Éste ha sido el Congreso de Gloria Rojas, reelegida secretaria general de los socialistas melillenses en plena pandemia y con los ojos puestos en las próximas elecciones municipales. Por eso, ante una militancia entregada, Rojas prometió este domingo "trabajar ya para ganar las próximas elecciones generales".
Pero si eso no ocurre, avisa a quienes hacen cálculos con los escaños que pueda conseguir el PSOE, que la única suma que a ella le vale es la que apueste por "la estabilidad y la convivencia" y la que se aleja del ruido y la división en Melilla.
"La única suma que vale es la de la estabilidad y la convivencia y ahí estoy", en el proyecto de construir una Melilla diferente en la que nadie sobra y en la que se sigan consolidando derechos básicos, advirtió.
Pero no es el único reto que se ha marcado Rojas para esta nueva andadura. Según avanzó, su idea es poner las bases para que el Turismo sea el motor económico de Melilla; para que ésta sea una ciudad amable con los animales y en la que el ayuntamiento sea de todos los melillenses y no el cortijo de unos pocos.
En ese proyecto entra además la lucha por quitar el monumento a los Héroes de España, que será el segundo paso después de la retirada de la estatua de Franco. En este sentido aclaró que la tramitación del expediente se hizo con apego a la legalidad y aún así la consejera de Cultura, Elena Fernández Treviño, no se ha librado de una lluvia de denuncias.
En este punto de su discurso, Rojas aludió a la ultraderecha, a la que lanzó una advertencia: "Nadie le va a decir a ningún socialista qué es ser patriota" porque no están dispuestos a recibir lecciones sobre lo que es ser melillense y ser español.
La secretaria general del PSOE de Melilla, arropada por la nueva Ejecutiva, aprovechó su intervención para sacar pecho de los logros socialistas en la ciudad y recalcó que todas las infraestructuras que se han hecho en la ciudad llevan el sello socialista.
A modo de ejemplo señaló la desaladora, la biblioteca pública, el Comarcal, todos los centros de enseñanza, las residencias de mayores o el Jardín Valenciano. Y por si no quedaba suficientemente claro recordó que los únicos presidentes de Gobierno que han venido a Melilla en visita oficial han sido los socialistas José Luis Rodríguez Zapatero y Pedro Sánchez.
También en su discurso, dejó espacio Gloria Rojas para recordar a los secretarios generales que le precedieron, todos hombres, a los que agradeció el esfuerzo que realizaron durante años.
En este capítulo de agradecimientos, envió "un beso al cielo" por los militantes socialistas fallecidos durante la pandemia a los que dedicó un discurso en el que aclaró que puede caminar por Melilla con la frente en alto.
"Los socialistas vamos de frente. Podemos mirar de frente. Yo voy por la calle tranquila", confesó.
Y a quienes dan por sentado el fracaso electoral en las próximas municipales, Gloria Rojas alertó de que el socialismo melillense "está más vivo y más fuerte que nunca".
Por eso repiten muchos de los integrantes de su anterior Ejecutiva, que es paritaria sin mayores esfuerzos porque estas cosas ya salen solas en el PSOE, destacó.
"La fuerza de un partido centenario, se nota", sentenció Gloria Rojas a la vez que contó que se afilió al PSOE en las horas bajas del partido, en 2011, y nunca desde entonces ha pensado en pertenecer a otro partido. "Nunca me he arrepentido".
Del PSOE le gusta que cuando ella indica un camino a seguir, muchos le llevan la contraria, pero eso, lejos de desgastar es lo que, en su opinión, enriquece al Partido Socialista Obrero Español.
"Los del PSOE somos muy críticos con nosotros mismos", reconoció.
También hubo espacio en el discurso de Gloria Rojas para hacer balance de los últimos cuatro años, que lleva al frente del partido. "Han sido apasionantes", sobre todo porque en Melilla el PSOE ayudó a acabar con 20 años de Imbroda y del Partido Popular en Melilla.
Asimismo recordó que los socialistas entraron en la coalición tras consultar ese paso con la militancia y el 100% apoyó un acuerdo que ha tenido que hacer frente a la pandemia del coronavirus.
Ese camino, por tanto, se ha hecho no sin dificultades y de hecho, admitió que está siendo "complicado", pero aseguró que lo hace con la misma vocación de servicio con que se afilió al PSOE hace diez años. Y por eso, animó continuamente al público a aplaudir porque ella es la que más aplaude en el PSOE y al estar en la tribuna, le faltaba calor del público.
Emocionada, Rojas dedicó unas palabras a José Luis Estrada que, como avanzó El Faro, deja la presidencia del partido por decisión personal.
De él, Rojas dijo que ha sido un honor tenerlo como presidente del PSOE de Melilla porque es "un hombre de partido y de país: bueno, generoso y conciliador y un ejemplo intachable de militante y buen socialista".
Tras el discurso de Rojas, intervino la Secretaria nacional de Igualdad del PSOE, Andrea Fernández, que destacó que gracias al PSOE, en Melilla ya no se homenajea a dictadores y animó a ser optimistas. "Frente a los reaccionarios, nuestra esperanza".
El acto terminó puño en alto, al escuchando el himno de La Internacional.
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