El Puerto no dará más licencias para locales de ocio nocturno en el Noray

Esteban aboga por diversificar la actividad económica de la zona para revitalizarla. “No podemos permitir que le ocurra algo parecido a lo del cargadero de mineral”, afirmó.

La Autoridad Portuaria de Melilla no concederá más licencias para pubs de ocio nocturno en el Puerto Deportivo Noray, según afirmó en la jornada de ayer su presidente, Arturo Esteban, a los medios de comunicación durante una visita a las obras de remozado. Según explicó, actualmente hay “cinco o seis” locales que no se encuentran ocupados y la intención es diversificar la actividad económica de la zona, para que no se convierta en un espacio “frecuentado solamente los fines de semana por la noche”.
En este sentido, Esteban no cerró la puerta a ninguna posibilidad, incluida la de que se instalen oficinas de la administración pública, una “tendencia común” en la ciudad autónoma y que presenta “sus pros y sus contras”.
“No puedo decir qué tipo de comercio es mejor o peor para el Noray, la intención es compaginar varias actividades para que haya vida todos los días de la semana, preferentemente en horario de mañana y tarde”, insistió el presidente del ente portuario. Sobre la actitud de los empresarios que a día de hoy tienen licencia en el Noray, señaló que ha habido “diversidad de opiniones”, pero que la opción de comenzar las obras ahora y concluirlas antes de que lleguen las fiestas navideñas fue sometida a votación y tan sólo una persona se pronunció en contra. “Se habló de hacerlo a partir del 15 de enero, pero casi nadie estuvo de acuerdo”, aseveró.
Asimismo, subrayó que la Autoridad Portuaria “ha intentado ser justa” para con los empresarios y, conscientes de las molestias que puedan causar las tareas que se están llevando a cabo, no se cobrará el alquiler de los locales hasta que concluyan las obras.
En cuanto al desarrollo del proyecto, especificó que es “una iniciativa sencilla”, cuyo eje principal es instalar una cubierta común para todos los locales, eliminando las terrazas que tenía cada negocio, una especie de “tierra de nadie” que estaba convirtiendo el Noray “en una zona impracticable”.
“Tenemos que devolver al Puerto Deportivo su imagen primigenia. No podemos permitir que ocurra algo parecido a lo del cargadero de mineral, que se echó completamente a perder. El Noray ha sufrido un desgaste necesario, ha llegado el momento de lavarle la cara”, insistió.
De manera paralela, se eliminarán todas las barreras arquitectónicas que existían entre locales, creando un espacio más abierto y diáfano. “La única separación que habrá será con jardineras y elementos similares”, defendió el presidente del ente portuario. Para más adelante, de manera casi inmediata a la instalación de la cubierta, comenzará la instalación de la nueva iluminación.
Por el momento, lo primordial es reordenar la zona interior del Noray para evitar “el desorden y la aglomeración de plazas”. Este proyecto supondrá una inversión cercana a los 400.000 euros y tiene un plazo de ejecución de tres meses. La idea es que esté listo antes de que lleguen las fiestas de Navidad.
“Estamos empeñados en diversificar la actividad del Noray. Estamos abiertos a cualquier tipo de sugerencias para ello”, agregó Esteban. “No puedo ser rígido y decir qué le conviene más a esta zona, pero, por poner un ejemplo, una cafetería en la que sirvieran desayunos y meriendas posibilitaría que hubiera gente los días laborables”, defendió.

El proceso de privatización del Noray da sus primeros pasos.

Hay que recordar que la Autoridad Portuaria de Melilla ya se encuentra inmersa en el proceso para externalizar la gestión del Noray. Según precisó su presidente, Arturo Esteban, esta iniciativa se encuentra incluida en los planes de empresa que maneja el Ministerio de Fomento y está en completa consonancia con lo estipulado en la Ley de Puertos.
Según explicó Esteban a El Faro la semana pasada, a día de hoy se está preparando el pliego de condiciones para el posterior concurso público. No obstante, podría existir la posibilidad de que el mismo quedara desierto, por lo cual el Noray continuaría siendo gestionado por la Autoridad Portuaria.