El Gobierno autonómico pone el PGOU a disposición de los melillenses

Se expondrá de manera pública hasta mañana en el Palacio de Congresos. El documento también puede descargarse de la web de la la Consejería de Fomento.

Tras haber recibido la aprobación inicial de la Asamblea local, el Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) fue expuesto ayer a las 18:00 horas de manera pública para que distintas asociaciones, colegios profesionales y entes dependientes de la Administración estatal hagan   sugerencias y peticiones. Así lo anunció el consejero de Fomento, Miguel Marín, quien subrayó que la principal intención del Gobierno local ha sido la de dotar de la mayor transparencia posible al PGOU para que los ciudadanos estén informados al máximo sobre su contenido.
En declaraciones realizadas en rueda de prensa, el consejero explicó de manera detallada los principales contenidos de este documento y cómo se expondrá al público, al tiempo que destacó su importancia, pues servirá de guía para el desarrollo urbanístico de la ciudad autónoma durante los próximos ochos años.
Marín explicó que las actuaciones recogidas se han redactado con la previsión de que en el año 2023 la población local haya pasado de las 82.500 personas que la habitan hoy día a 110.837. Por ello, se ha puesto especial hincapié en la creación de viviendas y se construirán 7.900, tanto de iniciativa privada como pública. Asimismo, el consejero afirmó que con el PGOU se eliminará cualquier atisbo de especulación urbanística y se evitará “hipotecar el futuro de las generaciones venideras”, apostando por un desarrollado bien planificado y con la sostenibilidad como principal eje.
Varias zonas han quedado excluidas de este documento, aquellas sobre las cuales no tiene competencia la Ciudad Autónoma. El puerto, el aeropuerto, perímetro fronterizo y terrenos pertenecientes al Ministerio de Defensa han actuado como “límites territoriales” del PGOU.
Una clara muestra de la apuesta por la sostenibilidad es que el suelo urbanizable aumentará un 2,13%, hasta alcanzar el 55,2% del total de la superficie de Melilla. También hay un 14,06% de terrenos rurales protegidos y un incremento de 166.000 metros cuadrados en lo que respecta a las zonas verdes, lo que supone un aumento del 63% con respecto a las actuales. “Se trata de actuaciones que mejorarán el nivel de vida de los ciudadanos”, aseveró el consejero de Fomento, quien añadió que se instalará equipamiento urbano en una superficie discontinua de 259.000 metros cuadrados.
Asimismo, recalcó que el PGOU no da la espalda al crecimiento económico, pues se ha planificado un incremento del 77% en  lo tocante a suelo de uso industrial, lo cual supone actuar en 490.000 metros cuadrados de la ciudad autónoma.
Todas estas iniciativas las pueden consultar los melillenses tanto en el Palacio de Exposiciones y Congresos (PEC) como en la web de la Consejería de Fomento, a la cual se accede mediante la correspondiente pestaña situada en el margen izquierdo de www.melilla.es. Una vez dentro, se puede descargar el documento pulsando en el enlace que se encuentra en la parte inferior.
En lo que se refiere a la protección del patrimonio local, el PGOU incluye un catálogo de edificios cuyo valor cultural prohíbe que se puedan modificar. De los 89 inmuebles recogidos, hay 20 que están protegidos de manera integral, por lo que son, a efectos prácticos, completamente intocables. El resto tienen protección parcial, lo cual significa que si su propietario decidiera llevar a cabo algún tipo de obra “deberá respetar el estilo arquitectónico de la fachada”.
Por otro lado, se han enumerado las zonas donde hay más probabilidades de encontrar restos arqueológicos, siendo Melilla La Vieja el lugar en el que hay que actuar con mayor precaución en caso de construcción. Además, el documento también cataloga el suelo de la ciudad autónoma según el precio del suelo y las previsiones de fluctuación económica para los próximos años.
Por último, el PGOU incluye un informe de viabilidad económica, en el que se estima la inversión necesaria para llevar a cabo todas las actuaciones recogidas en el documento. Así, se calcula que serán necesarios 184 millones de euros, de los cuales 58 millones los aportaría la Ciudad Autónoma, 71 millones llegarían de mano de la Administración del Estado y los 55 millones de euros restantes serían de inversión privada.

Planes ambiciosos en algunas barriadas de la ciudad autónoma.

El consejero realizó un resumen sobre las principales iniciativas recogidas en el PGOU, en el que se refleja que varios barrios de la ciudad autónoma sufrirán una profunda transformación. Es el caso del Industrial, donde se crearán dos nuevos aparcamientos subterráneos, uno en la entrada norte, al lado del Río de Oro, y otro en la sur, cerca de la Plaza de La Goleta.
Ambicioso es también el proyecto reservado para los antiguos acuartelamientos de Santiago y Gabriel de Morales, que contarán con una promoción de viviendas de construcción pública y privada, un parque de 20.000 metros cuadrados, un centro educativo y equipamiento deportivo. El objetivo es que estos terrenos se conviertan en una suerte de extensión de la zona centro de la ciudad autónoma.
Una zona que también sufrirá un profundo lavado de cara es el Callejón de la Marina. Después de planificar el lugar para que albergara el parque de mayor tamaño de Melilla, finalmente se ha optado por un híbrido entre la idea que manejaba el Gobierno local y la que planteaba Coalición por Melilla (CpM). Así, se crearán 30.000 metros cuadrados de zona verde, 12.000 metros cuadrados de instalaciones deportivas, 9.000 de viviendas y otros 12.000 para uso docente.

“Las viviendas de Infanta Elena no se derribarán”.

En rueda de prensa, el consejero de Fomento quiso adelantarse a “posibles rumores maliciosos” y aseguró que las 89 viviendas de la calle Infanta Elena, situada en el barrio de El Real, “no se demolerán”. En este sentido, Marín explicó que en el PGOU está previsto construir en dicha ubicación un parking, lo cual sólo ocurrirá “si existe un acuerdo con los vecinos”.
“Los vecinos pueden estar totalmente tranquilos, no se va a tocar sus casas”, aseveró el consejero. Del mismo modo, explicó que la mayor parte de los habitantes  de esta zona son personas de edad avanzada y que en caso de que existiera un acuerdo para que dejaran libres sus hogares se les trasladaría a nuevas viviendas con accesibilidad para personas con problemas de movilidad. En caso de que no se llegara a un entendimiento, “todo seguiría igual”