“Es el año más caro que recuerdo”

Las ganaderías y carnicerías de Melilla que se encargan de traer los borregos para la Fiesta del Sacrificio o Aid Al Adha ya han notado la diferencia de precios al alza que han registrado los borregos para este año cuando apenas quedan dos semanas para su celebración el próximo 29 de junio.

Además de la subida del coste del género, también se ha notado un menor tamaño de los animales, por lo que aquellos que se decidan a comprar no sólo tendrán que pagar más que en 2022, sino que también recibirán menos cantidad de carne.

Esto se puede deber a diversos factores tal y como apuntan desde los comercios que tratan con los proveedores e importan a la ciudad todo este ganado.

En la ganadería que se encuentra en la carretera Farhana cuentan con varios espacios donde guardan y mantienen a estos animales y, en la mañana de este lunes, muchas personas se acercaban para echar un vistazo a los 1.000 borregos que les han llegado y seleccionar el que más les convenciese para llevárselo.

En este establecimiento señalan que “es el año más caro que han visto”, aunque, aún así, tal y como dice Karim, que trabaja allí, “la gente sigue acercándose a comprar”.

“Los clientes vienen a comprar, sí, pero lo que pasa es que este año los corderos están muy caros. Han subido los costes de todo y no hay borregos grandes”, dice.

En este sentido, Karim apunta que “alguno más gordo sí que ha llegado”, pero que no son tantos como otros años.

“Son escasos por varias cosas. Porque Marruecos ha comprado mucho cordero, porque los ganaderos no pueden hacerlos más grandes porque la comida de los animales les cuesta muy cara... Son varias cosas las que influyen”, destaca.

La falta de corderos en el país vecino ha obligado a los marroquíes a comprar el ganado en la península, lo que ha contribuido a que lo que se pague este año sea más que en el anterior. A esto hay que añadir todo lo que implica el mantenimiento del animal y su transporte, ya que, como dice Karim, “hay que tenerlo en cuenta todo, porque todo suma”.

De esta manera, tal y como dicen desde esta ganadería, el precio del kilo “casi se ha duplicado” desde el 2022. Mientras que este año el coste se sitúa en 5 euros aproximadamente, el año pasado “no llegaba ni a los 4”, según dicen desde este establecimiento. Así, el precio por cada animal oscila entre los 280 y los 450 euros.

Por otro lado, Ali, de la Carnicería Sidi, se expresa en el mismo sentido, pero añade que “lo han vendido todo en tres días”.

“Los pesos medios están rondando los 18 o 20 kilos y salen por unos 330 euros”, señala.

En la carnicería Brik, situada en la calle García Cabrelles también indican la misma situación y dicen que “los animales vienen pesando entre 10 y 13 kilos”.

En este mismo comercio apuntan que esto no evita que la gente siga yendo a comprar los borregos, pero que, de todas formas, “no ven la situación como en 2022”.

“Viene menos gente que otros años, es de lógica. Si no puedes pagarlo o tienes que pagar otras cosas, es complicado”, destacan.

De este modo, a pesar del mayor precio y menor tamaño de los borregos, la gente sigue yendo a comprar para celebrar esta festividad ya tan próxima. Tal y como apuntaba uno de los hombres que se encontraba en la ganadería de carretera Farhana, “si quiere tomar parte en esta fiesta, no te queda otra, tienes que comprar un borrego por lo menos”.

El mayor coste de los alimentos empleados en el engorde de estos animales sumado a la mayor compra de corderos que se está haciendo desde Marruecos ha provocado un incremento en el precio de los borregos que, aunque se siguen vendiendo a un ritmo normal, suponen un gran sacrificio económico para los hogares y repercute en los beneficios de los comercios melillenses dedicados a la importación y mantenimiento de estos animales. Tal y como apuntan en algunos de ellos, han tenido que subir el precio, pero, a pesar de ello, el margen con el que se quedan también es menor.

Las familias también lo notan

La cercanía de la Fiesta del Borrego en Melilla ha hecho que en los hogares donde se celebra esta festividad ya se estén pensando los platos y el menú que se prepará el próximo 29 de junio, cuando familias y amigos decidan reunirse para este día tan señalado.

Estos preparativos requieren, como es lógico, un borrego. Un borrego que este año, tal y como han podido ver en las familias melillenses que tomen parte en esta fiesta, tiene un tamaño visiblemente menor que los que se trajeron a la ciudad el año pasado.

Este es el caso de Aissa, que dice que celebrará este día con su madre y su familia, donde ya están pensando que van a poner en la mesa en menos de dos semanas.

“Nosotros hemos visto borregos por 350 euros, pero son muy pequeños, así que creo que tendremos que comprar más comida porque no sé si será suficiente para todos”, comenta esta melillense.

Entre las comidas que van a poner en su mesa para toda la familia, Aissa destaca varios platos “que hacen todos los años para esta fiesta”.

La carne del cordero dice que la prepararán de varias maneras. “Una la dejamos para hacer pinchitos, otra la hacemos al vapor y también haremos algún guiso con un poco de caldo, aunque a mi eso me gusta menos porque tiene más grasa”, señala.

Así, estas elaboraciones con el borrego irán acompañadas, según dice Aissa, con algo más de comida para que “nadie se quede con hambre” y asegura que, también como todos los años, “dejarán hechos varios postres”.

“Seguramente haremos un poco de cuscús dulce y un poco de helado, que en estos meses ya va apeteciendo con el calor que hace”, añade Aissa.

Por otro lado, Hakim, uno de los hombres que se encontraba en la ganadería ubicada en la carretera de Farhana decía bromeando que “si tienes una familia grande habría que comprar más de un borrego para que coman todos”.

Hakim se lo tomaba con humor y comentaba que “se iban a tener que comprar tres, uno para hacer pinchitos, otro para hacerlo al vapor y otro para hacer un guiso”.

Mientras decía esto, hablaba con uno de los responsables para decirle qué animal le había convencido más para que empezaran a preparárselo y que se lo pudiera llevar con él.

Mustafa, que también se encontraba en este establecimiento, señalaba que “si eres creyente, esta fiesta tienes que hacerla” y que la gente, “si tiene que pagar 50 euros más este año, lo va a hacer de igual forma”.

Otros, como Moha, que venía acompañando a un familiar, dejaba en las manos de este la elección del cordero, pero del mismo modo, señalaba que los animales “les parecían más pequeños”.

“Nosotros vamos a celebrar la fiesta claro, como todos los años, pero también es verdad que nos va costar algo más”, comenta.

Moha, que celebrará este día con sus hijos, su mujer y sus padres dice que, por suerte, él consiguió un borrego algo más grande porque “llegó antes que el resto al lugar donde lo compró”.

“Es verdad que la mayoría de los corderos parecen más pequeños que los que trajeron el año pasado, pero hay algunos que sí que tienen buen tamaño, tienes que estar más rápido que los demás si te quieres llevar alguno de esos”, comenta.

Así, este año, con los precios más altos y con animales más pequeños que en 2022, algunas de las familias que quieran celebrar esta festividad tendrán que valorar si comprar más comida aparte del propio borrego.

Algunos dicen que sí que lo harán, pero otros, con la subida del coste de los corderos aún no saben cómo lo van a hacer.

Lo que sí está claro es que, a pesar de todo, esta fiesta la van a celebrar muchas personas en Melilla y esto salta a la vista cuando se ve el ritmo al que se están vendiendo los borregos o la afluencia que siguen teniendo los comercios dedicados a su importación.