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El velero Toftevaag, dedicado a la investigación, atraca en Melilla

El velero Toftevaag llega al puerto de Melilla y abre sus puertas a diferentes colectivos y centros educativos de la ciudad autónoma para que puedan comprobar de cerca cómo se trabaja en un barco científico. Además, durante su parada, se ha contactado con distintos grupos de buceo, con la Red de Varamientos del Mar de Alborán y con el Instituto Oceanográfico de Marruecos con sede en Nador.

La visita a la ciudad autónoma se trata de una toma de contacto con el objetivo de arrancar de nuevo con las campañas que cubrirán todo el mar de Alborán y donde el Toftevaag será una plataforma de trabajo científico que, además de centrarse en la protección y estudio de especies paraguas (cetáceos, tiburones, atunes, tortugas y aves marinas), abrirá sus puertas al público y, en especial, a profesores, escolares y medios de comunicación con el objetivo de que puedan descubrir cómo es un barco de investigación y el trabajo que se realiza en él.

Este encuentro se enmarca dentro del proyecto Medtop Alborán, en el que biólogos, comunicadores y ONG's retoman esta colaboración internacional tras finalizar la crisis del Covid y que tiene como base este navío de velas acangrejadas. En esta primera campaña prácticamente se han visitado todos los puertos de España y Marruecos en el mar de Alboran, convirtiéndose en una especie de relanzamiento del proyecto.

Un velero centenario

Este velero noruego se construyó en 1910 en un pequeño y hermoso pueblo del cual recibe su nombre y pasó sus primeros años pescando arenques en el Atlántico Norte. Durante la Guerra Mundial, se utilizó para llevar pilotos a un aeródromo alrededor del Cabo Norte. Tras este comienzo aventurero, se utilizó para transportar mercantes y sus mercancías por los fiordos noruegos hasta 1958, cuando obtuvo su primer motor semidiésel y se convirtió para ser utilizado como arrastrero hasta 1979 cuando Jack Ramberg comenzó su restauración.

No fue hasta 1989 cuando se convirtió nuevamente en un velero, con una nueva misión, desarrollando programas de investigación y educación para la conservación de la biodiversidad marina. Desde entonces, Toftevaag se ha convertido en un buque insignia de la conservación marina, donde más de 3000 personas de 64 países han trabajado en equipo para diseñar áreas marinas protegidas y establecer esquemas de gestión pragmáticos que hacen compatibles la conservación de la biodiversidad y el crecimiento económico.

La palabra "toftevaag" en lengua vikinga significa "lugar de encuentro" y es un concepto al que no ha dejado de hacer honor este velero de origen noruego.

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