El sindicato pide el cese “inmediato” del director de Atención Primaria, que negó que hubiera retrasos en las citas médicas.
Las denuncias sobre la saturación de pacientes que hay en los centros de salud y las demoras a la hora de que los enfermos puedan concertar una cita con los doctores tienen su primera consecuencia: Las “amenazas y presiones” que están recibiendo los médicos de familia para que atiendan a más usuarios. Así lo aseguró ayer el sector de Sanidad de CSI-F de Melilla a El Faro, que publicó una información sobre las colas y las carreras que realizan los pacientes del ambulatorio de Cabrerizas. El sindicato afirma que desde que hace unos días comenzó a criticar la gestión de los ambulatorios, lo único que se ha conseguido es que se presione aún más a los sanitarios, en lugar de que haya un cambio en la administración de los centros de salud y se aporten más recursos para mejorar la asistencial al usuario.
En concreto, CSI-F denuncia que las “presiones” proceden del director de Atención Primaria, José de la Vega. Afirma que los trabajadores de los centros de salud sufren un “trato vejatorio” por parte de este director. Para el sindicato, De la Vega “no está capacitado para gestionar este área”. Insiste en que la forma de dirigirse a los profesionales no es la “acorde” con el cargo que ocupa, ya que incluso llega a utilizar “las amenazas” y los “gritos” con los sanitarios.
“Falsear la realidad”
CSI-F asevera que el director de Atención Primaria no sabe hacer una buena gestión de los ambulatorios y resalta que no su actitud no es la “adecuada” para tratar con los trabajadores.
Por otro lado, el sindicato asegura que hace quince días se reunió con el director de Atención Primaria para trasmitirle las quejas que había recibido de parte de los sanitarios y de los pacientes de los centros de salud. CSI-F afirma que en esta entrevista De la Vega negó que hubiera una demora a la hora de solicitar cita con los médicos de cabecera.
El sindicato critica que hace quince días se negara que los enfermos tardan en ser recibidos por su doctor hasta 17 días y que ahora, el director territorial del Ingesa, Francisco Robles, reconozca que sí hubo una demora y que se tenía conocimiento de que se estaban produciendo retrasos a la hora de facilitar las consultas con los médicos de familia.
CSI-F asevera que hace 15 días el director de Atención Primaria “faltó a la verdad” y no le informó sobre una realidad que se estaba produciendo en los ambulatorios.
Tanto por las “presiones” que están recibiendo los doctores, como por negar que había listas de espera de dos semanas para ver al médico de cabecera, el sindicato pide el “cese inmediato” del director de Atención Primaria. En este sentido, CSI-F apunta que no entiende por qué De la Vega “mintió” sobre este tema y se pregunta por qué la Administración no es “transparente” en este tipo de cuestiones que afectan a la calidad de los pacientes.
Sustitución de médicos
Otra de las cuestiones que criticó ayer CSI-F es que el Ingesa no sustituya a los médicos de familia cuando están de baja o de vacaciones o cuando tienen días propios. El sindicato afirma que para reducir el tiempo que los pacientes esperan para tener una cita con el doctor de Atención Primaria es “imprescindible” que se reemplace a los médicos que faltan en los centros de salud. Insiste en que para evitar que los enfermos que entran por urgencias se sumen a las consultas de otros doctores que ya están saturados de trabajo, lo mejor es contratar a un sustituto. Pide que se reemplace al 100% de los doctores.
CCOO: La solución es volver a la gestión del 2013
El secretario general de Sanidad de CCOO, Carlos Antón, confirmó ayer que se está “amenazando a los médicos” de los centros de salud con aumentar el número de horas de sus consultas médicas. Destacó que les están sumando cada día más pacientes. Explicó que de esta forma el Ingesa pretende reducir el número de días que espera un enfermo para ser atendido por su médico de cabecera.
Sin embargo, Antón resalta que “la solución a este problema es mucho más sencilla”. Exige al Ingesa que vuelva al sistema de organización que tenían los centros de salud antes del 13 de enero de este año.
“Antes no había ningún problema y los ambulatorios funcionaban a la perfección, a pesar de la crisis económicas y muchos otros impedimentos. Jamás hubo en Melilla listas de espera ni problemas similares a los actuales”, asevera.
El secretario general de Sanidad de CCOO de la ciudad explica que “una determinada directiva local” ha cambiado el sistema de organización sin que los profesionales de Atención Primaria conocieran esta transformación. Y con esto, aclara que se “ha destrozado” el trabajo que se había hecho en los últimos 20 años.
Antón resalta que “no se puede permitir que se eche por tierra el trabajo de los centros de salud”. Por ello, insiste en que se debe volver a recuperar el sistema que funcionaba hasta el pasado año. El cambio al que hace referencia CCOO es que la consulta de enfermería ha dejado de atender a los pacientes que sólo van al centro de salud a por sus recetas. Ahora todos estos enfermos deben pasar por la consulta del médico para recoger sus prescripciones para sus medicamentos. Esto incrementa el número de pacientes que necesitan cita con los doctores.