El Consejo de Gobierno aprueba la subvención para adquirir depósitos de agua para viviendas unifamiliares

El Consejo de Gobierno ha aprobado diferentes propuestas este viernes, entre las que se encuentra una subvención para que las viviendas unifamiliares puedan adquirir un depósito de agua y tener continuidad en el suministro. También ha anunciado Daniel Conesa, consejero de Haciendo, que se han aprobado dos recursos contenciosos administrativos contra el SEPE por no incluir el plus de residencia en las subvenciones a dos talleres de empleo. 

La Consejería de Medio Ambiente ha presentado una convocatoria de subvención para la adquisición de depósitos de agua para viviendas unifamiliares que carezcan de instalaciones que permitan la continuidad temporal del suministro cuando se produce algún  corte de agua, como está ocurriendo con las obras que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) lleva a cabo en la desaladora. 

La convocatoria es por concurrencia no competitiva, es decir, es abierta para la ciudadanía. Se ha establecido un presupuesto limitado a 30.000 euros, siendo 1.400 euros de subvención la cuantía máxima que podrá recibir cada vivienda. 

Una vez que se vayan solicitando, si las peticiones cumplen con los requisitos, se irán otorgando hasta que se agote la partida presupuestaria que ha establecido la Ciudad. Con estas cuantías, alrededor de 29 familias podrán instalar en sus casas depósitos de agua que les permitan mantener el suministro de agua de forma continuada. 

De esta manera, explica Daniel Conesa, los ciudadanos podrán tener una solución temporal a este problema hasta que haya un suministro de agua las 24 horas del día. Alude al anterior consejero de Medio Ambiente, Manuel Quevedo, para estimar que a principios del año 2025 esta situación podría ser una realidad y Melilla podría disfrutar de agua mineral ininterrumpidamente, salvo casos excepcionales como averías o instalaciones. 

Recursos contenciosos

Por otro lado, la Consejería de Economía, Comercio, Innovación Tecnológica, Turismo y Fomento ha propuesta la interposición de dos recursos contenciosos administrativos contra la resolución de noviembre de 2022 al Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) de Melilla y que el Consejo de Gobierno ha aprobado. 

Explica Daniel Conesa que el SEPE concedió el año pasado una subvención a la Ciudad Autónoma para poner en marcha la Escuela Taller de Patrimonio Artístico y Cultural y el Taller de Empleo para la Prestación de Servicios a las Personas con Dependencia. Lo que ha sucedido, dice, es un “clásico” con el que ya se topaba cuando era consejero de Economía. 

En la subvención, el SEPE no incluye el concepto por plus de residencia que hay que abonar obligatoriamente por ley a los trabajadores y, por tanto, es la Ciudad quien ha tenido que pagar dicha cuantía. 

Se trata del primer recurso contencioso que el Ejecutivo va a plantear al respecto para que el SEPE le devuelva 2.394 euros por el plus de residencia de la Escuela Taller y 7.847 euros por el del Taller de Empleo. 

Como es una situación que se da desde hace bastantes años, Conesa asegura que la Ciudad siempre gana el recurso contencioso porque es un error del SEPE que seguirá ocurriendo hasta que “acepte este planteamiento” e incluya el plus de residencia dentro de la subvención. 

Direcciones generales

Asimismo, entre otros asuntos, el Consejo de Gobierno ha aprobado la propuesta de la Consejería de Presidencia y Administración Pública para el cese por renuncia del actual director general de Empleo y Comercio porque, explica Conesa, dicha área desapareció con la llegada del nuevo Gobierno, ya que pertenecía a la antigua Consejería de Hacienda, Empleo y Comercio. 

También se ha aprobado el procedimiento para la provisión del puesto de director general de Política Deportiva mediante el procedimiento habitual, al que podrán presentarse, según las bases de convocatoria, los funcionarios de carrera (tanto de la Ciudad como de cualquier otra Administración), los empleados públicos o personal laboral que tenga la titulación correspondiente. 

Teatro Kursaal

La consejera de Cultura, Patrimonio Cultural y del Mayor, Fadela Mohatar, habría solicitado un informe sobre los desperfectos del Teatro Kursaal y la solución que tendría que tomar la Ciudad para arreglarlos. “No creo que se haga una gran obra de rehabilitación en el edificio hasta que el informe esté terminado”, dice Conesa. 

Debido a los problemas de mantenimiento y los desperfectos ocasionados, la actividad en el Kursaal ha tenido que ser cancelada indefinidamente hasta que se lleven a cabo las obras pertinentes y el edificio se encuentre correctamente habilitado para poder volver a retomar su actividad. 

Sobre eso, el consejero ha recordado que el Gobierno anterior recibió un teatro con ocho años de uso y que era una construcción “nueva” que se había hecho en un edificio casi centenario. “Por muy rehabilitado que esté, hay que mantenerlo dado el fuerte uso que ha tenido”, añade. 

En ese sentido, Conesa ha vuelto a recriminar el mal trabajo que hizo la exconsejera de Cultura, Elena Fernández Treviño, en el mantenimiento del inmueble porque “diga lo que diga” no lo mantuvo como debiera. Este es un problema que ha desembocado en el cierre temporal del epicentro de la actividad cultural de Melilla. “Se durmió en los laureles y no hizo nada”. 

Ha puesto de relieve que los equipos de climatización o las mesas de sonido se instalaron en el año 2011 y que, más de diez años después, deberían haberse modernizado. También ha aludido a los problemas de seguridad que supone el suelo escénico, en el cual es imposible montar la concha acústica. 

Cine Perelló

Preguntado al respecto sobre si hay más avances en la posible compra-venta del Cine Perelló, Conesa ha señalado que, aunque escapa a su área, sabe que hay reuniones pendientes con los propietarios del inmueble, pero desconoce el estado en el que se encuentra actualmente la negociación. 

La anterior consejera de Cultura expresó el interés de la Ciudad Autónoma en adquirir el Teatro Cine Perelló, ante el temor de que una empresa privada se quedase con el inmueble y lo utilizase para otros fines comerciales, perdiendo así el único cine de la ciudad. Tras varias reuniones antes de los comicios autonómicos, el acuerdo de compra-venta se quedó en el aire con el cambio de Gobierno.