyó.