Francisco Casaña. Teniente coronel en la reserva y autor teatral: “El teatro es una forma original de dar a conocer nuestra Historia”

Acaba de fundar la compañía teatral IV Recinto, compuesta por militares y civiles  El 26 y el 27 de este mes representarán en el Kursaal la obra ‘Café Olegario, el belén del vecindario’.

La pasión por el teatro ha estado siempre presente en la vida de Francisco Casaña. Este teniente coronel del Ejército de Tierra, ahora en la reserva, ha compaginado durante décadas su carrera militar con el mundo de los escenarios. En la actividad teatral ha hecho prácticamente de todo: ejercer de dramaturgo escribiendo varias obras, dirigir las funciones y subirse a las tablas para interpretar a los personajes.
Autor, director y actor, Paco Casaña acaba de crear IV Recinto, una compañía caracterizada por englobar en su elenco a militares de todas las unidades de Melilla, así como a civiles. Los próximos 26 y 27 de este mes representarán en el Teatro Kursaal la obra ‘Café Olegario, el belén del vecindario’, que será la primera función bajo el sello de IV Recinto. Casaña relata a El Faro los objetivos de la compañía y muestra en todo momento el gran amor que siente por el teatro.
–IV Recinto debuta en el Kursaal en navidades. ¿Qué puede adelantar de ese estreno?
–El 26 y el 27 de diciembre representaremos una obra de corte navideño, una comedia coral con muchos personajes en la que se va a mezclar la risa, la carcajada, con puntos de muchísima emoción, que es el estilo que más me gusta para este tipo de obras. Las entradas tendrán un precio único de 10 euros y confío en que el público acuda a vernos. Hay que tener en cuenta que la función se representará en fechas navideñas y además en sábado y domingo.
La obra se llama ‘Café Olegario, el belén del vecindario’ y la he escrito yo. Aunque ya he firmado otras, ésta es la primera que va a representar IV Recinto.
–¿De dónde nace el nombre de esta compañía teatral?
–Se llama IV Recinto porque es el último que se inauguró en la antigua cárcel militar de Melilla. Ese lugar está detrás del Parador, donde el cañón del Caminante, que delimitó las dimensiones de Melilla con sus disparos, y ahora se acaba de abrir al público con visitas guiadas.
Pero el nombre de la compañía también tiene otra explicación. El cuarto recinto de un teatro es el público. Tres paredes son el escenario y la cuarta es el público. La compañía es melillense.
–¿Cuáles son sus argumentos preferidos para escribir una obra de teatro?
–Llevo 25 años en el mundo del teatro. Soy actor, director y dramaturgo. Pertenezco a la compañía melillense Concorde, que tiene un gran director como José María Antón Andrés. Algunos años hemos hecho piezas de la historia de Melilla, como la del Cabo Noval. Son historias que se esconden dentro de guerras que nadie ha deseado. Sin embargo, eso no implica que esos conflictos estén exentos de valores y actitudes que hoy echamos de menos por momentos. Queremos dar a conocer nuestra historia y una manera original y bonita de hacerlo es a través del teatro.
–¿IV Recinto cuenta con apoyo para sacar adelante sus representaciones?
–Mi deseo es que el Museo Histórico Militar de Melilla se involucre de alguna manera en este proyecto, porque el teatro es un buen formato para difundir historias de militares. Queremos llevar nuestras obras a la población civil, pero también representarlas en acuartelamientos. Esperamos que el público las disfrute, al mismo tiempo que aprende de nuestra historia.
–¿En España no se valora la historia militar? En otros países son frecuentes películas sobre este tema, pero aquí no.
–Eso es cierto. Tenemos una historia riquísima dentro de nuestro Ejército, pero parece que hay gente a la que le desagrada por momentos. Nuestro pasado tiene momentos muy bellos que están olvidados.  En Estados Unidos, por ejemplo, si tuvieran nuestra historia, se harían millonarios. Nuestra intención es que a través del teatro podamos mostrar al público historias preciosas que también ocurren dentro de un conflicto.
En España sí se hacen películas sobre la Guerra Civil, aunque ahora generalmente cuentan la parte republicana. No todo en la guerra fue tétrico. También hubo momentos brillantes, de amistad. Me gustó ‘La vaquilla’, de Luis García Berlanga, porque mostraba que, pese al conflicto, también había personas que se ayudaban, momentos muy hermosos dentro de nuestra incapacidad para solucionar este problema. El odio oculta bellas historias.
–¿Qué obras ha escrito de carácter militar?
–’La novia de la intermedia A’, que se desarrolla en el Desastre de Annual, y ‘Cabo Noval: musical para un héroe’. Las dos fueron representadas en el Teatro Kursaal.
–¿Qué planes de futuro tiene IV Recinto?
–Queremos representar cada año una obra militar y otra civil. También hacer una vez al mes microteatros por los barrios de Melilla con una carpa portátil. Y además, un proyecto para llevar durante una semana una obra nuestra a la península.