El Melilla acaricia la fase de ascenso.

Paso de gigante Los azulinos llegarán a la última jornada dependiendo de sí mismos Impresionante La UD Melilla aumenta su racha de imbatibilidad y suma 22 de los 24 últimos puntos.

on su triunfo por la mínima en el Estadio Antonio Peroles, la UD Melilla da un paso de gigante en su propósito de no bajarse de puestos de fase de ascenso, a costa de un rival que necesitaba sumar los tres puntos para no despedirse del play off y que, pese a su dominio en la mayor parte del encuentro, no supo aprovechar sus ocasiones, mientras que el conjunto azulino sí sacó tajada de un error defensivo local, además de mostrar una solidez en tareas defensivas que resultó clave.
El choque comenzó con el combinado rojillo imponiendo su ritmo a la pelota y así, las primeras llegadas al área rival las protagonizaron los locales, aunque todas ellas sin éxito; primero, un gran centro lejano de De Gomar por la derecha fue cabeceado por Javicho, perdiéndose la pelota a un metro escaso por encima del larguero de la meta que defendía Dorronsoro.
Poco más tarde, de nuevo lo intentaba el Roquetas, esta vez con Aitor metiéndose 'hasta la cocina' y en vez de chutar al borde del área pequeña, decidió poner un pase de la muerte al segundo palo que no conectó con Pallarés, porque Amarito despejó a tiempo; y cerca del minuto 20, De Gomar estuvo a punto de rematar en boca de gol, pero la zaga azulina se quitó de encima el peligro eficazmente.
El equipo que entrena Gabriel Ramón Florit había perdonado hasta en tres ocasiones y cumpliendo con la famosa máxima, acabó pagándolo, puesto que el Melilla aprovecharía en el 24 una indecisión defensiva roquetera, quedándose el balón suelto dentro del área local para que Vázquez batiera a Jonathan, estableciendo el 0-1 en el marcador.
El tanto no hacía justicia a lo que se estaba viendo sobre el césped, debido al mayor empuje rojillo, pero lo cierto es que los de la Ciudad Autónoma se mostraban muy sólidos en defensa, clave para entender la ventaja cobrada por los pupilos de Andrés García Tébar.
Después del gol, pasada la media hora, la enésima internada de De Gomar culminó con un centro raso al segundo palo, que se paseó por delante de la portería visitante sin encontrar rematador del Roquetas. Y ya en el descuento, el juego se detuvo unos minutos para atender al cancerbero.
La segunda mitad comenzó más o menos como habían transcurrido los primeros 45 minutos, con el dominio rojillo aunque sin materializarse en ocasiones, por lo que Florit realizó el primer cambio del partido, metiendo a Israel por Javicho en el 53 y al cuarto de hora tras la reanudación, introdujo en el campo a Manolo, por Marc Martínez.
Pasaban los minutos y ni unos ni otros se acercaban con peligro al área rival, pues los melillenses seguían muy bien plantados en todas sus líneas y el Roquetas no concretaba acciones que supusieran oportunidades; García Tébar empezó a refrescar a su equipo y su primera sustitución fue la que hizo abandonar el terreno de juego al autor del gol, dejando Vázquez su sitio para que entrara Víctor Bravo, en el minuto 66.
En el 70 se produjo el primer intento serio de ataque en el segundo período, con el rojillo De Gomar como protagonista, al tratar de sorprender a Dorronsoro con una volea que, tomando efecto, atrapó sin problemas el portero azulino.
Mucho más seria fue la oportunidad de la que dispuso el local Martín en el 76, cuando remató de forma acrobática una falta botada desde la izquierda y, ante la salida precipitada de Dorronsoro, el disparo del roquetero tomó rumbo de portería, despejando de cabeza 'in extremis' y bajo palos Mahanán, con el público cantando un gol que no llegó.
Se entraba en el último tramo del igualado choque, con García Tébar dando entrada a Nacho Aznar en el puesto de Honorio, mientras que Florit hizo su último cambio, entrando Beltrán por Martín; estas sustituciones dieron más mordiente ofensiva al Roquetas, que se volcó hacia arriba sin éxito, ya que los melillenses abortaban cualquier balón en largo o jugada elaborada de los de casa.
Cerca del descuento, el míster visitante fortaleció la zaga con su último cambio, en el que entró Zamorano por Guille Roldán y ya cumplido el descuento, el cuadro rojillo tuvo un libre directo al borde de la media luna, pero el lanzamiento de De Gomar murió en las manos de Dorronsoro, por lo que con el pitido final, el Roquetas se despedía matemáticamente del sueño de un play off de ascenso.