España notifica un caso de rabia de un perro en Melilla

La Organización Mundial de Sanidad Animal ha confirmado la detección de un perro con el virus de la rabia en Melilla el pasado 15 de junio, según el informe que ha emitido dicho organismo.

Se trataba de un perro mestizo asilvestrado que no estaba vacunado de la rabia y que fue capturado el 11 de junio, tras la llamada de un ciudadano que vio al can y pensó que parecía enfermo.

Fue trasladado al centro de acogida de animales, pero murió antes de la llegada al mismo.

La secuenciación del virus ha puesto de manifiesto que este caso no pertenece a una cadena de transmisión previa, sino que se trata de una nueva introducción procedente de Marruecos.

Aunque a nivel de la Organización Mundial de Sanidad Animal solo se ha detectado a un perro con el virus de la rabia, lo cierto es que se trataba el séptimo caso que se producía en la ciudad a lo largo de este año 2022 y el segundo en todo el mes de junio. Se trataba, según señalaron entonces fuentes oficiales, de un animal procedente de Marruecos que penetró por la frontera.

En una nota de prensa, la Unidad de Sanidad Animal y Zoonosis de la Dirección General de Salud Pública y Consumo informó informado de que este caso del que ahora habla el organismo internacional había sido diagnosticado por detección de antígeno en el laboratorio del Centro Nacional de Microbiología del Instituto de Salud Carlos III.

Se trataba, efectivamente, de un perro asilvestrado, adulto joven de color marrón-negro y fuego, que se encontraba en la playa del Hipódromo el sábado día 11 de junio de 2022 por la mañana, el cual fue recogido por la Policía Local y trasladado al Centro de Acogida y Observación, donde ingresó ya muerto.

La muestra para su análisis al Centro Nacional de Microbiología fue enviada el día 13 de junio y se confirmó el resultado el día 15.

El informe de la Policía Local sobre la captura del animal indicó que es muy probable que el animal penetrara desde Marruecos por el puesto fronterizo durante la noche.

Salud Pública ya recordó que la rabia, una vez que se desarrollan los primeros síntomas, es una enfermedad mortal para personas y animales susceptibles de contagiarse.

Igualmente, insta a contactar con la Dirección General de Salud Pública y Consumo si alguien tiene constancia de que el perro pudo morder a cualquier otro animal que se encontrara por la zona.

La Ciudad Autónoma, que decretó el nivel 1 de alerta de rabia a finales del año pasado, recuerda que la vacunación antirrábica anual es obligatoria y gratuita para perros, gatos y hurones con más de tres meses de edad.