Una buena compañía, una charla agradable y una exquisita comida son los ingredientes de una magnífica noche. Hoy es el último día en el que los melillenses podrán disfrutar de uno de estos elementos a través de los ricos platos que componen el menú degustación del restaurante La Muralla situado en Melilla La Vieja.
Esta no es la primera vez que Guillermo Benet y su hija idean una serie de entrantes y platos principales para provocar la locura en los paladares de sus clientes. Los que ya han probado este menú degustación quedaron encantados por la variedad y las novedades que presenta.
Una de las principales características de este conjunto de platos es la utilización de productos y alimentos de temporada, como la castaña o la granada. Así, se trata de que los clientes tomen nota de la incorporación de estos productos en sus comidas caseras, sobre todo, porque se trata de frutos que a penas se utilizan en la elaboración de recetas diarias.
Características
El menú degustación comienza con tres tipos de crema a modo de aperitivo como son una de zanahorias y manzana, una de castañas y la última de marisco. Tres sabores distintos que se complementan para causar la mejor impresión de los clientes.
Los primeros entrantes están protagonizados por unos crepes de espárragos y setas gratinadas y un crujiente saquito de morcilla con cebolla caramelizada.
Pero con estos datos, sólo se llega a la mitad del menú, el primer plato está compuesto por un salmón en papillón, que resulta suave y guarda todas sus propiedades. La ruptura de la rutina gastronómica y otra de las novedades es el sorbete de granada. Un fruto al que no se le saca partido por su dificultad a la hora de limpiarlo, pero que casa perfectamente con la idea de este refresco, que no es otra que separa los gustos del pescado y de la carne.
Un solomillo de cerdo ibérico al wisky es el centro de atención del segundo plato. El menú finaliza con la degustación de tres postres caseros, una quesada, un puding de mandarina y unas trufas. Además, se acompañará de tintos de La Rioja de la casa.
Todos los platos que componen esta especial recopilación son una alternativa a la tradicional carta de la casa a la que seguro se sumarán a partir de ahora alguno de ellos debido a la demanda de los clientes, que quedarán satisfechos no sólo por la calidad de los productos y su precio, 49 euros por persona, sino por la atención personalizada y cercana de este restaurante.
Una buena compañía, una charla agradable y una exquisita comida son los ingredientes de una magnífica noche. Hoy es el último día en el que los melillenses podrán disfrutar de uno de estos elementos a través de los ricos platos que componen el menú degustación del restaurante La Muralla situado en Melilla La Vieja.Esta no es la primera vez que Guillermo Benet y su hija idean una serie de entrantes y platos principales para provocar la locura en los paladares de sus clientes. Los que ya han probado este menú degustación quedaron encantados por la variedad y las novedades que presenta. Una de las principales características de este conjunto de platos es la utilización de productos y alimentos de temporada, como la castaña o la granada. Así, se trata de que los clientes tomen nota de la incorporación de estos productos en sus comidas caseras, sobre todo, porque se trata de frutos que a penas se utilizan en la elaboración de recetas diarias.Características
El menú degustación comienza con tres tipos de crema a modo de aperitivo como son una de zanahorias y manzana, una de castañas y la última de marisco. Tres sabores distintos que se complementan para causar la mejor impresión de los clientes. Los primeros entrantes están protagonizados por unos crepes de espárragos y setas gratinadas y un crujiente saquito de morcilla con cebolla caramelizada. Pero con estos datos, sólo se llega a la mitad del menú, el primer plato está compuesto por un salmón en papillón, que resulta suave y guarda todas sus propiedades. La ruptura de la rutina gastronómica y otra de las novedades es el sorbete de granada. Un fruto al que no se le saca partido por su dificultad a la hora de limpiarlo, pero que casa perfectamente con la idea de este refresco, que no es otra que separa los gustos del pescado y de la carne. Un solomillo de cerdo ibérico al wisky es el centro de atención del segundo plato. El menú finaliza con la degustación de tres postres caseros, una quesada, un puding de mandarina y unas trufas. Además, se acompañará de tintos de La Rioja de la casa.Todos los platos que componen esta especial recopilación son una alternativa a la tradicional carta de la casa a la que seguro se sumarán a partir de ahora alguno de ellos debido a la demanda de los clientes, que quedarán satisfechos no sólo por la calidad de los productos y su precio, 49 euros por persona, sino por la atención personalizada y cercana de este restaurante.