Asegura que la nueva ley que pretende aprobar el Gobierno central “se carga la separación de poderes”. La reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ) que el Gobierno pretende aprobar es para las asociaciones de jueces y fiscales inasumible. El juez decano de Melilla, Emilio Lamo de Espinosa, explicó que, por el momento, no están contemplado un programa de movilizaciones, pero sí ve más que posible que las protestas del colectivo se vuelvan a repetir de aprobarse la reforma que plantea el ministro Alberto Ruiz Gallardón. Y es que, la situación que se está viviendo en el seno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y las decisiones que toma el Gobierno central es “absolutamente anómala”, aseguró Lamo de Espinosa.
En base a un decreto del Gobierno, se suspendieron dos artículos de la actual LOPJ que ha frenado en seco el proceso de renovación del CGPJ. La pretensión del Ejecutivo de Mariano Rajoy es que este órgano se renueve bajo la nueva legislación que permite el nombramiento de la totalidad de los vocales del Consejo por parte del Congreso y el Senado, según explicó el juez decano de Melilla.
Hasta ahora, 12 de los 20 vocales del CGPJ eran propuestos por las asociaciones de jueces y magistrados y 8 por parte de las Cortes. Pero la reforma de Ruiz Gallardón hará que todos los miembros de este órgano sean nombrados por las Cortes directamente. Según Lamo de Espinosa, este proceso “se carga la separación de poderes”, convirtiendo el Consejo General del Poder Judicial en una Dirección General del Ministerio de Justicia, es decir, un órgano eminentemente político.
Esta pretensión del ministro de Justicia ya levantó las críticas del colectivo judicial español a finales del pasado año, cuando se realizaron varias protestas, aunque entonces esta reforma aún estaba por materializarse. Es por ello, que Lamo de Espinosa ve posible que se vuelvan a producir movilizaciones similares ahora.