Categorías: Editorial

Granos de arena que hacen montañas

Muchos pensarán que no es gran cosa, otros creerán que sólo es un grano de arena, pero no hay que olvidar que precisamente de eso se componen las grandes montañas, de innumerables y diminutos granos de arena.

Uno lo ha puesto el fotógrafo Sergi Cámara en los Distritos IV y V. Con el apoyo financiero de ‘la Caixa’ ha llevado a cabo un proyecto con 20 niños de esa zona deprimida de la ciudad. Allí, durante el mes de marzo ha mostrado a los pequeños algunas de las posibilidades creativas que ofrece una cámara de fotos, les ha enseñado a ver la realidad que les rodea a través de un objetivo y al mismo tiempo los niños han tenido ocasión de mirar hacia su interior y descubrir sus propias cualidades artísticas.
Quizá el esfuerzo de Sergi Cámara y los 7.350 euros con los que ‘la Caixa’ ha financiado el proyecto se los lleve el viento. Tal vez no sirvan de nada o puede que sean el primer paso del largo camino que tiene que recorrer ese barrio para deshacerse de la imagen de marginalidad que le señala. De cualquier forma, se trata de una actividad constructiva de la que se ha beneficiado una veintena de niños y que, en el peor de los casos, no puede provocarles ningún mal. Al contrario. Bastaba con mirar ayer a los pequeños a la cara para saber hasta qué punto estaban satisfechos del resultado de su esfuerzo. Difícilmente se podrían haber empleado mejor 7.350 euros para empezar a transformar ese barrio.
Los Distritos IV y V necesitan planificación y grandes inversiones. Nadie lo discute ni se opone a ello, pero también hace falta que los vecinos vean que algo se mueve. Para ello no hay nada mejor que empezar a andar, aunque sea sólo un pequeño avance como el logrado por ‘la Caixa’ y Sergi Cámara. Si otra entidad financiera y otro ciudadano cogen el testigo, será otro paso más.
A veces poco es mucho cuando no hay nada. Desde ayer las paredes del Patio Sevilla están engalanadas con las creaciones de estos niños. El lugar elegido para la exposición no es el mejor escenario para que sus fotografías se conserven. Probablemente no duren mucho bajo las condiciones atmosféricas de este otoño que acaba de empezar. Sin embargo, la mejor obra de este proyecto no se ha hecho con una cámara fotográfica. Hay que buscarla detrás de las sonrisas de los niños que ayer posaban orgullosos junto a sus creaciones. Esa semilla difícilmente se la va a poder llevar la lluvia y el viento del otoño. Cabe incluso la posibilidad de que arraigue y dé frutos. Sergi Cámara y ‘la Caixa’ lo han intentado y eso ya es mucho para los vecinos de unos barrios que llevan esperando demasiado tiempo a que las cámaras fotográficas se fijen en ellos para, al menos, retratar la realidad como ellos la ven.
Ni 7.350 euros ni el esfuerzo de un fotógrafo bastan ante los múltiples problemas de los Distritos IV y V, pero sí pueden ser suficientes para marcar la senda a seguir. Es el primer grano de arena, pero sólo tendrá sentido si alguien va y pone el segundo.

Compartir

Artículos recientes

Prueba Video Embed DailyMotion

La segmentación geográfica no funciona. Compruebe si la geolocalización IP está habilitada en su cuenta…

3 días hace

Los Caleros de Ayamonte de Pepe Gámez

En la obra pictórica presente en Melilla de escultor y pintor Pepe Gámez (Melilla, 20…

2 meses hace

Indagando sobre el sentido del temor a la muerte

Hoy quisiera invitarlos a reflexionar sobre un asunto que nos interpela, casi en igual medida,…

2 meses hace

Percebes

De Galicia al Mediterráneo Si vemos la imagen de una colonia de percebes (Pollicipes pollicipes)…

2 meses hace

Derecho a discrepar

Dedicaba el diario El País dos páginas de su publicación dominical del pasado domingo, 4…

2 meses hace

Verano del tiempo viejo (VII)

Queridísimos; Si algo caracteriza a la señora Díaz Pérez (doña Yolanda, "Yoli", "Yoli O' Trapiño"),…

2 meses hace