La Consejería de Bienestar Social y Sanidad de Melilla informó ayer que el perro hallado el pasado día 28 de mayo en las inmediaciones de la Comisaría de la Policía Local, en la calle General Astilleros, ha dado positivo en rabia tras ser sometido a exámenes de diagnóstico.
Es el segundo caso que se detecta en la ciudad en menos de dos semanas. Bienestar Social recordó que el animal infectado es un cachorro de raza cruzada de color crema y llevaba un arnés hecho de cuerdas alrededor del cuerpo, cuando fue capturado por la Policía Local.
La Consejería volvió a solicitar ayer a aquellas personas que hayan podido tener un contacto salival o hayan sido mordidas por el perro que se dirijan a la dependencias de la Dirección General de Sanidad y Consumo de la Ciudad Autónoma o contacten con la Policía Local para iniciar el tratamiento, en caso de que fuera necesario. También pidió la colaboración ciudadana para que se informe si se tiene constancia de que el perro ha podido morder a cualquier otro animal que se encontrara por la zona.
El caso anterior que dio positivo en las pruebas de rabia fue localizado el pasado sábado día 17 en la zona del puerto deportivo, colindante con la playa de San Lorenzo, donde fue retirado un perro adulto de raza cruzada, macho, de tamaño mediano-grande, color marrón, y que presentaba un mal estado general.