“En política es imprescindible tener vocación de servicio social”

La recién nombrada viceconsejera de Juventud y Mujer, Isabel Moreno, es una de las caras nuevas del Gobierno local. Tiene 30 años, es abogada y llega a ambas áreas con ilusión y ganas de servir a los ciudadanos de estos colectivos. Convencida de que dedicarse a la política es algo vocacional, Moreno quiere reflejar esa motivación en los dos departamentos que ahora dirigirá.

El desempleo de los jóvenes melillenses es un reto al que se enfrenta la viceconsejera y afirma que es necesario labrar un presente para que el colectivo tenga un futuro. No olvida la lucha contra la violencia de género, una realidad que es necesario erradicar.

Moreno, en una entrevista concedida a El Faro de Melilla, analiza el presente de sus áreas y sus apuestas para el futuro de jóvenes y mujeres melillenses. ­­

–¿Qué sintió cuando el presidente le comunicó que había contado con usted para formar parte del Gobierno local?

–Para mí eso ha sido un gran honor. Desde el primer momento que el presidente contó conmigo para ir en las listas como número cinco. Y luego tener no sólo ya la representación en la Asamblea de la Ciudad, sino poder formar parte del Gobierno en unas áreas tan sensibles y tan importantes como son Mujer y Juventud, es una grandísima ilusión. Tengo muchas ganas de trabajar. Considero que se pueden hacer muchísimas cosas en estas áreas, porque son colectivos socialmente que necesitan ese refuerzo y ese empuje. Estoy muy motivada por esta oportunidad que me ha brindado el presidente.

–¿Qué experimentó en el momento de jurar su cargo en el Salón Dorado del Palacio de la Asamblea?

–Estaba muy emocionada. Si no el más feliz, de los momentos más felices que he tenido en mi vida. Es una gran responsabilidad que voy a asumir y la asumo con mucha ilusión, con muchas ganas, máxime en las áreas que son.

–¿Qué cree que puede aportar al Gobierno de la Ciudad?

–Creo que es importante, por un lado, la perspectiva que puedo dar desde Juventud. Además, siempre lo he dicho, el Gobierno tiene una retroalimentación positiva con las incorporaciones jóvenes que hay, entre las que yo me encuentro, y las personas experimentadas que ya tienen unas tablas, una experiencia muy dilatada en política, que evidentemente te enriquecen. Creo que lo que te da la juventud, esas ganas, ese empuje, ese impulso, es lo que yo voy a intentar transmitir en Juventud y en Mujer. Sobre todo, focalizándome en las áreas fundamentales que tenemos los jóvenes, que es el desempleo juvenil. O en el área de Mujer, que también es uno de los colectivos que se ve más afectado. Por supuesto, el problema de la violencia de género, alcanzar igualdad de oportunidades de forma efectiva… Todas las áreas en las que se pueda trabajar para mejorar las oportunidades que se puedan brindar a jóvenes y mujeres.

–Es mujer y joven, ¿cree que puede tener mas empatía con estos colectivos?

–Desde que empecé Derecho, fui estudiando las materias y me fui dando cuenta de mis gustos y preferencias. El tema social siempre me ha despertado mucha inquietud y mucho interés. Siempre he tenido esa motivación de querer hacer algo social, algo importante y beneficiar a la ciudadanía. En este caso, a dos pilares fundamentales de la sociedad melillense como son los jóvenes y las mujeres. Creo que no es sólo la cuestión de ser mujer y joven la que te da empatía. En mi caso personal, sí lo siento pero es por motivación social. Creo también que un hombre mayor la podría sentir, es una cuestión mas de persona. Estoy muy empatizada y muy solidarizada con estos dos colectivos. Creo que eso es una cuestión de vocación social.

–¿Cual es su motivación para estar en la primera línea de la política?

–Como he dicho, cuando estudiaba Derecho me di cuenta de que lo que me motivaban eran los temas que causaban indignación, los temas en los que yo veía que se estaban produciendo injusticias o que se podían plantear de otra forma. Todos los temas sociales que se pudieran mejorar. Es una cuestión meramente motivacional.

–¿Considera entonces que dedicarse a la política debe ser algo vocacional?

–Creo que es imprescindible. Si no tienes vocación de servicio público, habrá muchos trabajos en los que puedas encajar, pero en política creo que es imprescindible y necesario tener vocación de servicio social.

–¿Qué opinión le ha transmitido su entorno después de conocer que iba a ser viceconsejera de Juventud y Mujer?

–Mi entorno más cercano me ha apoyado muchísimo. Además, sabiendo cómo soy, que siempre he tenido esta inquietud y esta aspiración. Es un gran orgullo para ellos. Yo también provengo de una familia muy humilde. El hecho de que haya podido conseguir la aspiración que tenía de realizar una función social en mi ciudad, en Melilla, creo que es una alegría compartida por mí y mi familia.

–Va a trabajar en estas áreas con el consejero de Educación, Antonio Miranda; con la viceconsejera del Mayor y Relaciones Vecinales, Carmina San Martín y con la viceconsejera de Integración Cultural, Nasera Al-Lal. ¿Qué destacaría de ellos?

–Es otro tema que me causa mucha alegría. Antonio Miranda es un excelente político, tiene una experiencia muy dilatada. Es una persona que siempre me ha acogido muy bien desde que empecé mi trayectoria en Nuevas Generaciones. Para mí, la verdad es que es un honor trabajar con él. Lo mismo te puedo decir de Carmina, que la conozco desde hace muchos años y es una persona que está muy volcada con el colectivo de mayores. Estoy muy contenta con mis compañeros. A Nasera la he tratado menos, pero es una persona que tiene iniciativa. Estoy satisfecha a todos los niveles posibles.

–¿Que destacaría de sus predecesoras, Sofía Acedo y Fadela Mohatar?

–Tengo que hacer un reconocimiento expreso tanto de Fadela como de Sofía, porque han hecho una labor muy encomiable en el área de Mujer y en Juventud. Le han dado un impulso muy importante. La verdad es que siento agradecimiento porque han hecho un trabajo excelente y es de justicia reconocérselo. ­­

–Vamos a entrar de lleno ya en las áreas que le competen. En primer lugar, en Juventud, ¿cuáles son sus objetivos y los grandes retos a los que se enfrenta?

–Creo que el gran reto que tenemos en Juventud es paliar el desempleo juvenil. Es el problema fundamental y creo que es a lo que debemos focalizar la política. Pienso que Juventud se puede enriquecer con distintos convenios de colaboración que se van a hacer con distintas administraciones, con las propias consejerías y focalizar bastantes recursos en mermar esta problemática.

También la formación, es otra problemática crucial que tenemos, porque prácticamente más de la mitad de nuestros jóvenes no están convenientemente formados y eso tiene su repercusión directa en el ámbito laboral. Si no estás bien formado tienes más dificultad para incorporarte al mercado laboral.

Creo que la formación y dar unas bases suficientes a los jóvenes, junto con el empleo, son dos pilares fundamentales del área de Juventud y son dos problemáticas que debemos solventar.

El ocio juvenil también estará presente pero en una línea más secundaria, porque considero que lo crucial es solventar los problemas principales que tiene la juventud. También, acabar con el tópico de que no hay nada para los jóvenes en Melilla. Se llevan a cabo muchas políticas de Juventud transversalmente y el presidente siempre ha estado muy volcado con los jóvenes. Pero es verdad que al tener una población mas joven que el resto del panorama nacional, es más difícil de solventar, pero se han hecho muchas cosas y mi intención es hacer todo lo posible para acabar con estos tópicos y solventar estos problemas.

–¿Cuál va a ser la primera actuación que se va a llevar a cabo en este área?

–La primera actuación, teniendo en cuenta que voy a entrar en una Viceconsejería que tenía un programa y por el cambio de viceconsejera no ha paralizado su actuación, va a ser La Gran Movida por una cuestión de agenda. Me alegra iniciar la labor en Juventud con una actividad mítica que lleva muchísimos años, que además tiene una gran acogida y es muy esperada por los jóvenes. También ayuda a generar una acción de ocio juvenil que está muy bien. Lo que quiero estudiar es, teniendo en cuenta el presupuesto de cara al próximo ejercicio, son las medidas de empleabilidad que se puedan adoptar, todos los cupos juveniles que se puedan mejorar tanto en empleo como en vivienda, fomentar también la oferta formativa que se ofrece desde Juventud. Muy focalizado a eso.

Es pronto para dar medidas concretas pero los objetivos que vamos a perseguir son esos. La política debe de ir enfocada a solventar la situación, a brindar oportunidades. Formación y empleo son las dos grandes problemáticas y son las dos cuestiones en las que yo me voy a centrar y en las que quiero hacer política juvenil.

–¿Habrá algún tipo de sinergia con la recién creada Consejería de Empleo para paliar el problema del desempleo juvenil?

–Considero que es muy importante hacer convenios de colaboración. Juventud y Mujer son materias muy transversales, se pueden hacer muchas cosas con distintas consejerías y viceconsejerías. También incluso con la Administración central. Todos los convenios de colaboración y de todo lo que me pueda nutrir para alcanzar estos objetivos, lo voy a hacer.

–¿Se apostará entonces por la creación de empleo juvenil de forma estable?

–El plan de empleo es una medida social muy importante por la función que tiene, pero claro, no es lo idílico ni es el objetivo fundamental. Lo ideal es que los jóvenes tengan esa formación que les permita incorporarse en el mercado laboral con una estabilidad.

–¿Cuáles son los retos pendientes que va a seguir impulsando desde el área de Juventud?

–Mejorar la situación de los jóvenes al máximo posible, brindarle las mayores oportunidades que se les pueda dar y mejorar su calidad de vida. Que tengan oportunidades, labrarles este presente para que tengan un futuro.

–Centrándonos ahora en Mujer, ¿cuáles cree que son los grandes retos en este área?

–En el área de Mujer tenemos por un lado el tema de la violencia de género, que siempre está presente. Yo creo que es una cuestión fundamental. Nosotros vamos a apoyar siempre a las mujeres víctimas de violencia de género, pero ya no sólo apoyarlas, sino además emprender las medidas preventivas que sean necesarias para eliminar esta realidad de nuestra sociedad. Eliminarla, erradicarla definitivamente.

Alcanzar la igualdad de oportunidades efectiva, que no exista ningún tipo de discriminación en el sector femenino, para mí también es muy importante. Considero que tanto Mujer como Juventud son dos áreas muy importantes a nivel nacional, pero creo que es mas importante aún mas si cabe en Melilla con nuestra situación particular y nuestra idiosincrasia. Considero que son dos áreas, sobre todo Mujer, donde quizás podamos ser un referente a nivel nacional.

Podemos serlo porque aquí la cuestión cultural creo que nos presenta un reto distinto, aunque a nivel nacional tienen la problemática también, por desgracia, de la violencia de género. Pero aquí tenemos la función de integrar a la mujer en la sociedad melillense y creo que eso puede ser un modelo que podamos extrapolar a la península por las circunstancias de nuestra ciudad, donde hay una gran riqueza multicultural, una gran integración. Eso es muy importante cuidarlo, mantenerlo y exportarlo a la península. Creo que Melilla puede ser un gran referente en esta área.

Considero que la alfabetización y la formación, como medida de integración de la mujer, me parece crucial. Y por supuesto, mejorar la empleabilidad, que también se ve afectado el colectivo de la mujer como otro de los grandes perjudicados del desempleo. Quizás no lo he dicho en orden, pero estas pueden ser las líneas de actuación básicas y fundamentales en las que quiero focalizar la Viceconsejería de la Mujer.

–Imagine por un momento que ya han pasado los cuatro años de legislatura. ¿Qué le gustaría que se hubiese conseguido tras ese tiempo en el área de Mujer?

–Dentro de cuatro años me gustaría que la violencia de género ya no fuera una realidad. También me gustaría haber contribuido a construir una sociedad más igualitaria y más justa. Y que Melilla fuera un referente a nivel nacional y que la ciudad exportara nuestro modelo de convivencia y de integración, porque esto cada vez va siendo una realidad en la península y nosotros para eso somos un referente.

–¿Qué programas e iniciativas se pueden potenciar desde la Ciudad para paliar y solucionar los problemas de las mujeres en Melilla?

–Quiero estudiar los programas que son más eficaces, los que dan mejores resultados para mantenerlos y algunos cambiarlos, pero todavía es pronto. Tengo que ver los presupuestos, estamos en mitad del ejercicio y me tengo que encajar con los recursos que tengo ahora mismo. Pero la verdad es que sí p­uedo decir que estoy muy volcada con estas dos áreas, voy a dar lo mejor de mí misma para alcanzar los objetivos. Espero que dentro de cuatro años podamos hablar de logros, esa va a ser mi intención.

Por ejemplo, estamos apoyando los pisos de acogida para que las víctimas de violencia de género tengan esa tranquilidad y no tengan problemas adicionales. Se hacen actividades de formación, se da una asistencia integral a las víctimas de violencia de género.

Eso es lo que yo quisiera, que se erradicara y no existiera. Mientras haya una mujer víctima de violencia de género no se puede decir que no sea un problema grave. Tenemos que acabar con esa realidad.