Un grupo de unos 50 escolares del colegio León Solá visitó ayer la Asamblea de Melilla para conocer de cerca la Administración local.
A pesar de tener cinco años, los pequeños no pararon de realizar preguntas a la vicepresidenta primera de la Asamblea, Cristina Rivas, quien les recibió en el Salón Dorado y les invitó a sentarse en los sillones de los diputados en el Salón de Plenos. Los alumnos interrogaron a Rivas sobre cuál era el lugar del presidente de la Ciudad en esos salones, qué funciones tienen los representantes de los ciudadanos y para qué sirve un secretario en un pleno. Los escolares también ofrecieron su visión a la vicepresidenta sobre cómo hacer una ciudad mejor.