Tres semanas más tarde de que se anunció que la consejería de Fomento daría la licencia de primera ocupación del Mercado Central, fue este miércoles cuando emitieron el documento que permitirá que la Escuela Oficial de Idiomas, el Conservatorio de Música y el Centro de Educación de Adultos puedan ingresar y utilizar las instalaciones.
La dirección Provincial de Educación confirmó a El Faro el otorgamiento de la licencia de primera ocupación de los espacios para los tres centros educativos, por lo que hoy mantendrá una reunión con los directivos de las escuelas a fin de elaborar un cronograma para el traslado de los estudiantes.
Sergio Rincón, representante de la plataforma de padres, espera que el traslado sea lo más pronto posible, pero entiende que la decisión quedará a expensas los centros educativos.
“Nosotros como padres queremos un traslado lo antes posible, por no seguir sobre todo en las condiciones en que están en el Instituto Juan Antonio Fernández, y también para ver la viabilidad y el funcionamiento del edificio con las enseñanzas que se darán”, dijo.
Después de una larga espera por la primera licencia de ocupación, Rincón insistió en que el traslado debe ser rápido, incluso con el mobiliario antiguo, pues será mejor para todos.
Solo el Conservatorio de Música tiene 300 alumnos y se estima que entre los tres centros hay 1.500 personas que cambiarán el espacio de estudio.
Para Rincón sería un error prolongar el traslado para después de Semana Santa. Considera que la mudanza debe ser rápida, siendo la Escuela Oficial de Idiomas el ente con mayor facilidad para hacerlo por el mobiliario. “Pero el Conservatorio no debería tener ninguna pega para poder trasladarse lo antes posible”, aseveró.
Los jóvenes del Instituto Juan Antonio Fernández también sufren las incomodidades de que haya una sobre población de alumnos que reciben clases.
El representante de la Asociación de Padres calificó de “muy malas” las condiciones en las que los jóvenes reciben clases en el instituto.
Indicó los profesores dictan clases en aulas que no están preparadas, se molestan los unos a los otros con los instrumentos, “no tienen material suficiente para dar las clases para los alumnos de piano o de percusión, se tienen que trasladar al colegio Enrique Soler, los lunes y los miércoles para la asignatura de banda y de orquesta porque en el Juan Antonio Fernández no caben”.
Los inconvenientes continúan y los profesores deben llevar los atriles e instrumental diariamente a las aulas donde dictarán la asignatura y guardarlos luego de la jornada.
Rincón cree que si es necesario solucionar algún otro inconveniente en el Mercado Central, sea con los alumnos dentro para estudiar cómo funcionará.
Tres años tienen los padres esperando la licencia de primera ocupación una vez culminada la obra, sin embargo en años posteriores surgieron problemas con la infraestructura y las salidas de emergencia, por lo que fue necesario construir plataformas de evacuación para las torres.
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