El Puerto Noray estrena sus nuevas instalaciones

El Puerto Deportivo de Melilla estrena nueva cara. En la jornada de ayer se inauguró el remozado Noray en un acto al que acudió la plana mayor del Ejecutivo local, la Delegación del Gobierno, la Autoridad Portuaria, representantes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y de la Comandancia General. Este espacio estrenó ayer dos plazas cubiertas que han sustituido a las terrazas de los locales de ocio nocturno. Ambas se encuentran coronadas por dos solerías de color azul mar, dando un aspecto más diáfano y abierto al Noray.
También se ha renovado la iluminación de la zona de pasillos entre locales, se han saneado las fachadas con una nueva capa de pintura y se ha ajardinado la parte de la marina seca. También se han rehabilitado los viales de la dársena de embarcaciones menores. Para todo ello, se ha realizado una inversión aproximada de 1,1 millones de euros y se ha trabajado durante medio año a destajo. El resultado, un Puerto Noray más luminoso y con vocación de convertirse en una suerte de centro comercial abierto, dejando de un poco de lado los pubs de ocio nocturno que hasta la fecha prácticamente monopolizaban el lugar.

Puerto y ciudad
“Era absolutamente necesario crear una sinergia que fuera desde el Puerto a la ciudad”, afirmó a los presentes el presidente del ente portuario, Arturo Esteban. “El Noray no puede ser algo ausente de la vida social, económica y cultural de Melilla. El proyecto de esta ciudad es algo inacabado. No es una foto fija, sino dinámica, joven y con ganas de crecer. Reclama un papel en la sociedad española, algo totalmente legítimo y que sirve para hacer más grande este rincón del país”, aseguró.
En palabras de Esteban, la obra que se ha llevado a cabo en el Noray “no es una piedra suelta en el camino, sino unas instalaciones muy dignas para estar a la cabeza de España”. En su opinión, “es muy difícil encontrar un puerto deportivo como éste en el resto de la geografía nacional”.

“De vosotros depende”
Asimismo, subrayó que de los melillenses depende el mantener en buen estado estas nuevas instalaciones. “Es aquí donde se debe demostrar que los ciudadanos tienen intereses comunes y que nos hacen ir de la mano hacia el futuro”, apuntó. “Pido a los melillenses que nos volquemos con el Puerto Noray para disfrutarlo, a los operadores que pongan lo mejor de sí mismos para dar un buen servicios y a los poderes públicos el mayor de los desvelos con esta infraestructura. Hay un antes y un después en el Noray con esta inauguración y espero que sigamos en el mismo camino”.
Además, abogó por incrementar la oferta de comercios en la zona. “Debe ser un espacio donde ir a diario y a todas horas, no solamente los fines de semana por la noche”, abogó. En la misma línea, mostró su confianza en que el Puerto Deportivo comience ahora “una fructífera etapa, ya que es lo que se merecen los ciudadanos”.
Por último, reseñó que la situación en la que se encontraba anteriormente la zona no era la mejor para atraer inversores. “Vamos a empezar a trabajar para traer nuevos negocios, aunque no sea la mejor época por la crisis. Si no hay emprendedores poco podemos hacer. Ayudamos en todo lo que podemos, se lo ponemos todo muy fácil. Hay una unidad de la Autoridad Portuaria dedicada exclusivamente a este labor”, concluyó.
A partir de este punto, solamente queda darle tiempo al tiempo para comprobar qué tal funciona este nuevo enfoque que le han dado al Puerto Deportivo Noray y si llegan a establecerse nuevos negocios en la zona, como espera Esteban.

El Puerto Deportivo Noray también estrenó ayer imagen y logo. Dos trazos azules que se asemejan a una embarcación de vela surcando el mar se han convertido en el nuevo símbolo definitorio de este espacio. Esteban reseñó ayer que hay que incrementar la oferta de deportes náuticos para revitalizar dicho espacio, así como dar mayor variedad a la oferta de productos y servicios para atraer a los melillenses.
Como colofón al acto de ayer, se visionó un vídeo sobre el futuro de la Autoridad Portuaria a corto y medio plazo, en el que se invitaba a “soñar e imaginar” las posibilidades de este ente como motor económico de la ciudad.
El evento finalizó con el reparto de polos con el nuevo símbolo del Noray y con un desayuno para los asistentes.