Asimismo, su demora provocó otra en el vuelo desde la ciudad autónoma hasta Barcelona. El de ayer fue un día difícil para desplazarse en avión entre Melilla y la península, tanto por la jornada de huelga general como por el mal tiempo imperante en la ciudad autónoma durante todo el día, especialmente por la mañana, que causó la demora de varios vuelos.
La principal afectada por el temporal de viento y lluvia fue la aerolínea Helitt, la única que operó ayer en la ciudad con todos sus servicios disponibles y sin verse afectada por la convocatoria de paro.
Sin embargo, la escasa visibilidad provocó que el primer avión de la mañana, el de las 7:20 horas, procedente de Málaga, no pudiera aterrizar en el aeropuerto de la ciudad autónoma. El aparato despegó de la ciudad andaluza con normalidad, pero al llegar a Melilla y tras varios intentos del piloto para tomar tierra, optó por dar media vuelta por razones de seguridad, según señalaron desde Helitt a este periódico.
No obstante, el avión pudo llegar a la ciudad autónoma a lo largo de la mañana, pero su demora provocó otra en el vuelo que debía salir con destino a Barcelona a las 8:00 horas y que se realizaba con el mismo aparato.
Por los mismos motivos, el vuelo de Air Nostrum entre Málaga y Melilla de las 7:15 horas sufrió un retraso de 73 minutos, aproximadamente, según comunicaron a El Faro fuentes de la aerolínea.