Este viernes se cumplen diez años desde que los jóvenes Emin y Pisly fueron asesinados aquel fatídico 27 de octubre de 2013 mientras estaban en una embarcación de recreo de bandera y matrícula española en aguas cercanas a Melilla por militares de la Marina Real Marroquí (que se extralimitaron en sus funciones).
Desde entonces, los padres de Emin y Pisly, Driss Mohamed y Abdeselam Hamed, se han concentrado cada mes frente a las puertas del Palacio de la Asamblea durante una década con el objetivo de conseguir justicia para sus hijos.
Por desgracia, el padre de Emin falleció hace unos meses sin poder ver cumplir justicia contra su hijo y antes de que se celebrase el décimo aniversario de su muerte. Pero, para esperanza de sus seres queridos y de Abseselam Hamed, ahora está con sus hijos.
Ambos padres han pedido en innumerables ocasiones que el Gobierno de España tome cartas en el asunto y se castigue a los culpables de la muerte de su hijo. Este viernes lo hará de nuevo en solitario el padre de Pisly, Driss Mohamed, en una fecha tan señalada como es esta, cuando se cumplen diez años del trágico suceso.
Al respecto, la delegada del Gobierno, Sabrina Moh, ha reiterado que se cumplió el compromiso adquirido en 2018 y que ella misma concertó un encuentro entre las familias y el Ministerio para que pudieran trasladar sus peticiones.
De esta manera, niega que haya habido una falta de sensibilidad o de empatía por su parte con este trágico suceso, a la par que muestra su comprensión con el sufrimiento que estos padres llevan padeciendo desde hace ya una década.
Así, Moh ha recordado cuando se desplazó “personalmente” hasta el Ministerio del Interior en 2018 para poder poner en contacto a las familias de Emin y Pisly con la institución, “algo que se materializó” y tuvo la oportunidad de expresarle “hace relativamente poco” a ambos padres.
“Por tanto, creo que el compromiso adquirido por parte de esta delegada se llevó a cabo. Lo hablamos, tuvieron la oportunidad de desplazarse hasta el Ministerio y poder hacer las preguntas pertinentes y tener respuesta”, ha explicado la delegada.
Con esto, manifiesta Sabrina Moh, no quiere decir que las familias no sigan necesitando una respuesta por parte del Gobierno, pero “sí que el compromiso adquirido se llevó a cabo, se mantuvo” y algunas de sus preguntas pudieron ser respondidas durante el encuentro.
La máxima representante del Gobierno en la ciudad ha aclarado que no ha habido una “inacción” ni se han hecho “oídos sordos”. Tampoco una “falta de empatía”, sino lo contrario: “·escuchamos a las familias”, dice. Asimismo, reitera que hace poco tuvo la oportunidad de hablar sobre todas las gestiones que se habían hecho al respecto.
“La sensibilidad es máxima. La empatía es máxima. Entendemos a estas personas como cualquier padre que sufre por la pérdida de un hijo, pero no puedo estar de acuerdo con el que no se ha escuchado o que no se haya llevado a cabo el compromiso que se adquirió con estas personas”, subraya.
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