l Una auxiliar de enfermería de Neurología del Comarcal fue agredida ayer por un paciente l Tuvo que ser atendida en Urgencias por una lesión en la mano
Malos modos, gritos e insultos. Los sanitarios de Melilla se enfrentan a estas situaciones a diario, tanto en el Comarcal como en los centros de salud. Pacientes que pierden los nervios y familiares de enfermos que no saben cómo comportarse protagonizan escenas violentas que soportan los profesionales cada día. Así lo aseguraron ayer a El Faro varios sanitarios de la ciudad. Pero esto no es todo. En ocasiones, de los insultos se pasa a las manos. Y eso fue lo que pasó ayer en el Comarcal. Una auxiliar de enfermería fue agredida verbal y físicamente por un paciente en el hospital.
El suceso se produjo en la sala de espera de consultas externas, en concreto, en la el Área de Neurología, donde un hombre insultó y golpeó a la auxiliar. La profesional sanitaria tuvo que recibir asistencia médica en Urgencias, donde no sólo se la trató de una lesión en la mano, sino también a nivel psicológico, pues se encontraba muy nerviosa. Preguntaba una y otra vez por qué la habían agredido.
El Sindicato Médico denunció ayer esta situación violenta y lamentó que se haya producido “una nueva agresión física” de un paciente a un profesional sanitario en la ciudad. Afirma que hay “un porcentaje de usuarios que tiene el hábito de insultar e intimidar” a los trabajadores del área sanitaria. Asevera que es “su ‘modus operandi’ para conseguir privilegios” y que en otros casos, simplemente es “una costumbre”.
Sobre el suceso, la Dirección Territorial del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa) informó de que el paciente había sido atendido por el neurólogo antes de insultar y golpear a la auxiliar. La agresión se produjo sobre las 9:30 horas en presencia de un gran número de testigos que esperaban su turno para entrar en la cita con su médico, apuntó el instituto. Ni el Sindicato Médico ni el Ingesa aportaron más datos sobre cómo se produjo la agresión.
Denuncia al agresor
El Ingesa explicó que se ha seguido el protocolo establecido para este tipo de sucesos. Asimismo, indicó que se estaba redactando la denuncia correspondiente que será presentada en los juzgados contra el agresor. Además, advierte de que será “inflexible en la utilización de todas las vías, incluida la penal, para que las personas agresoras respondan de sus actos ante la Justicia”.
El Instituto lamenta lo ocurrido y condena cualquier acto de violencia, tanto verbal como física. Además, recuerda que las agresiones al personal sanitario son atentados y no faltas leves.
También explica el Ingesa que en este tipo de casos se prevé la asistencia médica al profesional que ha sufrido una agresión, no sólo cuando se trata de lesiones físicas, sino también ante cualquier alteración psíquica.
Además, el Instituto señala que en este protocolo se prevé la asesoría jurídica y asistencia de un abogado. “En todos los casos de delitos y faltas perseguibles de oficio, el Ingesa formula la correspondiente denuncia y un letrado del Instituto asiste jurídicamente al profesional durante todo el proceso judicial”, apunta.
Las primeras acciones
Ante la gravedad de los sucedido, el Ingesa sanitario ha ordenado la revisión de los procedimientos para que la presencia del personal de seguridad en estos casos sea lo más rápida posible.
Por otro lado, el Colegio Oficial de Médicos ha calificado este hecho como “vergonzoso e inadmisible”. Según este órgano profesional, la agresión a la auxiliar de enfermería, tanto física como psíquica, se ha producido “de manera injustificada y sin motivo alguno”.
Esta institución ha exigido que se adopten las medidas necesarias para evitar “la masificación” de los pacientes en las consultas médicas, así como poder controlar más fácilmente el acceso a los lugares donde se realizan los actos sanitarios. Por último, el Colegio de Médicos reclama un sistema de seguridad de control que garantice la integridad físico-psíquica de los trabajadores.
El Ingesa es “responsable” de no tomar todas las medidas
El Sindicato Médico también denunció ayer que el Ingesa “no es responsable del comportamiento de estos energúmenos”, en referencia a los ciudadanos que agreden verbal y físicamente a los sanitarios. Sin embargo, el sindicato asevera que el Instituto “sí es responsable de no tomar todas las medidas organizativas y jurídicas para erradicar esta lacra”.
Los médicos reclaman al Ingesa más acciones para impedir que los sanitarios puedan seguir siendo insultados y agredidos. Así, destaca que es necesario evitar las “masificaciones” en las diferentes áreas sanitarias, no sólo en Urgencias, donde se producen muchas agresiones verbales, sino también en consultas externas, donde ayer fue golpeada la auxiliar de enfermería.
Otra de las propuestas del Sindicato Médico es que el Ingesa haga un seguimiento de las actitudes “antisociales” para prevenir las agresiones físicas. Pero también señala que es importante que los profesionales del Ingesa se conciencien de que es preciso denunciar todas las actitudes violentas que sufren a diario. Explica que la única forma de prevenir la violencia física es denunciar la verbal.
El control de los accesos a las áreas sanitarias de pacientes y familiares de enfermos es otra de las exigencias del sindicato. Afirma que hay que evitar que acompañantes no autorizados entren en Urgencias. Además, señala que los pacientes sin cita médica no deben pasar a las consultas externas. Para impedir este acceso, propone que personal de seguridad o celadores hagan este control.
Por último, el Sindicato Médico pide al Ingesa que actúe como denunciante en todas las agresiones verbales y en las “conductas antisociales de las que tenga conocimiento”.