A falta de poco más de seis meses para la fecha de su, a día de hoy, hipotética realización, el profesorado de Melilla sigue sin saber si finalmente el próximo mes de junio habrá oposiciones o no; y, en el caso de que las haya, con qué formato y para cuántas plazas.
Esta es la conclusión que se extrae de la última reunión mantenida recientemente entre el director provincial de Educación en Melilla, Juan Ángel Berbel, y los representantes sindicales de esta área en nuestra ciudad. A lo largo de este encuentro, se les explicó que, como se había prometido y es preceptivo, antes del 31 de diciembre se publicará en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el número de plazas incluidas en el proceso de estabilización, tanto de Melilla como de Ceuta, así como su distribución por Cuerpos y especialidades.
Sin embargo, se desconoce si las oposiciones previstas inicialmente para el próximo mes de junio se realizarán bajo este formato (proceso de estabilización) o, por el contrario, se ofertarán las plazas del proceso de reposición.
E igualmente se desconoce, por ejemplo, si se incluiría aquí a todos los Cuerpos menos el de Maestros, como se había hablado con anterioridad. No se sabrá hasta que no salga la pertinente convocatoria que, en otras ocasiones, se ha publicado a partir del mes de febrero o incluso ya entrado abril, por ejemplo.
Desde la Dirección Provincial se explicó que el Ministerio de Educación y Formación Profesional (MEFP), organismo del que dependen las dos ciudades autónomas en materia educativa, todavía no ha decidido, “y tardará en hacerlo” si el modelo será el de plazas de reposición (oposiciones como hasta ahora) o el de estabilización (oposiciones con solamente dos pruebas y no eliminatorias).
La causa fundamental, apuntan, habría que buscarla en Andalucía; y es que en esta comunidad, cercana a la nuestra, parece ser que se habría optado por celebrar en junio de 2023 oposiciones según el formato de reposición, mientras que en Melilla, también inicialmente, se decantarían más por la fórmula de la estabilización.
Esto podría suponer un efecto llamada y perjudicar a los opositores de nuestra ciudad, ya que al ser en teoría más fáciles las oposiciones de aquí y, además, ofrecer proporcionalmente un mayor número de plazas, muchos aspirantes de Andalucía podrían optar finalmente por opositar en una de las dos ciudades autónomas.
El proceso de oposición (los exámenes) en una y otra opción -estabilización y reposición – difiere sustancialmente; así, el de estabilización contempla dos fases no eliminatorias: en la primera habría que hacer tan solo un examen de un tema teórico y en la segunda se defendería una unidad didáctica elegida por el candidato.
Mientras que la prueba de reposición, idéntica a las realizadas en los últimos años, es bastante más compleja: consta de una primera fase eliminatoria que se hace en una misma sesión, que consta a su vez de dos partes: una prueba más práctica y un tema teórico.
De ahí se saca una media, aunque para ello hay que obtener al menos un 2,5 en alguna de las partes. Y en la segunda fase, a la que solo pasan los aspirantes que hayan superado esta primera, hay que presentar una programación didáctica y defender una unidad didáctica, pero de entre unas cuantas. Como se ve, las diferencias son considerables, así como la manera de preparar una y otra.
En ambos casos, estabilización y reposición, para pasar a la fase de concurso hay que sacar un mínimo de un 5 de media. En este apartado de concurso, ya que se trata de un concurso-oposición, se barema una serie de méritos; por ejemplo, en el proceso de estabilización se puede obtener por este concepto hasta 10 puntos, repartidos sobre todo en la experiencia docente, a razón de 7 puntos como máximo, distribuidos normalmente a razón de 0,7 puntos por cada año trabajado en un centro público en el mismo Cuerpo y en la misma especialidad a la que se opta; es decir, un opositor con 10 años de servicio ya tendría esta puntuación.
El resto del baremo se completa con temas más meramente formativos, como tener otra licenciatura, idiomas o cursos de formación. Además, también se puntúa aquí el haber aprobado alguna otra oposición similar pero sin plaza.
En Melilla esto no suele ocurrir, al menos en Secundaria, que una persona apruebe pero con una nota que no le permita obtener una plaza por haber otros candidatos con una puntuación superior, pero sí se ha dado el caso alguna vez en el Cuerpo de Maestros y es bastante usual en las oposiciones de Andalucía.
A todo esto hay que añadir otro tema que también se abordó en la misma reunión mantenida entre sindicatos y Dirección Provincial. Y es que el borrador de plazas incluidas en el proceso de estabilización de plazas por concurso oposición (a la espera de la publicación definitiva) incluye dos plazas de profesor de Servicios a la Comunidad.
Plazas que en un principio no estaban previstas que salieran y por las que preguntaron los representantes sindicales, ya que en Ceuta por ejemplo no se ha ofertado ninguna. En este sentido, se les explicó que hay que tener en cuenta “las auténticas necesidades de Melilla”, que pasan por convocar oposiciones para esta especialidad, dado que además Andalucía ha convocado un número elevado de ellas.
De todas maneras, desde la Dirección Provincial se comprometieron a estudiar esta solicitud y elevar la petición al MEFP.
La segmentación geográfica no funciona. Compruebe si la geolocalización IP está habilitada en su cuenta…
En la obra pictórica presente en Melilla de escultor y pintor Pepe Gámez (Melilla, 20…
Hoy quisiera invitarlos a reflexionar sobre un asunto que nos interpela, casi en igual medida,…
De Galicia al Mediterráneo Si vemos la imagen de una colonia de percebes (Pollicipes pollicipes)…
Dedicaba el diario El País dos páginas de su publicación dominical del pasado domingo, 4…
Queridísimos; Si algo caracteriza a la señora Díaz Pérez (doña Yolanda, "Yoli", "Yoli O' Trapiño"),…