Durante este año, la demanda de conciliación que existe en la ciudad se ha visto beneficiada por el Plan Corresponsables del Ministerio de Igualdad. Las aulas matinales, las aulas de conciliación y el servicio de cangureo pueden atender a muchas familias con hijos que no han podido obtener plazas en otras guarderías de la ciudad o no pueden permitirse otros servicios de cuidado debido a su situación.
El Plan Corresponsables es una política pública que la Secretaría de Estado de Igualdad y contra la Violencia de Género del Ministerio de Igualdad comenzó en el año 2021. Su objetivo es garantizar el cuidado como un derecho en España desde la óptica de la igualdad entre mujeres y hombres, al amparo del artículo 44 de la Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de mujeres y hombres y desde un enfoque de garantía de derechos universales, al margen de la condición laboral de las personas beneficiarias.
Entre los objetivos del Plan Corresponsables se encuentra favorecer la conciliación de las familias con niños y jóvenes de hasta dieciséis años, siempre desde un enfoque de igualdad entre hombres y mujeres.
Esto se realiza mediante la creación de empleo de calidad en el sector de cuidados, la elaboración de planes de formación en corresponsabilidad y cuidados destinados a los hombres y, cuando el sistema lo permite, la puesta en marcha de un sistema de acreditación de competencias profesionales adquiridas a través de la experiencia profesional o vías no formales.
El Plan Corresponsables se desarrolla en colaboración con las Comunidades y Ciudades Autónomas, que son las responsables competenciales de poner en marcha tres de sus cinco ejes: la creación de bolsas de cuidado profesional que faciliten la conciliación, el fomento del empleo y la certificación de la experiencia profesional de cuidado no formal.
Para ello, este año Melilla ha recibido 1.776.790,25 euros del Ministerio de Igualdad para continuar impulsando y trabajando en la conciliación familiar. En total, el Ministerio ha repartido 190 millones de euros entre las Comunidades Autónomas y Ciudades Autónomas para poner en marcha esta política.
El Acuerdo Sectorial de Igualdad, publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) del 20 de marzo de 2023, destaca cómo en materia legislativa las medidas de conciliación históricamente se han centrado principalmente en el nacimiento, la acogida o la adopción; los permisos de lactancia o las reducciones de jornadas o excedencias no retribuidas.
Se trata de “recursos parciales” limitados a periodos de tiempo concretos que “impactan en las carreras profesionales de las mujeres”. Por ello, de forma general apuntan que las medidas no atienden las necesidades específicas de los diversos modelos de familia, como es el caso de la monoparental, o de los colectivos más vulnerables. Tampoco comprenden la flexibilización de las jornadas laborales y los lugares de trabajo.
Este era el escenario de las medidas de conciliación antes de la pandemia, “insuficiente” para la igualdad y “generador de desigualdades para la mayoría social”. La crisis sanitaria del covid19 incidió de forma específica y negativa en la igualdad de género y los derechos de las mujeres por las restricciones de movilidad o el cierre de los centros educativos, lo que afectó a la vida laboral, personal y familiar de ellas, “en tanto que son ellas quienes de forma mayoritaria asumen en nuestro país la carga de cuidados familiares y domésticos”.
Por este motivo, el Plan Corresponsables se concibe como una “política semilla” para articular los mecanismos que apoyen de manera específica las necesidades de conciliación de las familias con niños y jóvenes de hasta dieciséis años de edad y otros ejes de actuación.
Con el fin de satisfacer la demanda de conciliación en la ciudad, hay cuatro servicios que garantizan el derecho del cuidado a los más pequeños en Melilla de manera totalmente gratuita: las aulas matinales, las aulas de conciliación y el servicio de cangureo son algunos de ellos. Estos, junto a una formación específica como auxiliar de educación infantil, se enmarcan dentro de las competencias de la ciudad autónoma con el Plan Corresponsables.
Amal Mohamed, técnica en integración social, y Naima Amar, trabajadora social, son coordinadoras de las aulas matinales que comenzaron en la ciudad este curso en casi todos los centros educativos de Melilla y que gestiona la empresa Alvalop junto a la Consejería de Educación, Cultura, Festejos e Igualdad.
Se encuentran abiertas durante todo el curso escolar desde las 7:30 hasta las 9 horas de la mañana y desde las 13:40 hasta las 15:30 horas de la tarde. Están disponibles para todos los pequeños de Educación Infantil y Primaria, es decir, para los niños y niñas que tengan entre 3 y 11 años de edad.
Para cuidar de ellos en estos ratos, hay un técnico en educación infantil y un auxiliar en educación infantil por cada veinte alumnos aproximadamente. Cuando la ratio de la clase es mayor, se añade tanto un técnico como un auxiliar para que no decaiga la atención educativa.
Explica Amal Mohamed que hay clases que tienen niños con necesidades especiales, como autismo o hiperactividad, en cuyo caso también necesitan de otro técnico más en el centro para que puedan cuidar de ellos correctamente, por lo que en estas aulas, contarían con dos técnicos y un auxiliar, por ejemplo.
Como los otros recursos del Plan Corresponsables, las aulas matinales responden a la alta demanda de conciliación que está habiendo en la ciudad en los últimos meses. En total, en todos los centros educativos, Mohamed cree que pueda haber más de 200 niños y niñas beneficiándose de este recurso. “Hay colegios que tienen 35 niños en el aula matinal, además hay lista de espera”, dice.
Ahora en junio acaba el curso escolar y llegan las vacaciones. Mohamed explica que durante el mes de julio algunos centros se mantienen abiertos y se hacen campamentos, pero se trata de una actividad dirigida tan sólo para los alumnos del aula matinal.
Para el mes de agosto están planeando hacer un campamento con los alumnos del aula matinal, pero esta vez fuera de los centros. El Parque Forestal y Rostrogordo son los dos espacios naturales que han solicitado a las autoridades para poder llevarlo a cabo.
Por otro lado, la ciudad también cuenta con unas aulas de conciliación hasta finales del mes de julio en tres centros educativos: el Centro La Divina Infantita, el Centro de Formación María Inmaculada y el CEIP Enrique Soler. Son gestionadas por la empresa Clece S.A. junto a la Consejería de Educación, Cultura, Festejos e Igualdad de la Ciudad Autónoma de Melilla.
Sheima Mohamed es la coordinadora de este recurso de conciliación. Explica que cada una de las aulas está dedicada a pequeños de distintas edades. La que se encuentra en el Colegio Enrique Soler está dirigida a los menores que tienen entre 4 y 12 meses; por ahora cuentan con 11 bebés. En María Inmaculada, en cambio, cuentan con 14 alumnos de entre uno y dos años, mientras que en Divina Infantita hay alrededor de 20 con edades de uno a tres años.
Tanto el Enrique Soler como el Divina Infantita cuentan con cinco monitores que se encargan de cuidar a los pequeños: tres técnicos y dos auxiliares de educación infantil. En el caso de María Inmaculada son cuatro porque es la que cuenta con menor ratio en el aula de los tres.
Con los pequeños siguen una rutina diaria, que normalmente suele incluir el desayuno, una asamblea, talleres de manualidades o media hora de siesta. Los padres pueden recogerlos en dos turnos, a las 13 o a las 14:30 horas.
Son muchas las familias que demandan este servicio. “No se ha podido coger a más niños porque las aulas tampoco son muy grandes”, comenta la coordinadora. Aun así, ya está habilitado el número de teléfono para que comiencen a apuntarse para el próximo curso aquellos pequeños que se han quedado fuera o están en lista de espera en las guarderías.
Al ser gratuitas, Mohamed señala que son muchas las familias que, como no tienen grandes ingresos, prefieren acudir a las aulas de conciliación. Además de eso, la coordinadora destaca que a los padres les gusta la atención que reciben los pequeños, porque cuentan con un número adecuado de personal para cuidar de los niños.
El servicio de cangureo es gratuito y puede solicitarse llamando al teléfono 689 260 816. Se trata de un servicio de atención telefónica al que puede llamar cualquier familia para usarlo cuando lo necesite. La empresa Clece S.A. gestiona este recurso junto a la Consejería de Educación, Cultura, Festejos e Igualdad.
Al solicitar el servicio, un canguro se traslada expresamente al domicilio de la familia para cuidar de los pequeños de la casa mientras los padres están trabajando o estudiando, por ejemplo. Disponen de dos horarios: por la mañana (de 8 a 15 horas) y por la tarde (de 15 a 22 horas).
“Está siendo todo un éxito”, asegura María Teresa Delgado, que coordina este servicio junto a su compañera Anisa Mohamed. La lista de espera, como en el resto de recursos de conciliación, es larga porque están “saturados” con la cantidad de solicitantes que llaman.
Junto a ellas dos, trabajan diecisiete canguros para cuidar a domicilio a niños de hasta dieciséis años en la ciudad. Ahora mismo, el servicio abarca cerca de 30 pequeños, según confirman las coordinadoras.
El servicio de cangureo comenzó en septiembre, por lo que desde entonces hay gente llamando y solicitando este recurso. Delgado lamenta que la lista de espera es larga porque, dependiendo de las circunstancias de cada persona, se le da prioridad y se le atiende antes. “Hay familias que lo necesitan más que otras”, explica, por lo que, si solicita el servicio de carácter urgente y según de donde sea derivada, se le brindará una canguro antes que a otras familias que estén por delante en la lista.
Por ejemplo, las coordinadoras hablan de familias en situaciones más vulnerables que necesitan que alguien se quede con sus hijos porque no tienen otra opción. En ese sentido, el servicio de cangureo también se les brinda a los hijos de las mujeres víctimas de violencia de género.
La consejera de Igualdad, Elena Fernández Treviño, señaló recientemente que la necesidad de estas mujeres es “muy grande” porque tienen que quedarse con los pequeños durante todo el día y eso les impide buscar empleo de forma activa.
Así, mostró su intención de crear un servicio específico de cangureo para estos casos y que, de esta manera, el cangureo pudiera abrirse completamente a la ciudadanía.
Finalmente, otra de las actuaciones enmarcadas dentro del Plan Corresponsables es un curso de formación en auxiliar de educación infantil que lleva a cabo Cecilia Valencia en el Centro de Formación La Llave y que gestiona la empresa Alvalop junto a la Consejería de Educación, Cultura, Festejos e Igualdad. Se prevé que alrededor de veinte mujeres de 20 a 50 años en situación vulnerable accedan a esta formación que les garantiza el acceso a un empleo.
Todas acuden siempre a clase muy contentas porque para ellas es “una oportunidad”, dice Valencia, puesto que gracias al Plan Corresponsables pueden hacerlo gratuitamente . “Son muy aplicadas, les gusta aprender. Esperan poder incorporarse a trabajar cuando adquieran el título”.
A la formadora le parece estupendo que el Plan Corresponsables brinde esta oportunidad a estas mujeres para acceder a un puesto de trabajo, sobre todo en este ámbito que hace falta.
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