En 2012 dieron a luz en el hospital de la ciudad 2.372 mujeres, frente a las 2.422 del año anterior.
El Hospital Comarcal de Melilla registró el año pasado un ligero descenso en el número de partos atendidos, al pasar de los 2.422 nacimientos de 2012 a los 2.372 del año anterior. Son cincuenta menos, pero se rompe así la tendencia al alza que se venía registrando en el centro hospitalario melillense que por su situación fronteriza atiende también los partos de mujeres de Marruecos.
Esta tendencia al alza experimentó el mayor incremento de 2010 a 2011, pasando de 2.250 a 2.422 partos, es decir, 172 nacimientos más con tan sólo un año de diferencia.
Del total de los partos atendidos en 2012, el 26,6% precisaron cesárea, es decir, 631, mientras que el resto, 1.741 fueron partos vaginales. Por otra parte, 311 mujeres embarazadas solicitaron la epidural el pasado año.
A la luz de estos datos, facilitados ayer por la Dirección Territorial del Ingesa en Melilla, es el área de Ginecología y Obstetricia la que registra el mayor número de ingresos hospitalarios en el Comarcal en relación a otras especialidades, aunque no quiere decir que todos los ingresos en este área se deban a una hospitalización por parto.
En 2012, el hospital melillense registró un total de 6.802 ingresos, de los que 2.959 fueron relacionados con la especialidad de Ginecología y Obstetricia. Al contrario que con el número de partos, que descendió el pasado año con respecto a 2011, los ingresos hospitalarios crecieron un 0,85%, es decir, 57 casos más.
Nuevamente, de 2010 a 2011 es cuando el centro hospitalario local registró la subida más alta en número de ingresos, pasando de 6.368 ingresos a 6.745 en 2011, es decir, 377 ingresos más.
Estancia media, en descenso
La especialidad de Ginecología, a pesar de suponer la mayor parte de los ingresos hospitalarios, registró la estancia media más baja. En general, el Hospital Comarcal registró el año pasado una estancia media de seis días, una décima inferior a la registrada en 2011, que fue de 6,1 y dos menos que en 2010, cuando la estancia media registrada fue de 6,3 días.
Así, Ginecología y Obstetricia fue la unidad que registró una estancia media de 2,8 días. Las unidades quirúrgicas tuvieron 1.613 ingresos y la mayor estancia media, 5,1 días. Siguiendo la línea ascendente, las unidades médicas registraron 1.421 ingresos y la mayor estancia media registrada, con 13,5 días. La especialidad de Pediatría recibió 407 ingresos y una estancia mdia de 5,8 días y Neonatología registró 229 ingresos con una estancia media de 6,8 días, según los datos del Ingesa.
Finalmente, la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) contabilizó 173 ingresos con una estancia media de 8,5 días.
Por último, el avance de la memoria de gestión de la actividad del Ingesa en Melilla en 2012 recoge que el índice de ocupación media anual del Hospital Comarcal fue de un 68,38%, similar al registrado el año anterior, que fue del 68,30% y algo más de dos puntos porcentuales con respecto a 2010, cuyo índice de ocupación media fue de 66,6%.
Los tratamientos en el Hospital de Día crecen un 8,51%
En el Hospital de Día del Comarcal se llevaron a cabo un total de 4.015 tratamientos en el año 2012, de los que 1.909 fueron oncohematológicos, 1.468 tratamientos psiquiátricos y 638 tratamientos médicos. Estas cifras representan un crecimiento global del 8,51% respecto a los 3.700 tratamientos realizados en 2011. De estos últimos, 1.590 fueron casos de pacientes en tratamiento oncológico, 1.632 psiquiátrico y 478 por otros motivos. Nuevamente la comparativa entre 2010 y 2011 refleja un notable aumento de los pacientes y tratamientos dados en el Hospital de Día. En 2010 se atendieron 2.674 y en 2011 un total de 3.700, casi 400 pacientes más.
El acceso a la asistencia especializada en régimen de hospitalización se realiza por indicación del facultativo especialista o a través de los servicios de urgencia hospitalaria, cuando el paciente necesite previsiblemente cuidados especiales y continuados, no susceptibles de ser prestados de forma ambulatoria o a domicilio. La hospitalización en régimen de internamiento comprende la asistencia médica, quirúrgica, obstétrica y pediátrica o la realización de tratamientos o procedimientos diagnósticos a pacientes que requieren cuidados continuados que precisan su ingreso hospitalario. Esta prestación incluye la realización de exámenes y procedimientos diagnósticos, incluido el examen neonatal, el seguimiento de los tratamientos o procedimientos terapéuticos o intervenciones quirúrgicas que necesite el paciente, medicación, gases medicinales, transfusiones y curas. También cuidados de enfermería, implantes y otras ortoprótesis y su oportuna renovación, cuidados intensivos o de reanimación y tratamiento de las posibles complicaciones que puedan presentarse, entre otros.