El Gobierno melillense cree que el protocolo para la valla no llega tarde

Marín afirma que se alcanzará el objetivo de crear un marco jurídico seguro para los guardias civiles.

El Gobierno local recibe “de muy buen agrado” el protocolo de actuación elaborado por el Ministerio de Interior para los perímetros fronterizos de Melilla y Ceuta. El presidente accidental del Ejecutivo autonómico, Miguel Marín, apuntó en la jornada de ayer que “todo lo que suponga defender los intereses de quienes vigilan la valla es positivo”, en alusión a los agentes de la Guardia Civil que intentar impedir las entradas irregulares de inmigrantes. “Bienvenido sea el protocolo”, subrayó el mandatario melillense en declaraciones a los medios de comunicación.
Asimismo, consideró que la decisión tomada por el Ministerio del Interior no llega tarde, pese a que la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) lleva casi dos años reclamando la redacción de dicho protocolo para dotar a los efectivos del Instituto Armado de mayor seguridad jurídica cuando intervienen para repeler a los subsaharianos que tratan de saltar la valla.

Tiempo de sobra
En este sentido, Marín recalcó que la inmigración irregular comenzó a registrar un fuerte repunte allá en el 2005, durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. “Fíjense ustedes si ha habido tiempo para redactar el protocolo desde entonces”, apuntilló criticando a los socialistas. “Con el Ejecutivo de Mariano Rajoy se va a solucionar el problema en apenas tres años”.
Para el presidente accidental, lo importante de este asunto es que “se va a cumplir el objetivo” de crear un marco jurídico más sólido a la hora de actuar en el perímetro. “El Gobierno del PP ha dado una buena respuesta a este tema. No creo que sea tarde para la aprobación del protocolo”, agregó.

Arropar a los agentes
Asimismo, el dirigente del Ejecutivo melillense afirmó que es el momento “de arropar y ayudar” a los agentes de la Benemérita, “no de ir contra ellos”, en alusión a las declaraciones del eurodiputado del PSOE Juan Fernando López Aguilar, quien anunció el pasado viernes que pensaba denunciar en Bruselas las últimas 'devoluciones en caliente' de la Guardia Civil en la valla.
Para Marín “no hay derecho a que se ataque a los efectivos del Instituto Armado de esta manera”, al tiempo que lamentó que se esté criticando “a aquellos que se dejan la piel en la frontera para defenderla” y evitar entradas ilegales. En la misma línea, apuntó que los socialistas tienen un doble discurso en cuanto a inmigración, recordando que en el año 2005 defendían una serie de medidas, como el uso de la concertina, que a día de hoy rechazan.
“Supone una incoherencia política total y absoluta. La postura del PP en este terreno ha sido siempre la misma, que es la de apoyar y agradecer el trabajo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado”, añadió el presidente accidental.

Marín defiende el derecho a jugar al golf pese a la presencia de la valla

Al hilo de sus declaraciones sobre el protocolo de actuación integral en las fronteras de Melilla y Ceuta, el presidente accidental de la Ciudad Autónoma se pronunció sobre la fotografía difundida por la ONG Prodein durante el salto a la valla del pasado miércoles, portada de El Faro en el día de ayer, en la que se ve a un grupo de subsaharianos encaramados en lo alto del perímetro mientras a escasos metros hay gente jugando en el campo de golf.
Marín defendió la presencia de dicha infraestructura deportiva a los pies del vallado y señaló que los melillenses no tienen por qué verse privados de jugar al golf a causa de la presión migratoria. Además, negó tajantemente que el campo fuera construido con Fondos Europeos destinados a colectivos desfavorecidos, como afirmó el líder de Prodein, José Palazón, en las redes sociales. En palabras de Marín, se usó dinero de Bruselas, pero para la promoción turística de Melilla. “La información que ha dado esta ONG es falsa y no se corresponde con la realidad”, añadió. Asimismo, destacó que la Ciudad Autónoma construyó el campo de golf en una zona en la que había “un vertedero”, tal y como hizo con los terrenos de juego de la Ciudad del Fútbol, también próximos a la valla, aunque no colindando con ésta, como ocurre con el del golf.
Para el presidente accidental, las críticas de las asociaciones humanitarias hacia la polémica fotografía son “un disparate y una vil demagogia”, pues afirmó que suponen “jugar con estas personas”, en alusión a los inmigrantes. “Es algo lamentable. Desde el Gobierno local siempre hemos mostrado nuestra solidaridad con los subsaharianos una vez entran en Melilla, así como nuestro rechazo a las mafias y los saltos ilegales”, abundó. “Somos los primeros en sensibilizarnos  ante esta situación, el resto es mentira y demagogia”, reprochó. Por último, insistió en que el campo de golf es un atractivo turístico más de la ciudad autónoma y sirve para generar empleo y dinero. “Muchos aficionados a este deporte se veían antes obligados a viajar a la península para jugar. Ahora, ese dinero se queda en Melilla y además vienen visitantes. No es un 'todo', pero sí una parte más de la ciudad”, subrayó.