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El Melilla BC no puede forzar el quinto partido en Menorca

Cansancio El cansancio ha sido el peor rival de los melillenses en el cuarto partido de la serie final Trabajo La derrota no empaña la buena temporada que ha realizado el equipo de Gonzalo García Se diluyó el sueño de lograr el ascenso a la Liga ACB, en el cuarto partido de la serie final ante Menorca. El pasado jueves el equipo dio esperanzas a una afición que llenó las gradas del Javier Imbroda con un partido de gran nivel, pero no pudo ser. El marcador final de 61-82, no hace justicia del juego desplegado por el conjunto melillense en éstos play offs de ascenso.
El partido no empezó nada mal para el conjunto de Gonzalo García. Ambos equipos saltaron a la cancha del Javier Imbroda dispuestos a coger las primeras ventajas, pero la iguadad quedó patente durante todo el cuarto. Dos puntos de salida de Bas son neutralizados en la siguiente jugada por un combativo Waschman. El choque entó en una fase de intercambio de puntos con mucha intensidad defensiva y con un marcaje al hombre al ‘bombardero’ Arco. Un triple de Joan Riera pusieron el marcador en 9-8, a falta de 4’40”. Arteaga y Urko se hacían sitio en la pintura, dond elos pívots melillenses tuvieronj que emplearse a fondo para poder detenerlos. Un intermitente Arco anotó desde la línea de 6,75 metros y puso a los locales por delante en el marcador 12-12, aunque Roma Bas le puso la réplica en la siguiente jugada, 12-15. Dos puntos más de Urko ponen un parcial de 0-5. 12-17, pero un triple de Manzano y dos tiros libres de Waschman ponen el electrónico en tablas, 17-17.
El segundo cuarto no pudo comenzar mejor para los hombre de Gonzalo García, un triple de Suka ponen a los locales por delante en el marcador, 20-17. Pero iba a ser un espejismo, ya que los melillenses estarían cinco minutos sin anotar. La falta de acierto de cara al aro rival no la desaprovechó el conjunto isleño, Coppenrath se conviertió en la ‘bestia negra’ del Menorca Bàsquet, apoyado desde el perímetro con Matali con un triple y Pérez con otro, 20-32, a falta bde 4’25”. Los melillenses cansados por la carga de partidos no en contraban la forma de cortar el juego de los visitantes, tan sólo Suka parecía estar en estado de ‘gracia’, dos nuevos puntos del escolta intentaron maquillar el resultado, 22-32, a falta de 3’57”.
Blanch volvió a golpear desde la línea de 6,75 metros y los aficionados volvieron a ver ‘fantasmas’ en el Javier Imbroda, no en vano el jugador de Menorca anotó 22 puntos el jueves. Riera y Suka intentaron equilibrar la avalancha de juego isleño y casi lo consiguen con un nuevo triple del madrileño, 29-37, a falta de 1’05”. Un tiempo muerto de Berrocal hace que el cuarto se cierre con dos puntos de Arteaga, 29-39.
El tercer cuarto fue un querer y no poder de los melillenses, el cansancio hizo mella en el equipo de Gonzalo García, que fallaba cómodas situaciones de tiro, aunque este equipo nos tiene acostumbrado a luchar y un triple de Arco hacen albergar esperanzas a la grada, aún había tiempo, 32-41, afalta de 8’32”. Pero el equipo de Menorca afinó aún más su punto de mira y un triple de Roma Bas Mari hacen ver nuevamente el cielo gris. Suka y Waschman se turnan para intentar mantener al equipo vivo, pero dos puntos de Urko ponen el electrónico en 37-52, con tiempo muerto de Gonzalo García. Melilla no logra enderezar el rumbo y un nuevo triple de Bas, hacen que la grada baje su intensidad de ruido, 37-55. Un desaparecido Odiakosa recortó diferencias ayudado con la salida a la cancha del capitán Romero, que demistró que los ‘viejos rokeros’ nunca mueren. Los esfuerzos de los melillenses eran vanos, con Bas desde el perímetro, un nuevo triple del jugador de Menorca ponen el marcador en 43-62, a falta de un minuto. Coppenrath y Romero hacen que el cuarto se cierre en 45-64.
Los últimos diez minutos fueron de puro trámite, a pesar de que los melillenses comenzaron con dos puntos de Odiakosa y un triple de Romero, 50-67. El equipo balear se dedicó a defender su diferencia en el marcador, haciendo muy largas la posesiones y anotando en acciones fáciles. Coppenrath se hizo con el control de la pintura y el norteamericano sacó ‘petróleo’ de sus acciones bajo el aro, 52-75, a falta de 4’14”. Con los brazos bajados el equipo melillense intentó al menos maquillar el resultado, pero un triple de Bravo terminó con las pocas esperanzas locales, 56-79, a falta de 2’40”.
Al final 61-82, y una dura derrota del Melilla Baloncesto ante el Menorca Bàsquet, en un partido donde el conjunto de Gonzalo García no mereció una diferencia tan abultada.
Menorca logra el ascenso a la ACB, y ahora tendrá que luchar por solucionar sus problemas económicos.

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