Fallece un joven marroquí de 22 años junto al paso fronterizo de Beni-Enzar

• La muerte podría ser por causas naturales, pero habrá que esperar los resultados de la autopsia para confirmarlo

Un joven marroquí de 22 años falleció ayer en un camino cercano al paso fronterizo de Beni-Enzar, cuando se dirigía a Barrio Chino, sobre las 07: 30 horas de la mañana, según informó en un comunicado la Guardia Civil. Los motivos de la muerte se desconocen todavía, por lo que habrá que esperar los resultados de la autopsia. De momento, no se descarta ninguna opción, pero se baraja la posibilidad de que fuera un fallecimiento por causas naturales.

De acuerdo a testigos presenciales, el joven había cruzado la frontera sobre las 07:00 horas e iba acompañado de otras dos personas cuando, de repente, se desplomó en el suelo. Sus acompañantes trataron de reanimarle sin éxito, por lo que llamaron rápidamente a los servicios de emergencia.

“Fulminante”

Inicialmente intervinieron varios miembros del Cuerpo Nacional de Policía que se encontraban junto al paso fronterizo de Beni-Enzar, aunque finalmente fue la Guardia Civil la que  se hizo cargo del caso, al haber sucedido en un lugar próximo al antiguo cuartel militar de Valenzuela, un área de su competencia en la frontera.

Según los agentes de la Benemérita que atendieron el suceso, el joven se desplomó “de manera fulminante” y, de acuerdo al testimonio de uno de los porteadores que estaban en la zona, fue porque “se le paró el corazón”. Fueron los miembros de una de las Unidades de Intervención Policial (UIP) los que avisaron finalmente a emergencias sanitarias del 061, que al llegar al lugar tan sólo pudieron certificar el fallecimiento del joven.

Tras confirmar la muerte, la Policía Judicial de la Guardia Civil abrió las correspondientes diligencias cuando el juez ordenó finalmente el levantamiento del cadáver sobre las 10:00 horas de la mañana.

¿Porteador?

Transcurrida media hora desde el levantamiento del cuerpo, agentes de movilidad, que regulaban el tránsito del puente que conecta las naves industriales con la carretera de la Circunvalación, comentaron a El Faro que el joven no transportaba ningún fardo o paquete, por lo que, en principio, descartaban a priori la muerte por sobreesfuerzo al cargar un peso excesivo.

Por otro lado, los mismos efectivos comentaron que el joven no parecía un porteador por su forma de vestir. Según sus observaciones, no llevaba calzado deportivo, sino zapatos, y su camisa y pantalones no se correspondían con los que normalmente llevan los hombres que trasladan pesados fardos, y que visten ropa cómoda y deportiva para agilizar sus movimientos y hacer más llevadero el trayecto.

Un porteador que se encontraba en el lugar cuando sucedieron los hechos, explicó ante las cámaras de Faro TV que el chico procedía de un barrio de Farhana, donde vivía con toda su familia, y que lo había visto en más de una ocasión por Beni-Enzar en dirección Barrio Chino. No obstante, tan sólo había intercambiado con él alguna que otra palabra en un par de ocasiones.

Este mismo hombre aseguró que sus acompañantes se asustaron mucho ante lo sucedido y empezaron a gritar y a llorar, y que llamaron rápidamente por teléfono a emergencias, hasta que se personaron las patrullas policiales y varias ambulancias.

Anonimato

Según el comunicado emitido por la Guardia Civil, el fallecido ya fue identificado para practicarle la correspondiente autopsia y para localizar a su familia, que ya fue informada del suceso. Sin embargo, no han trascendido los datos sobre su identidad, por lo que se desconoce su nombre, apellido y también si residía en la localidad que citó anteriormente el porteador.

Asimismo, también se desconoce si el joven realmente se dedicaba al comercio atípico y trabajaba transportando fardos con mercancía desde Melilla hacia Marruecos, ya que la descripción aportada tanto por los agentes de Movilidad como por los testigos entrevistados, ni el fallecido ni sus acompañantes  llevaban ningún bulto ni paquete consigo y su vestimenta no parecía ser de trabajo.