El delegado en Melilla del Consejo Estatal de Personas Mayores, Rafael Ballesteros, se mostró muy satisfecho tras la celebración de la reunión en Madrid de esta entidad.
Melilla estuvo representada por el consejero de Personas Mayores de la ciudad recién elegido, Rafael Ballesteros, en el Consejo Estatal de las Personas Mayores, una reunión, a nivel nacional, celebrada en Madrid bajo la presidencia de la ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez. Ballesteros es el presidente del Club de Jubilados y Pensionistas ‘Divina Providencia’ y de la Peña Colón, ambas instituciones ubicadas en el barrio de Cabrerizas.
Ballesteros afirmó que “España, gracias a los avances científicos, al alto nivel de nuestra sanidad y al desarrollo de las políticas sociales, se vive más tiempo y en mejores condiciones de vida”.
El consejero de Personas Mayores de Melilla aseguró que “es cada vez más frecuente encontrar familias con más generaciones viviendo a la vez y, por lo tanto, que las generaciones más jóvenes coincidan con sus abuelos y abuelas”.
Ballesteros regresó a Melilla con la satisfacción de haber representado a los mayores en el principal foro de encuentro y debate de los temas que afectan a los mayores y no dudó en afirmar que “es un proyecto ilusionante al que no ahorraré ni un minuto de mi tiempo porque lo llevo haciendo hace años a nivel local y ahora tengo la suerte de hacerlo en Madrid, al más alto nivel”·.
Libro Blanco
El tema central de este primer encuentro tuvo un punto fundamental, la redacción y posterior consenso, previsto para los próximos meses, del ‘Libro Blanco del Envejecimiento Activo’, una plataforma de un centenar de temas para debate que ha contado con la participación no sólo de los mayores de España sino también de los Ministerios de Trabajo, Sanidad y Defensa.
Como manifestó Trinidad Jiménez, Europa envejece de forma progresiva y rápida. “Estamos en el inicio de un fenómeno poblacional que está trastocando las estructuras demográficas y que tiene amplias repercusiones sociales, económicas y culturales”.
Jiménez aseguró que “se trata de una revolución silenciosa que avanzará a lo largo del siglo XXI y demanda cambios importantes en nuestra sociedad respecto al grupo de población protagonista, las personas mayores”.