El joven quemado en Beni-Enzar continúa vivo con heridas graves

Mohammed Suleiman, de 21 años, fue trasladado a la unidad de quemados del Hospital Ibn Rush de Casablanca con quemaduras de tercer grado.

El joven marroquí, que según las primeras versiones había fallecido el pasado miércoles abrasado en al incendiarse en una garrafa de gasolina, continúa vivo con quemaduras de tercer grado. Así lo informa el diario digital NAdorcity.com. En la información de ese medio se afirma que la víctima sufrió quemaduras de gravedad y que finalmente ha sido trasladado a un hospital de Casablanca, donde está ingresado en estado crítico.
En El Faro de ayer se apuntaban dos posibles causas del accidente, que el joven se empapara voluntariamente de gasolina   y se prendiera fuego o que se tratara de un accidente. La primera de las versiones parece descartada, según los datos que se aportan en el portal web, aunque no queda totalmente claro cómo se produjo el suceso en el que resultó herido este marroquí.
El joven, Mohammmed Suleiman de 21 años, resultó herido de gravedad con quemaduras de tercer grado en todo su cuerpo, durante un incidente con la policía marroquí en Beni-Enzar. Mohammed no fue la única víctima del suceso del miércoles. En el accidente también sufrieron quemaduras, de diversa consideración, su padre y uno de los agentes de seguridad implicados en el suceso.
Según se informa en el diario digital Nadorcity.com, el joven  y su padre se dedicaban al contrabando de gasolina procedente de Argelia. Al parecer los dos hombres estaban en posesión de 30 garrafas de cinco litros cuando fueron interceptados por una patrulla de agentes de seguridad. Los testigos, afirma el portal web, aseguraron que la policía le pidió la gasolina a los dos hombres, pero estos se negaron a dársela. Se produjo entonces un forcejeo, y uno de los presentes, no queda claro si el joven o uno de los agentes de seguridad, encendió un cigarrillo que provocó el incendio que causó las heridas a tres de los presentes.
En Nadorcity.com se afirma además que se produjo una explosión en el lugar del suceso. En las inmediaciones se encontraban también las otras dos víctimas del incidente, su padre, Abdullah Suleiman, que tuvo que ser atendido con heridas en las manos y uno de los agentes sufrió también quemaduras en la mitad superior de su cuerpo, que según el diario digital fueron de consideración leve.
Según la información que aporta otro portal de información, Nador24.com, los incidentes se produjeron en el interior de la casa de los contrabandistas, aunque en la web de Nadorcity.com explican que los hechos tuvieron lugar en la calle.
Tras el accidente los heridos fueron trasladados al hospital de Hassani para ser atendidos de las quemaduras. Sin embargo el joven Mohammed Suleiman tuvo que ser derivado a la unidad especializada en quemados del centro de hospitalario Ibn Rush situado en  Casablanca, debido a la gravedad de su situación.
Antes del traslado, en la entrada del hospital de Nador, se produjeron disputas entre los agentes de la policía y las personas que esperaban en la puerta. Tras varias discusiones la ambulancia consiguió salir hacia Casablanca con el herido que iba acompañado de algunos familiares, entre los que se encontraba su madre, visiblemente afectada por los hechos. Según las últimas informaciones publicadas en Nadorcity.com, el herido continuaba ayer en estado crítico.