El macro concierto ‘La Vieja’ programado por el Patronato de Turismo en conmemoración del Día de Melilla dirigido especialmente a la gente joven no ha tenido los resultados con los que sin duda alguna fue organizado.
La asistencia de público a esas ocho horas de música ha sido muy escasa. Ni los grupos locales ni siquiera los peninsulares –de talla internacional– han sido capaces de concentrar a un número de personas suficiente que permita repetir la iniciativa o incluso, plantear esos ‘Paquetes jóvenes’ que Mateo sugirió en la presentación del concierto para facilitar la llegada de aficionados a este tipo de música de la península.
Atribuir toda la responsabilidad de este fracaso al Patronato no sería justo, porque buena parte de ella la tiene esa juventud que no acudió a ver a estos grupos, la mayoría de ellos locales y por tanto conocidos, en un marco desde luego muy apetecible y quizá el más apropiado.
Bien es cierto que quizá se le podría haber dado más difusión, pues se anunció muy cercano a la fecha del espectáculo, pero aún así, sigue sin ser suficiente escusa para que la Plaza de las Culturas no registrase un lleno hasta la bandera.